A las 3:30AM de la madrugada de este martes se derrumbaron parcialmente dos balcones en un céntrico edificio de la ciudad de Sancti Spíritus, debido a la mala conservación del inmueble, reportó el periódico local oficial Escambray.
Por suerte, no se lamentaron lesionados a pesar de que no existían barreras de protección en el área, habían sido retiradas el 1 de mayo. Los vecinos de la céntrica esquina de la Avenida de los Mártires y la calle Adolfo del Castillo, al sentir el estruendo ya sabían que se trataba del desplome de los balcones del inmueble.
La denuncia sobre el mal estado constructivo de los balcones había sido expuesta en muchos escenarios locales, incluidos los medios de prensa. El propio periódico Escambray publicó en marzo en Facebook que expertos en el tema daban "fe del deterioro constructivo de los balcones de este céntrico edificio de la ciudad de Sancti Spíritus, acumulado durante años por la falta de mantenimiento".
Ariel Torres Sobrino, residente en uno de los apartamentos del segundo piso, explicó a Escambray que cuando sintieron el estruendo toda la familia se asustó mucho. Incluso las niñas de la casa miraron por la ventana y al ver los escombros acumulados sobre el alero y algunos pedazos de la baranda, comprobaron que se trataba del balcón de la tercera planta.
"Se veía venir —señaló Ariagna Torres Sobrino, otra de las residentes del edificio construido en 1948—. Nosotros teníamos en posesión los planos originales del edificio y los aportamos a las autoridades de la vivienda en su momento para que lo tuvieran en cuenta antes de realizar alguna acción constructiva". Al parecer, esas gestiones no dieron resultado.
A pesar del peligro, los transeúntes continúan su paso por los alrededores del derrumbe.
Jailer Rabelo Orellana, intendente del Gobierno en el municipio de Sancti Spíritus, declaró a Escambray que se evalúan los daños y las posibles soluciones al problema.
"Por el momento vamos a limpiar y delimitar el área —aclaró Rabelo Orellana—. Estamos previendo, además, demoler otra parte de los aleros voladizos para ver hasta dónde podemos manejar una posible propuesta de recuperación, en dependencia de los recursos que tenemos."
"Nosotros vamos a evaluar la solución más rápida, de acuerdo con los medios a nuestro alcance, pero sobre todo para que las familias que aquí residen tengan mayor tranquilidad," concluía el funcionario.
Según la Política de la Vivienda en Cuba, documento redactado por el Ministerio de la Construcción (MINCONS), en 2019 existían 3.824.861 viviendas y el 39% se encontraba en regular o mal estado. Solo en La Habana habían más de 43.000 personas albergadas luego de perder sus casas por derrumbes.
En marzo de 2019, el derrumbe de un edificio en la avenida Boyeros de La Habana provocó la muerte de un anciano residente del inmueble. En enero de 2020 un balcón se derrumbó en La Habana Vieja y acabó con la vida de tres niñas que transitaban por la calle.
Este tipo de incidentes son la consecuencia final de una serie de políticas fallidas por parte del Gobierno para asegurar la existencia de una industria inmobiliaria segura y apegada a las necesidades de la población.