Venezuela duplicó durante abril las exportaciones de petróleo a Cuba, aliado político de Caracas, en comparación con marzo. En ese periodo los envíos alcanzaron casi 70.000 barriles de crudo diarios (bpd), diésel, gasóleo, coque de petróleo y fuel oil, en un periodo en que las ventas al exterior del país se contrajeron.
A pesar de esto, los apagones fueron frecuentes en la Isla, según las autoridades debido a averías en las termoeléctricas, algo frecuente pero que se agravó tras la rotura que sufrió la Termoeléctrica Antonio Guiteras de Matanzas, principal planta generadora de la Isla.
Ante esa situación, la estatal venezolana PDVSA envió a mediados de mes un cargamento urgente de diésel a Cuba para la generación eléctrica.
Las exportaciones de Venezuela cayeron un 8% en abril con respecto al mes anterior en medio de nuevos retrasos relacionados con problemas de calidad del crudo e insuficiente capacidad para mejorar el disponible, según documentos y datos de seguimiento de embarcaciones a los que tuvo acceso la agencia Reuters.
No obstante, el país recuperó una parte de la producción perdida el año pasado, aunque los despachos se han mantenido volátiles, rebotando unos 200.000 barriles por día en pocos meses ante limitaciones en la capacidad disponible para convertir su petróleo extrapesado en variedades exportables.
PDVSA y sus empresas mixtas exportaron un promedio de 644.870 bpd de crudo y productos refinados el mes pasado, con más del 70% de los embarques enviados a China directamente o a través de centros de trasbordo como Malasia, según arrojan los programas de carga internos de PDVSA y datos de seguimiento de tanqueros de la plataforma Refinitiv Eikon.
"Hay altos inventarios de crudo diluido", dijo PDVSA en uno de los informes, que mostró más de cuatro millones de barriles de esa variedad almacenados, frente a 1,3 millones de barriles de Merey, el crudo venezolano más popular entre refinadores asiáticos.
La compañía continuó tratando de reiniciar un tercer mejorador de crudo, Petromonagas, para elevar la producción de variedades de mayor calidad, agregó.
Los despachos de abril incluyeron un cargamento de 1,99 millones de barriles de crudo pesado Merey 16 a bordo del tanquero Dan, de bandera iraní. El buque había llegado a aguas venezolanas en febrero cargado con condensado iraní, como parte de un acuerdo de intercambio que está suministrando a PDVSA los diluyentes que tanto necesita.
Otra embarcación iraní, el Derya, atracó esta semana en el terminal venezolano de Jose, según el servicio de monitoreo TankerTrackers. Se espera que descargue unos 2,1 millones de barriles de condensado que PDVSA esperaba desde marzo.
El ministro de Petróleo de Irán, Javad Owji, se reunió esta semana en Caracas con Nicolás Maduro y el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami, para discutir acuerdos. Ambas naciones, sancionadas por Washington, han estrechado su relación a través de canjes de petróleo y el suministro de equipos de refinación y alimentos a Venezuela.
Venezuela también despachó en abril 186.000 bpd de fuel oil residual y más de 240.000 toneladas métricas de coque de petróleo, azufre y metanol, según los datos.
En medio de las dificultades para encontrar petroleros dispuestos a cargar crudo en puertos venezolanos debido a las sanciones, PDVSA y otras empresas estatales han impulsado recientemente las exportaciones de subproductos y combustibles residuales.