El médico José Emilio Rosabal Estacio denunció esta semana que su nombre fue incluido sin su conocimiento y consentimiento en un peritaje vinculado con el juicio contra seis cirujanos cubanos en Bayamo, provincia de Granma, procesados por responsabilidad penal tras la muerte de un paciente intervenido quirúrgicamente con los escasos recursos disponibles.
Rosabel Estacio, especialista de segundo grado en Cirugía, profesor auxiliar y máster en Urgencias Médicas con más de 40 años de experiencia, a través de su colega exiliado Alexander Jesús Figueredo Izaguirre, realizó un pronunciamiento sobre su inclusión en presuntos documentos legales del caso.
El profesional se sorprendió al hallar su nombre relacionado con la Comisión Nacional de Responsabilidad Médica, según el cual él habría participado en el dictamen pericial que respaldaba la solicitud fiscal relacionada con el fallecimiento, en diciembre de 2021, de un joven de 23 años atendido por un equipo médico en el Hospital General Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo.
El doctor escribió: "Me veo obligado a dar respuesta en el mismo escenario en que he sido agredido porque no considero que aparezca en un documento, sea real o falso, cuando no forme parte de él. Nunca fui miembro de una Comisión Nacional. Nunca me reuní con ninguna de las partes. Nunca firmé ningún documento y si aparece (mi nombre) es falso. Pretenden ocultar a alguien que sí estuvo en la comisión y mal intencionadamente fui incluido".
"No soy un hombre cirujano mediático. Si hubiera participado en dicha Comisión sería lo suficientemente capaz de responsabilizarme con mi criterio, defenderlo y que se me respetara. Nadie está en el derecho de tomar mi nombre para alcanzar algún objetivo", añadió.
"Si la defensa de mis colegas considera que hay alguna irregularidad en lo que se hizo sin mi participación, pueden tomar lo escrito por mi persona sin ningún miedo. Percibo fallas en el procedimiento que pudieran llegar a ser muy graves por sus consecuencias. La transparencia y claridad son el éxito de nuestro actuar", señaló.
El cirujano trasladó sus "más sentidas condolencias" a los familiares del paciente fallecido y también lamentó "infinitamente lo que deben estar sufriendo" sus colegas por ser cuestionados en el ejercicio de la práctica médica.
El Observatorio Cubano de Salud Unidos y el Colegio Médico Independiente en Cuba enviaron este miércoles una carta abierta al ministro de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda, en la que condenaron el escarnio público al que han sido sometidos los seis cirujanos cubanos procesados, denunciaron las deplorables condiciones actuales del sistema de salud y demandaron explicaciones sobre el destino de las sumas millonarias en la última década recaudadas por la exportación de los servicios profesionales médicos.
Los firmantes del documento, entre ellos los doctores Alexander Jesús Figueredo Izaguirre, Arnoldo de la Cruz Bañoble, Sergio Barbolla Verdecia y Jorge David Yaugel, manifiestan "descontento con las autoridades de salud del municipio de Bayamo y la provincia de Granma" por el procesamiento penal de los cirujanos Rafael José Sánchez Vázquez, Yoandra Quesada Labrada, Ristian Solano, Elizabeth Silvera, William Pérez Ramírez y Henrry Rosales Pompa.
En opinión de los promotores de la carta, "a los tribunales deberían comparecer como acusados los responsables por desviar los recursos aportados por las brigadas médicas", a quienes identifican como "los verdaderos culpables de la crisis del sistema nacional de salud, de las muertes masivas durante la pandemia por falta de balones de oxígeno, medicinas y ambulancias, de los fallecimientos de pacientes por carecer de fármacos para controlar enfermedades crónicas o para poder los médicos realizar exitosamente su trabajo en los quirófanos".
La Dirección General de Salud Pública de Granma dijo el 27 de noviembre que se ha "distorsionado" el caso de los médicos enjuiciados. El ministerio hizo control de daños en una declaración en la que aseguró que los cirujanos procesados por la muerte de un paciente siguen habilitados y en libertad, en espera de la sentencia.
Hay que esperar la respuesta del gobierno a esto que parece una desfachatez enorme.
Aunque muchas veces el silencio es la respuesta de quien no siente la necesidad de explicar nada.
Un poder judicial independiente puede hacer la zafra con esta tragedia granmense.
Pero en Cuba hay "unidad de poderes " y, entonces, el poder lo tiene el matrimonio Partido-gobierno.
La justicia y los juristas se subordinan a lo políticamente conveniente.
El juicio será un teatro, una coreografía de batas negras contra batas blancas para que la manada hipnotizada crea el cuento del Estado de derecho.
Este médico sabe cuáles serán las consecuencias de sus declaraciones.
Negarte a que el gobierno use tu nombre sin tu consentimiento para el sublime propósito de defender la revolución de los "odiadores " que la atacan es una afrenta que no quedará impune.