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Exilio

De alta médica, pero sin un techo: el cubano Hector Lázaro González pide ayuda en EEUU

El periodista, de 39 años y con insuficiencia renal crónica, carece de recursos para instalarse en Miami y continuar con el tratamiento que no pudo conseguir en la Isla.

Miami
Héctor Lázaro González, un periodista cubano que migró a EEUU en busca de asistencia sanitaria.
Héctor Lázaro González, un periodista cubano que migró a EEUU en busca de asistencia sanitaria. Mónica Baró Sánchez/Facebook

El periodista cubano Héctor Lázaro González ya recibió el alta médica en EEUU después de llegar a ese país en precarias condiciones por la insuficiencia renal que no pudo tratar adecuadamente en la Isla, informó a través de Facebook la también periodista Mónica Baró Sánchez.

"Luego de 16 días hospitalizado en San Diego, estado de California, mi amigo Héctor Lázaro González será dado de alta mañana. Allí 'lo pasaron por chapistería', un médico divino que encontró: le trataron con antibióticos, le quitaron el catéter al corazón que tenía mal puesto, con infección y que no era de su medida, y le pusieron otro nuevo por el cuello, menos invasivo", precisó Baró en su publicación del sábado, evidenciando la mala praxis de la que fue víctima su colega durante los tratamientos que recibió en múltiples centros hospitalarios cubanos.

Sobre el estado actual del periodista cubano, que realizó una difícil travesía a través de Centroamérica para llegar a la frontera de EEUU, Baró señaló: "Héctor está entero. Listo para seguir con su diálisis, hasta que logre clasificar en algún programa para transplante de riñón y someterse a cirugía".

"El problema —continuó Baró— es que Héctor no tiene para dónde ir. Este jueves llegará a Miami en la tarde, porque aquí la comunidad cubana es más grande y el médico de San Diego le dijo que podían transferirle el tratamiento de diálisis para allá con una dirección, o que Héctor podía llegar a un hospital donde hicieran lo mismo que hizo el de San Diego: tratarlo con un Medicaid de urgencia (programa de asistencia sanitaria de emergencia para inmigrantes)."

La periodista cubana exiliada en EEUU pidió ayuda para que González pueda asentarse en Miami: "Estamos buscando un refugio en cualquier sitio de la ciudad que pueda acogerlo temporalmente, o una renta de un cuarto a un precio módico. Ahora mismo lo que queda del crowdfunding (colecta de dinero que financió el viaje de González) son unos 3.000 dólares, pero queremos organizar otro para que Héctor pueda cubrir sus gastos los primeros meses, hasta que él consiga un trabajo, porque él puede y desea trabajar".

Baró también pidió ayuda a la comunidad cubana para que González pueda trabajar: "Quien tenga un 'trabajito' en lo que sea que ofrecerle o tenga información útil, también es bienvenida. No podrá a lo mejor trabajar en la construcción haciendo mucha fuerza, pero en cualquier otra cosa sí".

"Héctor es una persona excelente, seria, respetuosa, honrada, trabajadora, noble, y cristiana. Hasta ahora en ninguna iglesia ha encontrado posibilidad de refugio, pero si saben de alguna que pueda recibirle, estaremos agradecidos", concluyó Baró.

González, de 39 años, padece una insuficiencia renal crónica en fase terminal y ha pasado por dos cirugías recientemente. Después de transitar por varios países de Centroamérica (no obtuvo una visa humanitaria para viajar directamente), González se presentó en muy mal estado ante las autoridades de EEUU en la frontera de ese país con México. Este periodista necesita someterse a un programa de diálisis peritoneal, algo que no pudo recibir en Cuba por la falta de insumos.

El proyecto Cubadata cuantificó con una encuesta el drama de la Salud Pública cubana, que las autoridades cubanas atribuyen invariablemente al embargo de EEUU, aunque no escatiman recursos para construir hoteles.

Los datos que reveló el sondeo son tan abrumadores que apuntan a una crisis humanitaria. Cubadata demostró que existe una clara tendencia hacia una mayor dificultad en el acceso a medicinas en Cuba. Más de la mitad de los cubanos encuestados (55,8%) calificó como "imposible" el acceso a medicamentos. Si se suman a ellos los que afirmaron tener "mucha dificultad", el 80,3% de la población consultada enfrenta serios problemas para obtener los fármacos que necesita. 

En cuanto a la posibilidad de conseguir atención médica, aunque el porcentaje de personas que encuentran "imposible" obtenerla es menor (23,2%), sigue siendo preocupante. Si se suman los encuestados que dijeron tener "mucha dificultad", se concluye que el 57,6% enfrenta serios obstáculos para obtener atención médica.

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1 comentario

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..."no obtuvo una visa humanitaria para viajar directamente"...mientras muchos camajanes reciben paroles humanitarios y viajes directos este hombre enfermo tuvo que hacer la travesia por centroamerica para que despues de todo eso lo dejaran entonces entrar a los USA...maravillas de migracion cuando se hace politica...