Explota una de las hijas de Maradona tras divulgarse el amorío de su padre con una menor cubana

Tras la publicación del testimonio de Mavys Álvarez, la cubana que tuvo una relación con Diego Armando Maradona cuando ella tenía 16 años y el futbolista se atendía en Cuba su dependencia de los estupefacientes, una de las hijas del argentino, Gianinna Maradona, aseguró que las revelaciones tienen por finalidad "lastimar". 

"Hijos de puta, ni la muerte les deseo, simplemente porque allá arriba también le romperían las pelotas", escribió Gianinna en su perfil de Instagram, aunque luego borró esa publicación.

En un texto posterior en la propia red social arremetió contra los críticos de su padre sin mencionar a ninguno por su nombre.

"Hay gente que por plata mata, que no les importa el sufrimiento del otro, se llenan la boca hablando de empatizar y están lejos de hacerlo. No repara, sólo daña. Juzga. Señala. Personas que cuentan cosas que nunca vivieron ni van a vivir. Personas que viven contando la vida privada de quien nunca conocieron. Engañan. Escupen para arriba", expresó.

Entre los comentarios de esa publicación, su madre y exesposa de Maradona, Claudia Villafañe, apuntó: "¡Los amo con todo mi corazón! ¡Nuestra familia unida jamás será vencida!".

A propósito del escándalo desatado en Argentina por el testimonio de Mavys Álvarez, cuya entrevista está publicando por partes el canal televisivo AméricaTeVé de Miami, el empresario argentino Omar Suárez, quien acompañó a Maradona en su periodo en la exclusiva clínica La Pradera de La Habana, ofreció declaraciones a ese canal de televisión.  

"En ese momento Diego Maradona no quería abusar de la menor, tenía una enfermedad que no podía controlar", afirmó acerca de la relación entre el futbolista y Mavys. No obstante, reconoció que las denuncias de la cubana acerca de cómo Maradona la introdujo en el consumo de drogas durante su relación son ciertas.

"Lamentablemente, ella cayó en las adicciones por su relación con Diego", dijo, aunque agregó: "Ella fue un gran amor de Diego. En 2001 la quería traer en un caja. Cuando me enteré de eso, fui a hablar con Guillermo Coppola. Después de un tiempo, Fidel Castro firmó una autorización y Mavys pudo salir de la Isla para venir a Buenos Aires", dijo, en referencia al permiso otorgado por el dictador a su amigo argentino.

"Escuchar esto 20 años después, es como que te cambia un poco la visión de todo lo que uno tenía en ese momento. Diego era muy celoso, lo dijo Mavys, así que los momentos con ella eran muy privados. Nosotros teníamos la posibilidad de verlos en los momentos felices, cuando estábamos almorzando o cenando, cuando íbamos al Habana Club o a la playa y jugábamos al fútbol. Por ahí, vivíamos otra historia", contó.

"Hoy, escuchar estas historias de Mavys, la verdad es que a mí me da muchísima pena. Me da muchísima vergüenza. Yo quería pedirle perdón, públicamente, por lo menos de mi lado, por no haber sabido ver lo que estaba sucediendo en ese momento. Eran otros tiempos, era otro país y uno vivía, por ahí, de otra manera. Y, lamentablemente, uno no se dio cuenta de lo que realmente estaba viviendo esta mujer. Y que hoy, gracias a Dios, lo puede expresar para que no vuelva a suceder con ninguna otra chica", subrayó.

Según el diario argentino La Nación, durante la entrevista a Suárez, Mavys Álvarez escribió al periodista cubano Mario Juan Pentón con un mensaje de agradecimiento por sus palabras. "Le agradezco a Omar porque es el único de los que rodeaban a Diego que pensó en pedir una disculpa. Y él, realmente, siempre fue amable conmigo y con mi familia", dice el chat que Pentón leyó al aire en América TeVé.

Omar Suárez agregó que "Mavys tiene una familia hermosa". Y prosiguió: "Yo tuve la oportunidad de conocer a su madre, a su abuela y creo que a alguno de sus tíos también. Hemos compartido cenas, hemos compartido días allí en La Pradera. Por eso decía que, por ahí, uno veía las cosas desde otro lado".

"Ella era una niña con todo lo que eso significa, las ganas de crecer y de progresar. Pero también soy consciente, al igual que ella, de que este régimen cubano impulsa a muchas chicas a vivir de esta manera", sumó.

"Hoy, con el tiempo, la escucho a ella y digo: '¡La pucha! Estuvimos ahí y no pudimos hacer nada'. Por eso es que hoy, de todo corazón, le doy mis disculpas por no haber sabido ver. (...) Diego también le hubiera pedido perdón. Habría sentido la misma vergüenza y la pena que siento yo", aseguró.

En la segunda parte de la entrevista, difundida por América TeVé el martes en la noche, Mavys contó cómo Maradona la introdujo en el consumo de cocaína, de cuya dependencia debía presuntamente salir curado de Cuba el futbolista.

"Diego me llevó a la droga cuando tenía 16 años. En varias ocasiones él trató, me insistía (…) fue después que llevábamos unos seis meses de relación. Él se sentía solo y probé la cocaína por complacerlo. Ese fue el error más grande de mi vida", contó la cubana, que hoy tiene 41 años.

"Salir de la droga fue bastante difícil. La droga me dio muchas alucinaciones. Estuve algunas horas en el hospital CIMEQ (Centro de Investigaciones Médicas Quirúrgicas) porque me deshidraté", narró, en referencia al exclusivo hospital donde se atiende buena parte de la cúpula del régimen y sus familiares.

Álvarez confirmó también las revelaciones divulgadas semanas atrás por el medio argentino Infobae en torno a un procedimiento estético que se habría hecho en Argentina para, por expreso deseo de Maradona, agrandarse los senos.

"Fui por 20 días, pero me tuve que quedar casi tres meses debido a que se me abrieron las heridas por las locuras de Diego. (...) Me hicieron los análisis en el hotel donde estaba", contó. Según ella, sus padres nunca autorizaron ese proceder quirúrgico en una menor de 16 años, puesto que se enteraron a su regreso a la Isla.

"La autorización la dio él (Maradona), obviamente, porque me imagino que más nadie pagó", dijo.