La muerte del bebé de apenas un mes y medio de nacido Dylan Mateo Matos Rivero este último viernes en el Hospital Pediátrico de San Miguel del Padrón, La Habana, provocó que el Ministerio de Salud Pública emitiera una ''nota aclaratoria'', en la que describen los procedimientos médicos para tratar de salvar la vida del paciente, pero no mencionan la causa del fallecimiento.
Según esa nota, el lactante fue atendido primero en el servicio de Urgencias Pediátricas del conocido como La Balear, donde "los familiares en consulta médica declaran que el niño llevaba aproximadamente una semana con dificultad respiratoria".
Al examinar al paciente, el médico le diagnosticó una "crisis de sibilancia", por lo que se decidió su "ingreso para estudio y tratamiento''.
"Una vez en el servicio pediátrico, se aplica oxigenoterapia y aerosoles de broncodilatadores y esteroides por vía intravenosa, a lo que el paciente respondió en mejoría. Debido a la persistencia de la frecuencia respiratoria elevada sin sibilantes se decide su traslado para el servicio de cuidados progresivos donde se aplican acciones continuas por el personal intensivista", dice la dirección de asistencia médica de ese hospital.
Los primeros problemas comenzaron cuando el bebé a las 10:00PM "hace un evento bronco-asfíctico con cianosis en labios y miembros, se realizan cuidados inmediatos de aspiración, cateterismo gástrico para vaciamiento digestivo siendo efectivo. Debido al creciente deterioro del patrón respiratorio fue necesario aplicar ventilación artificial, comprobado por radiografía", precisa la nota.
"Se realiza cateterismo centrovenoso para la aplicación de tratamientos. El paciente mejora algunos de los trastornos de oxigenación y comienza con antibioticoterapia", añaden.
Dos horas más tarde ''ocurre un evento de bradicardia extrema, baja saturación de oxígeno y cianosis generalizada por lo que se comienzan a realizar maniobras de reanimación cardio-pulmonar cerebral avanzada, no se obtiene respuesta favorable del paciente y fallece a la 1:55AM del 24 de marzo de 2023", dice la versión oficial de los hechos.
El padre del menor, Marco Miguel Matos Blanco, al anunciar la lamentable muerte de su hijo, dijo en su perfil de Facebook que los médicos para contener el paro respiratorio le pusieron aminofilina al bebé.
En esos casos el procedimiento establecido es que el personal médico debe comunicarle antes a los padres y contar con su autorización para suministrarle un medicamento tan fuerte a tan sensible edad. Procedimiento que —según el padre del niño— los médicos nunca hicieron.
Matos Blanco ha exigido, además, el resultado de la autopsia de su hijo para tener más detalles sobre las causas de tan temprana y dolorosa muerte.
El especialista Lucio Enríquez Nodarse, del Gremio Médico Cubano Libre (GMCL), señaló sobre este caso en su perfil de Facebook: ''es cierto que la broncoaspiración de leche en los lactantes se describe como accidente que en muy raras ocasiones pudiera ocasionar la muerte, pero en este caso se plantean cuestiones médico legales. Si quien alimenta al niño es la madre, sería la madre la que asume la consecuencia de ese accidente, pero, ¿qué pasa cuando el accidente lo provoca un servicio de cuidados neonatales?".
"En un país normal existen seguros para estos casos en el que suceden cosas que son eventos que pudieran escapar a la pericia y a las buenas prácticas de los médicos y donde se indemnizaría al paciente o a los familiares. En Cuba no existe esta posibilidad, esto es lo que ofrece esa medicina 'gratuita'", señaló este médico.
Las denuncias de presuntas negligencias médicas, algunas de los cuales han terminado con el fallecimiento de pacientes, también son frecuentes en Cuba.
Como publicó DIARIO DE CUBA en un análisis, en la Isla, según la ley, usted puede obtener indemnización si es víctima de negligencia médica, pero en la práctica las indemnizaciones están muy lejos de ser justas, porque el Estado lo pone difícil.
Da lo mismo que fuera negligencia o falta de los debidos recursos o lo que haya sido. Lo cierto es que la culpa nunca es del sistema y mucho menos del gobierno responsable por el mismo. NUNCA.