El abogado cubano Rodolfo Dávalos Fernández ha alcanzado una visibilidad que antes no tuvo desde que apareciera entre los funcionarios enviados por el régimen de Cuba al juicio en su contra por una deuda que se remonta a 1982 y que ha sido querellada por sus acreedores del fondo de inversión CRF I en Londres.
El proceso ha conseguido mostrar al mundo no solo la mala reputación de La Habana, que no honra a sus prestamistas, sino también cómo opera el estamento judicial que le sirve de apoyo y soporte incluso en las cortes internacionales.
En ello, Dávalos no es una figura menor. Siendo uno de los juristas más reconocidos de la Isla, a sus 83 años tiene el peso suficiente como para aparecer en calidad de árbitro en litigios diversos, la mayor parte del tiempo desde la sombra.
Después que dirigiera desde La Habana el proceso judicial impulsado por Fidel Castro a favor de los cinco espías de la denominada Red Avispa, la importancia de Rodolfo Dávalos en la sombra del aparato de poder se hizo evidente.
En ese contexto, escribió un libro sobre el caso, titulado Estados Unidos vs. cinco héroes: un juicio silenciado, en el que defiende su tesis de que el proceso contra los agentes reclutados por La Habana exhibió "el quiebre del sistema judicial de EEUU".
Dávalos es uno de los estrategas detrás de la red societaria del régimen de Cuba en decenas de países desde que ascendiera de simple abogado en los llamados Tribunales Revolucionarios en Matanzas, a partir de 1960, hasta que en 1993 se convirtió en asesor de la empresa mixta cubano española Cubanacán S.A., de la que acabó siendo director general en 1997, en un periodo en el que también dirigió el Bufete Internacional.
Ello, y su posterior trabajo como asesor del Ministerio de Turismo para inversiones con China, empresas inmobiliarias y litigios internacionales, puso en evidencia su función urdiendo la trama empresarial de La Habana, sobre todo con España, y también su influencia en la legislación oficial al respecto.
Cabe destacar que fue parte de las comisiones que redactaron proyectos legislativos como la Ley General de la Vivienda de 1988, la comisión para la Reforma Constitucional de 1992, y la que preparó la Ley de Inversiones Extranjeras de 1995.
La confianza que en él depositó Fidel Castro se hizo evidente cuando el dictador lo integró al equipo de especialistas de su campaña de propaganda por el regreso a Cuba de Elián González, denominada Batalla de Ideas.
Pero su abultado currículo profesional permite apreciar además su influencia en organismos internacionales de arbitraje donde, por ejemplo, se dirimen casos que afectan al régimen. De ahí que su nombre aparezca entre los miembros de la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional, con sede en París, que dio la razón al empresario chileno Max Marambio, dueño de la extinta empresa de alimentos Río Zaza, en una reclamación contra el régimen de Cuba.
Curiosamente, tras esa presunta victoria, que obligaba a La Habana a pagar 17,5 millones de dólares como indemnización a la compañía Ingelco, de Marambio, expropiada por Fidel Castro, la Corte de Apelaciones de París exoneró a mediados del 2015 del pago a La Habana. Con ello, el robo del régimen cubano a sus antiguos socios quedaba definitivamente consumado y legitimado.
Dávalos Fernández funge como presidente de la Sociedad Cubana de Derecho Mercantil y de la Corte Cubana de Arbitraje Comercial Internacional, pero es además árbitro de la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional (CCI), con sede en París.
Su influencia en el "deshielo" de la era Obama es menos conocida. De acuerdo con un artículo de Antonio R. Zamora, en los años previos al giro en la política de Washington hacia La Habana hubo diversos contactos entre expertos del derecho de ambos países.
"Una de nuestras primeras actividades fue un seminario organizado por el Instituto de Investigación Cubano de la Universidad Internacional de Florida, con la participación de cuatro destacados abogados cubanos", recordó Zamora en 2013.
"El seminario se llevó a cabo el 18 de diciembre de 2001 y fue un éxito. De ahí que comenzamos a trabajar en la idea de una conferencia en La Habana en 2002. Los abogados cubanos que vinieron a Miami, Rodolfo Dávalos, Carlos Grillo, Raúl Mantilla y Juan Mendoza, coincidieron en que una conferencia jurídica en La Habana con la participación de abogados estadounidenses y cubanos era una buena idea y prometió ayudar a que se hiciera realidad", indicó. La conferencia se celebró en 2002.
Valga recordar que Mendoza, uno de esos cuatro invitados, es otro de los funcionarios cubanos presentes en el juicio en Londres. El también catedrático de Derecho Procesal de la Universidad de La Habana y presidente de la Sociedad Cubana de Derecho Procesal de la oficialista Unión Nacional de Juristas de Cuba, funge en el proceso como testigo experto de la defensa de La Habana.
Posteriormente, Dávalos Fernández ha sido una presencia constante en universidades de EEUU. En 2016, el entonces embajador de La Habana en el país vecino, José Ramón Cabañas, lo recibió en Washington mientras el jurista protagonizaba una gira de conferencias.
La influencia de Dávalos Fernández tiene extensiones cada vez menos invisibles. En estos días se le ha visto en Londres junto a su hija, Lourdes Dávalos, encargada de los negocios en Cuba que atiende el despacho de abogados de Madrid Uría Menéndez. Este es, por cierto, otro de los bufetes que defienden a La Habana en la demanda ante el Tribunal de Comercio de los Tribunales Reales de Justicia de la capital británica.
Asimismo, otro de sus hijos, Rodolfo Dávalos León, es consultor de mercado en EEUU, donde abrió su primera empresa en 2016, después de salir de la Isla con apenas 22 años hacia España. De acuerdo con Cubanet, allí estudió Relaciones Internacionales en la Universidad Rey Juan Carlos, de Madrid.
En EEUU habría sido consultor de negocios para Victory Cruise Lines, una de las primeras empresas de cruceros que llevaron buques de recreo a Cuba desde su vecino del norte después del "deshielo" de Obama.
En entrevista en 2021 con el canal de Miami Telemundo 51, dijo que le "encanta la economía de mercado" y que EEUU "tiene el mejor sistema del mundo".
En el diálogo, se quejó de que los medios que mostraron sus vínculos con el régimen no mencionaron su trabajo "con la Administración de Obama, en las cuales avanzamos muchísimo en los derechos humanos en Cuba y las libertades económicas".
Asimismo, culpó a EEUU del estallido del 11J y usó los mismos argumentos para justificar la represión que empleó el régimen de La Habana.
En su perfil de Facebook, que luego eliminó, escribió: "Si la revolución se cae, me vas a encontrar en Cuba, con mi padre, rodilla en tierra, fusil en mano, defendiendo la obra de Fidel". Dávalos León tiene fotos junto a Miguel Díaz-Canel y Lis Cuesta durante el viaje del gobernante cubano a EEUU en 2018.
Por muy malo que sea un sistema o gobierno, siempre encuentra este tipo de personaje. Siempre.
Padre e hija son narcoabogados bien entrenados en las marañas jurídicas.
Personajes como Dávalos, su hija e hijo, más otros tantos "hijos de" que residen fuera de la isla pero le sirven al régimen, son muestras de que la ideología, el "comunismo", las "ideas de la revolución", como se les quiera decir, están muy lejos de su punto de mira; como también lo están para el régimen. Entre ellos se entienden.
Es verdad que este señor ya está para retirarse; pero si abre con la hija una oficina legal en Miami se vuelve multimillonario. Por lo menos no tiene que gastar mucho en promoción. DDC se ha ocupado de ella.
Es importante dejar claro en la prensa que este jurista "reconocido" solo se le da la oportunidad de serlo al ser artifice de marcos normativos "legales" de sustén a una dictadura.
Ese vejete tiene 82 años así que ya tiene fecha de vencimiento