A más de cuatro meses del paso del huracán Ian por Cuba, en Pinar del Río el ritmo de recuperación de la vivienda solo está al 21%. En una reunión en la que se ofreció este dato, según publicó el diario oficial Granma, las autoridades encabezadas por Miguel Díaz-Canel consideraron ahora que "la recuperación de los daños de Ian necesita mejores ritmos".
"Todavía no está todo lo material en un escenario que sufrió muchas afectaciones por el paso de Ian, y es preciso analizar cómo se irán suministrando los flujos de recursos", dijo Díaz-Canel, quien también culpó a "los miles de habitantes que, teniendo todos los recursos necesarios, no han emprendido labores de restauración de sus inmuebles".
También dijo que el "desafío incluye a quienes tienen a la mano solo una parte de los recursos necesarios".
En una nota publicada por el propio órgano del Partido Comunista el pasado el 1 de diciembre, el Gobierno dijo que 93.929 viviendas resultaron afectadas por el huracán Ian. En una visita posterior a la fecha, autoridades de Pinar del Río situaron la cantidad en más de 102.000 casas.
Teniendo en cuenta este dato, en estos momentos estarían solucionadas las afectaciones de 21.420 viviendas.
En noviembre, con todos los focos de la prensa oficial, Miguel Díaz-Canel inauguró en Pinar del Río un barrio de 20 casas de madera con techos de zinc "para familias que lo perdieron todo".
Las viviendas tienen paredes de tabla de madera o palma y cubiertas ligeras. Están compuestas de portal, tres cuartos, sala, cocina-comedor, baño reforzado "para proteger de contingencias atmosféricas", algunos enseres y espacios para otros servicios.
Las casas de madera son módulos prefabricados que se utilizan para construir comunidades tras los destrozos de los ciclones y que ya se emplearon luego del paso del huracán Irma por Camagüey. La solución contrasta con los lujosos hoteles que el Gobierno construye en toda la Isla, mientras los derrumbes son cada vez más comunes en todas las ciudades del país.
Sobre La Habana, el gobernador, Reinaldo García Zapata, dijo que no hay afectaciones de recursos en función de poder solucionar el total de los daños causados por Ian en inmuebles. Hasta el momento unas 912 afectaciones constructivas, de un total de 1.024, han sido solucionadas, lo cual representa un 89% de progreso, según los datos oficiales.
En el caso de Mayabeque, su gobernadora, Tamara Valido Benítez, informó que, de un total de 368 afectaciones, han sido resueltas 297. Sobre Batabanó, se informó que están pendientes de echar unas 5.000 toneladas de asfalto en las calles. A raíz del paso del huracán, en estas localidades, impactadas también por los apagones, salieron a protestar a las calles decenas de cubanos.
En cuanto a las viviendas, Valido Benítez habló sobre un amplio plan ya ratificado para el municipio de Batabanó, que da continuidad a las tareas de recuperación iniciadas. Dijo que están incluidos trabajos hidráulicos.
En la provincia de Artemisa, con respecto a la vivienda, de las 11.482 afectadas por Ian, se han concluido 4.140. La recuperación de derrumbes totales y parciales en esa provincia solo está al 36%. Díaz-Canel se refirió a "problemas de disponibilidad material" y a "posibles causas de orden subjetivo" en las que no abundó.
En Cuba se siguen acumulando sin solución los daños ocasionados por huracanes y otros fenómenos meteorológicos. Cientos de familias que se han quedado sin hogares por el impacto de los ciclones permanecen desde hace décadas en albergues, en precarias condiciones y sin la solución prometida del Gobierno.
Es la miseria consecuencia del fracaso del „modelo económico“ de la continuidad del socialismo. En cualquier país con una economía funcional habría un fondo para estos desastres naturales. Los damnificados de ciclones pasados todavía siguen esperando una vivienda decente mientras los gordos de GAESA siguen construyendo hoteles y ellos viven en villas y residencias. San Nicolás del Peladero.
Pero "el flujo de recursos" no se detiene para los hoteles. Como diría el ilustrado Trump, "they are a disgrace".
Lo que sorprende es que no sea peor.