Obispo de Holguín: 'Como Iglesia nos corresponde favorecer la creación de espacios de diálogo'

El obispo de Holguín, Emilio Aranguren Echeverría, expresó su preocupación por la situación en Cuba y llamó a rezar por el país en todas las celebraciones de Semana Santa, "para que Cristo guíe las decisiones de los gobernantes hacia la paz y la libertad", informó la agencia de noticias católica ACI Prensa.

La preocupación fue expresada en un texto firmado por monseñor Aranguren junto al obispo auxiliar de Holguín, monseñor Marcos Pirán Gómez. En el documento, los obispos manifiestan su dolor ante la situación que vive Cuba, donde el 17 de marzo se registraron importantes protestas pacíficas por la falta de electricidad y comida, fundamentalmente.

"Los recientes acontecimientos en diversos lugares del país han creado una mayor tensión en el seno del pueblo, ante la cual queremos animarlos a responder desde nuestra condición de cristianos que nos esforzamos por interpretar los hechos a la luz de la fe, para descubrir las señales que el Señor nos pone en el camino y así podamos escuchar su voz en medio de tantos ruidos", escribieron.

Por ello, animan a los fieles a ofrecer sus "oraciones en todas las celebraciones que tendremos en la Semana Santa, pidiendo por el bienestar de todos los que vivimos en esta tierra cubana". "Tanto por quienes gobiernan, para que el Señor guíe sus pensamientos y decisiones hacia la paz y la libertad de todos los hijos e hijas; así como por cuantos conformamos esta gran familia, para que asumiendo con responsabilidad nuestra misión, contribuyamos al bien común en beneficio de todos", afirmaron.

En su texto, los prelados también alentaron a practicar la solidaridad con los más necesitados, aliviando sus carencias. "Confiamos que, aportando estas pequeñas y grandes obras de bien, se ayuda a recuperar la confianza en el valor de la fraternidad, de la amistad social tan necesaria para soñar con una patria de hermanos", aseguraron.

"Como Iglesia nos corresponde favorecer la creación de espacios de diálogo, en los que participen distintos sectores de la sociedad, para buscar los caminos que nos ayuden a salir adelante con una disposición sosegada y esperanzadora", dijeron.

Emilio Aranguren y Marcos Pirán pidieron a la Virgen de la Caridad, patrona de Cuba, que ayude a los cubanos "a dar pasos firmes, concretos, que expresen nuestro compromiso".

En tal sentido, sugirieron "que el Sábado Santo, en que contemplamos la soledad de la Virgen en su dolor, nos unamos en la oración confiada a ella, con la firme esperanza que nos trae la resurrección de su hijo Jesús".

Asimismo, invitaron a los cubanos a seguir el ejemplo de San José para crecer en la fe en Dios, "para quien no hay nada imposible", y así, "fuertes, firmes y serenos" vencer la crisis que afronta el país, "respondiendo a los desafíos que la realidad actual nos presenta".

En contraposición al mensaje conciliador de los prelados de Holguín, otros sacerdotes cubanos se expresan frecuentemente con vehemencia respecto a la situación de Cuba y cuestionan las actuaciones del régimen. El padre Alberto Reyes, de la Arquidiócesis de Camagüey, denunció a principios de marzo el asedio de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista contra la Iglesia Católica en Cuba. 

"No es normal ese acoso continuo que ahora se ha radicalizado por la defensa de la Iglesia de la inocencia de los presos políticos. ¿Qué hacemos? Trabajamos. Enfrentarnos directamente a este sistema yo creo que nos llevaría o a la destrucción o al desánimo y eso no lo podemos permitir... Ignoramos sistemáticamente las presiones y las amenazas de la Oficina", sentenció.

"Yo espero que Dios nos sorprenda en cualquier momento. A nivel humano, no hay síntomas de que vaya a haber un cambio mañana, pero el 10 de julio Cuba era paz y tranquilidad y el 11 de julio fue una explosión y esto podría pasar otra vez", concluyó Reyes.

El sacerdote ha cuestionado en reiteradas ocasiones al Gobierno cubano y en julio de 2023, por ejemplo, dijo a ACI Prensa que "la causa del deterioro de la libertad religiosa en Cuba" es el "Gobierno totalitario" que rige en el país. Al buscar el control absoluto, necesita también "tener el control sobre la Iglesia: qué se permite, qué no se permite, de acuerdo a sus propios intereses".

Otro de los representantes católicos que sostiene un discurso crítico hacia el régimen es el joven párroco Kenny Fernández, quien se ha caracterizado por denunciar continuamente la represión, la situación de los presos políticos, la censura y la violación de los derechos humanos y de la libertad religiosa. Por mantener este comportamiento, a través de habituales publicaciones en sus redes sociales, ha sido hostigado e interrogado por la Seguridad del Estado.

"Nuestro país se ha vuelto más inseguro por la impunidad que gozan algunos delincuentes, y ellos los saben, y eso les da más alas", criticó Fernández en enero, luego de denunciar varios robos en la Casa Parroquial de Madruga y la Iglesia de Catalina de Güines.

"¿Qué hemos hecho mal para que nuestros jóvenes no se sientan orgullosamente cubanos? ¿Qué hemos hecho mal para que todo el mundo quiera irse de eso que precisamente configura la identidad más honda y pura? ¿Qué hemos hecho mal para que jóvenes cubanos prefieran irse a combatir a Ucrania, para conseguir la nacionalidad rusa?", cuestionó en septiembre de 2023 el padre Léster Rafael Zayas en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, tras una peregrinación de la Virgen de la Caridad del Cobre por las calles del Vedado, en La Habana.