El Gobierno de La Habana raciona aún más el expendio de combustible en las gasolineras

El Gobierno de La Habana anunció que racionará la venta de combustible en los servicentros de la capital de Cuba donde compran todos los choferes, y que a diferencia de aquellos de organismos y entidades oficiales, han visto hacerse interminables colas en las últimas semanas debido a la escasez de gasolina y diésel.

De acuerdo con el sitio oficial del órgano de gobierno habanero, en lo adelante la venta máxima del diésel por vehículo será de hasta 100 litros, mientras que la de cada tipo de gasolina tendrá un tope de hasta 40 litros.

La nota oficial indica que "es importante cumplir la orientación de servirla en el depósito del vehículo", por lo que se prohíbe llenar tanques u otros depósitos fuera del medio automotor.

Según Vivian Torres, vicepresidenta de Logística del Grupo Empresarial CIMEX, en los servicentros "se ha definido un límite de venta por tipo de combustible, y se precisa la información clara a la población en cada servicentro, sobre la cantidad que será posible comercializar".

Las gasolineras donde se imponen estas restricciones son la de Coyula, en 19 y 64, en Playa; Tángana; El Mar, en 41 y 42; Rotonda de Guanabo; Los paraguas; Tropicana; El Jardín (Zapata y 4); Infanta y San Rafael; Riviera; 5ta y 112; Corral Falso, en Guanabacoa; Pequeño gigante, en Boyeros; Alameda en 10/10; Alamar; La Granjita, en Arroyo Naranjo, El Lido; Managua; La Rampa; 5ta y 120, y Rotonda, en Guanabacoa. En estas se vende con prioridad las gasolinas B94, B90 y B83.

En el caso del diésel, o petróleo, utilizado sobre todo por los transportistas privados, los servicentros priorizados para su venta son el de Bacuranao, en Habana del Este; 31 y 18, en Playa; El Principal, en Boyeros, y Agua dulce, en Cerro. En estos últimos pueden comprar, además de los transportistas privados, los "proyectos de colaboración con tarjeta privada", dice la nota.

Las inmensas colas ante las gasolineras cubanas han provocado la irritación de los cubanos, después que la escasez de combustible comenzara a golpear con más fuerza desde fines de marzo. No obstante, no fue hasta el viernes último que Miguel Díaz-Canel hizo el primer reconocimiento oficial del problema, cuando responsabilizó a los proveedores extranjeros de la escasez.

No obstante, el lunes Vicente de la O Levy, el ministro de Energía y Minas, aseguró que el culpable es sobre todo el embargo de EEUU. Hablando para la televisión, el funcionario reconoció que el problema no tendrá solución "en los días que quedan de abril y en mayo".

En cambio, alabó la decisión de racionar el combustible con que cuenta el país. "A partir de la falta de combustible o de suministros estables se tomó una decisión correcta de sacar a la distribución capacidades disminuidas en comparación con el consumo normal de un día. Se está sacando y se seguirá sacando una capacidad disminuida; es decir, que no va llegar a punto de cero gracias a esta medida", dijo.

Luego reconoció que "en los días que quedan de abril se va a seguir sacando una cantidad que es poca, es bastante poca. Esa es la situación de las colas que vemos en los servicentros, y (el racionamiento) ha permitido que no lleguemos a cero combustible".

Indicó, sin ofrecer detalles, que la situación "tiende a una mejoría" a partir de negociaciones y de "suministradores que ya están cumpliendo sus compromisos", sin mencionar cuáles.

Según De la O Levy, los suministradores de La Habana "han tenido problemas con los insumos para producir y para cumplir con los compromisos", reconociendo indirectamente que las atrasos dependen de Venezuela, donde la carencia de diluyentes y la caída de la producción en los primeros meses de 2023 trabó las exportaciones. Pese a ello, el suministro de petróleo a la Isla ha proseguido, aunque no se actualizaron las cifras de tales envíos.

El ministro dijo que "hay una situación agudizada a nivel mundial y a nosotros se nos dificulta más por el bloqueo".

Subrayó que esa presunta "mejoría" no quiere decir que "vayamos a tener combustible como lo tuvimos en el año 2017 o 2018, o hace unos meses. Esa no va a ser la situación en los días que quedan de abril y en mayo", advirtió.

Sobre el diésel, aseguró que hay "suministradores que empiezan a cumplir sus compromisos", por lo que con ese suministro se podrán cubrir los servicios vitales, "llámese ambulancias, servicios necrológicos (...) Por ejemplo, la cosecha de la papa hay que sacarla en transportación que consume diésel, la transportación de mercancías que llegan por un puerto, si llegan alimentos, hay que priorizar la extracción de los puertos, y un nivel de transportación de pasajeros".

Para empeorar las cosas, los apagones han regresado con fuerza y la estatal Unión Eléctrica ha estado reportando desde la semana pasada los déficits de disponibilidad de energía más altos de todo 2023.