El cubano de 19 años Dayán Sotolongo García, quien, tras sus denuncias en redes sociales fue trasladado a La Habana desde Pinar del Río para tratarse el linfedema en grado cuatro que padece, está de regreso en su casa. Ante la falta de los recursos necesarios en el Instituto de Angiología y el riesgo de adquirir una infección en la piel, el joven prefirió recibir el alta.
"Me hicieron un electro, un ultrasonido y análisis de sangre", cuenta Sotolongo a DIARIO DE CUBA. "Después, me dijeron que debía estar ingresado un mes en el hospital haciendo reposo. Pero no hay vendas elásticas, que es lo que yo necesito para que los pies no se sigan hinchando".
"No hay medicamentos, no hay nada. Además, había un compañero que se bañaba donde mismo me bañaba yo, que tenía una infección en la piel. Yo la piel tengo que cuidármela mucho. No puedo arriesgarme a coger una infección", explicó.
El linfedema es un tipo de edema producido por una obstrucción en los canales linfáticos del organismo. Obedece, por lo general, a un fallo o a una insuficiencia en el sistema linfático. Los casos graves pueden aumentar los riesgos de infecciones cutáneas.
"Yo tampoco tenía quién me llevara comida ni nada. Solamente una vez, que una amiga me pudo llevar algo. Pero ahí daban poca comida y nada más que desayuno, almuerzo y comida. Para pasar hambre y sin tener las vendas elásticas, prefiero estar de reposo en la casa", dijo.
Por ese motivo, Sotolongo García decidió solicitar el alta médica y regresar a Santa Lucía, el pueblo de Pinar del Río donde vive con su hermana, dos años mayor que él.
Antes de denunciar su situación en las redes sociales, hacía más de un año y medio que al joven no lo atendía un especialista.
"Yo he estado ingresado otras veces en otras provincias y siempre me mandan lo mismo, que si las vendas elásticas, que si el reposo", dice el pinareño, que padece esta enfermedad hace siete años y no confía en hallar solución dentro del sistema de Salud Pública de Cuba.
Sotolongo García asegura que conoce a una mujer que tenía un problema parecido y fue operada en la Isla. Luego no había los medicamentos que necesitaba de por vida para mantener el tratamiento y actualmente está peor.
"A mí me han visto médicos de España y de Estados Unidos. Me vieron aquí en Cuba. Me decían: 'Dayán, ya esto no es de tratamiento; esto es de cirugía", cuenta. Su caso, explica el joven, requiere tres operaciones, además de un tratamiento.
Algunas amistades lo están ayudando a obtener una visa humanitaria para tratarse en Estados Unidos, pero explica que en ese país "una clínica tiene que aprobar que yo sea tratado allí".
Esas amistades han iniciado una campaña de recaudación de fondos en la plataforma Gofundme.com, para costear su viaje y sus gastos médicos en EEUU. Para ello, le abrieron a Sotolongo García una cuenta en Instagram.
Mientras, el linfedema limita severamente la vida de este cubano de 19 años. En los casos graves de esta enfermedad, como el de Sotolongo García, puede reducirse la capacidad de movimiento de la extremidad afectada. Para él, se trata de las dos piernas, que están extremadamente inflamadas.
Apenas puede caminar en estos momentos y para colmos vive en el cuarto piso de un edificio sin elevador. No puede trabajar, por lo que recibe una ayuda de la Asistencia Social de 1.500 pesos, que equivale a cinco dólares en el mercado informal cubano y a poco más de diez, según la tasa de cambio oficial fijada por el Gobierno (1x120 CUP). Su hermana tuvo que dejar el trabajo hace poco para atenderlo, porque sufrió una lesión debido a la hinchazón de los pies.
"No puedo trabajar y casi no puedo caminar. Me dan 1.500 pesos al mes. Con eso no vivo; lo que hago es pedir dinero prestado y después lo voy pagando", explica.
"Mi hermana estaba trabajando en Pinar del Río, porque aquí en Santa Lucía no encontraba trabajo en nada, pero tuvo que dejarlo porque hace poco me hice una luxación en una rodilla. Es demasiado el peso (de las extremidades hinchadas). Yo trataba de hacerme mis cosas, mientras ella trabajaba, pero no puedo. Somos ella y yo solos". Sotolongo García y su hermana son huérfanos de madre y padre.
Este joven es uno de los cada vez más cubanos, cuya única esperanza para curarse de enfermedades graves es salir del país. Las denuncias y pedidos de auxilio de los residentes en Cuba, tanto para conseguir medicamentos como para obtener una visa humanitaria, desbaratan la imagen de potencia médica que por años ha vendido el Gobierno a la opinión pública internacional.
La familia debe llevarlo al Cira Garcia y al Cimex y grabar en directo el recibimiento que allí recibiría.
Los millones que en basureros y colas buscan algo para comer deberían ir a donde esta la comida que les pertenece: hoteles, casas de protocolo, restaurantes y tiendas en divisas.
PUEBLO SIN dinero
PUEBLO SIN comida
PUEBLO SIN ropas
PUEBLO SIN zapatos
PUEBLO SIN agua potable
PUEBLO SIN electricidad
PUEBLO SIN protección policial
PUEBLO SIN transporte
PUEBLO SIN ambulancias
PUEBLO SIN medicinas
PUEBLO SIN servicios médicos
PUEBLO SIN disfrute de sus playas
PUEBLO SIN libertad
PUEBLO SIN higiene
PUEBLO SIN recogida de basura
PUEBLO SIN futuro
PUEBLO CON gobierno ladrón
PUEBLO CON gobierno asesino
PUEBLO CON esclavitud
PUEBLO CON criminalidad rampante.
PUEBLO CON cárceles llenas
PUEBLO CON tiendas vacías
PUEBLO ¿¡HASTA CUANDO VAS A AGUANTAR ESE INFIERNO!?
UNA SUBLEVACIÓN NACIONAL ES NECESARIA YA. MUERTE A RAÚL CASTRO MUERTE A RAMIRO VALDÉS MUERTE A LÓPEZ MIERDA.--------
CUBANO, no esperes a que el tiempo los mate, adelántate al tiempo. Si eres policía o militar no uses tu arma contra tu pueblo, úsala a su favor y serás un héroe. ESOS VIEJOS NO SON HUMANOS, SON DEMONIOS, ASESINOS Y VENDEPATRIAS.--