Darisleni Fuentes Infante, una cubana de 32 años madre de un niño de 14, murió a manos de su expareja en el poblado de Pesquería, municipio Baraguá, en Ciego de Ávila. Se trata de la víctima número 19 de la violencia machista en Cuba.
Según el reporte del Observatorio de Género de la revista feminista Alas Tensas, que aseguró haber verificado el crimen, este se produjo el pasado 19 de marzo. El agresor, agregó la nota, tenía antecedentes de violencia machista.
Este asesinato machista se hace público en la misma jornada en que la plataforma de la sociedad civil independiente Yo Sí Te Creo en Cuba llamó a "prevenir un feminicidio y a encontrar asistencia para una persona con discapacidad mental".
En un hilo en su perfil de Twitter, la iniciativa denunció que desde el pasado lunes "el exesposo de Marlén Rodríguez Gual ha regresado a acosarla frente a su casa, luego de que había sido detenido el 4 de marzo y supuestamente llevado a atención psiquiátrica, debido a su diagnóstico de esquizofrenia descompensada".
La publicación, que incluye una foto del individuo frente a la vivienda tomada desde el interior, señala que ya la mujer bajo amenaza denunció los hechos el 3 de marzo, pero pese a ello "hoy permanece encerrada en su casa".
En la denuncia de inicios de mes, compartida por Yo Sí Te Creo, Rodríguez Gual dijo temer por su vida y la de su hijo ante "la inacción de las múltiples instituciones de La Habana a las que ha acudido (...) sin encontrar una respuesta".
La cubana, residente en Luyanó, municipio de Diez de Octubre, señaló entonces que pese a estar divorciada hace más de seis años de Leonardo Prada Espinosa, padre de su hijo, el hombre la acosa, pues es "portador de arma blanca" y "está parado o sentado permanentemente frente a la vivienda nuestra en constante amenaza a la comunidad".
"Mi hijo y yo lo hemos llevado a ingresar al Hospital Calixto García y se escapa. Le hemos suministrado ropa y zapatos, comida, etc., pero actualmente es muy agresivo", alertó.
Durante dos años de estar bajo esa presión, aseguró, ha pedido ayuda a la posta médica del Consejo CUJAE, en Marianao, donde vive el hombre, así como a organizaciones como los CDR y la FMC; la delegada del Poder Popular; el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social; la estación de la Policía de Aguilera, en Lawton; el número 106 de emergencia de la Policía; la Fiscalía Provincial; la Asamblea Nacional del Poder Popular, entre otras entidades estatales.
Yo Sí Te Creo urgió a las autoridades implicadas a que cumplan "el protocolo establecido para estos casos, que consiste en: detención por parte de la PNR; revisión de conducta delictiva y condición de salud mental; traslado a Medicina Legal para evaluación; dictamen del tribunal correspondiente, y remisión al Hospital Psiquiátrico, si así lo dictamina el tribunal".
"Resulta penosa la desprotección en que se encuentra este hombre enfermo, al que se le violan sus derechos de acceder a los servicios de salud", señalan al finalizar su denuncia.
Recientemente, el periódico oficial Adelante reconoció que el tema de la violencia de género no se ha atendido desde los medios oficialistas. La admisión sucedió en un diálogo sobre género y comunicación que tuvo lugar en la Feria del Libro en Camagüey.
En poco más de dos meses, los grupos feministas y la prensa independiente confirmaron ya más de la mitad de los feminicidios que reportaron en todo 2022 (36). Pese a ello, el nuevo Código Penal, aprobado en 2022 por la Asamblea Nacional del Poder Popular, no tipifica el feminicidio. Ese mismo Parlamento, de mayoría femenina, no incluyó en su cronograma legislativo hasta 2023 una ley integral contra la violencia de género.
"Sabemos que una ley no va a resolver todos los problemas que hay dentro de una sociedad. La violencia de género está arraigada en las estructuras patriarcales que están presentes en toda la sociedad cubana, pero una ley al menos posibilitaría prevenir y erradicar conductas que promueven la violencia de género", dijo a DIARIO DE CUBA recientemente la directora de Alas Tensas, Ileana Álvarez.
La exjueza cubana Maylín Fernández considera además necesario "que dejen de ser secretas las cifras, que los casos se visibilicen, que el problema de la violencia de género en Cuba tenga espacio en los medios de comunicación con la misma claridad que Díaz-Canel dice que tenemos una ley de pesca y no hay pescado".
Es una detrás de la otra. No hay protección para estas mujeres y sus hijos.