La ministra de Trabajo y Seguridad Social de Cuba, Marta Elena Feitó Cabrera, admitió este miércoles que muchos estudiantes del país se ven obligados a trabajar para subsistir mientras estudian, o a abandonar las aulas. Este reconocimiento llegó dos meses después de que la prensa estatal intentara disfrazar de "emprendimientos" los trabajos que realizaban para sobrevivir varios jóvenes que cursaban carreras universitarias.
Feitó Cabrera aseguró que es una prioridad para el Gobierno "la protección de un grupo de jóvenes que sienten la responsabilidad de incorporarse a trabajar mientras estudia, para generar mayores ingresos a sus familias en condiciones de vulnerabilidad", en declaraciones al medio estatal Granma, tras la reunión de chequeo de las acciones para la implementación de la Política para la Atención Integral de la Niñez, la Adolescencia y las Juventudes en Cuba.
Granma destacó que "las acciones para potenciar el empleo y la atención a los jóvenes que estudian o trabajan y conviven en familias en condiciones de vulnerabilidad resultan de alta prioridad para el país" y que forman parte de la mencionada política, aprobada por la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en julio de 2023.
De acuerdo con la titular cubana de Trabajo y Seguridad Social, en esas acciones predomina " la búsqueda de la transformación y no el asistencialismo". En ese sentido, se refirió a la celebración, el año pasado, de la primera Feria de Empleo, que calificó de "novedosa".
Según la ministra, más del 60 % de las personas que accedieron a las ofertas de empleo en la Feria fueron jóvenes. Esa tendencia también marcó la participación en los cursos de formación, al registrarse una cifra mayor al 62% de cubanos en estas edades, afirmó.
Feitó Cabrera resaltó, como otra novedad, que la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) realiza un levantamiento en todas las instituciones de la Educación Superior para conocer "qué jóvenes conviven con familias en situación de vulnerabilidad, y también para rescatar a otros que ya han abandonado los estudios".
La ministra dijo que existen otras acciones destinadas a jóvenes que "buscan alternativas para alcanzar ingresos económicos durante el periodo en que cursan sus especialidades, mayormente en labores no relacionadas con los perfiles de las carreras en las que se forman".
Según la ministra, la estrategia debe estar dirigida a realizar acciones diferentes, porque "necesitamos incorporar a esta fuerza a trabajos asociados a sus perfiles, para aprovechar así su talento y formación en labores de mayor calificación". No obstante, no especificó en qué consisten las "acciones diferentes" para conseguir ese objetivo.
Feitó Cabrera aseguró también que en Cuba "existen todas las posibilidades legalmente para que estos jóvenes no abandonen los estudios y reciban alguna prestación económica por la asistencia social, de manera que puedan cubrir los ingresos monetarios que reclama su núcleo familiar y no tengan que dejar las aulas".
Las declaraciones de la ministra confirman que el abandono escolar se ha convertido en un problema grave en Cuba, debido a una crisis económica que ha disparado el éxodo migratorio, fundamentalmente de fuerza laboral joven y calificada.
En noviembre de 2023, un reportaje de DIARIO DE CUBA mostró que, solo en la Facultad de Agronomía de la sede Camilo Cienfuegos de la Universidad de Matanzas, decenas de estudiantes habían dejado la carrera. Entre las causas esgrimidas por jóvenes entrevistados por este diario aparecían las precarias condiciones del centro de estudios y los precios del transporte, que en una semana se tragaban el salario mínimo de Cuba (2.100 pesos).
No obstante, a principios del propio mes, el medio estatal Cubadebate exaltó a tres jóvenes estudiantes universitarias que, además de cursar sus respectivas carreras en la Universidad de La Habana, llevaban adelante "emprendimientos", que no guardaban relación con sus estudios.
Para tener "un poco más de autonomía", según celebró el medio estatal, estas jóvenes necesitaban hacer un esfuerzo extra en sus vidas cotidianas. Cubadebate no menciono qué ingresos obtenían con sus trabajos.
Otro problema que influye en el abandono escolar es el embarazo adolescente, que constituye un problema social en Cuba, según admitió la ANPP en julio pasado. Al respecto, la ministra de Trabajo y Seguridad Social recordó, según la citó Granma, que las modificaciones al Decreto-Ley de la Maternidad de las trabajadoras, aprobado en 2023, incluyen "como otra novedad" la protección a las madres en edades tempranas que estudian. Estas tienen el derecho de recibir todas las prestaciones insertadas en la norma jurídica.
Por último, Feitó Cabrera también reconoció "la presencia de un grupo no despreciable de jóvenes en trabajos informales". En esos empleos "no siempre existe toda la protección y garantías para el ejercicio de las labores que realizan, lo que requiere continuar profundizando en este asunto que también incluye a los empleadores", admitió la ministra.
"Estamos cambiando el enfoque de la informalidad, el asunto es respetar los derechos que establece el Código del Trabajo. Hay que verlo con enfoque diferente. Todas las personas que estén trabajando en esta vía deben exigir una formalización de su situación de trabajo", dijo.