Los cigarros racionados por la libreta en Cuba solo alcanzaron para el al 34% de los núcleos familiares en julio

Un mes después de que las autoridades cubanas anunciaran que los cigarros Criollos, Populares, Titanes y Aromas serían distribuidos por la cartilla de racionamiento, la ministra de Comercio Interior (MINCIN), Betsy Díaz Velázquez, dijo que estos productos solo alcanzaron para el 34% de las personas a las que les correspondía, informó el diario estatal Granma.

Pese a que Díaz Velázquez dijo inicialmente que el nuevo método de distribución se aplicaba para evitar las reventas y el acaparamiento, con el reconocimiento del incumplimiento de la producción queda claro que más allá del mercado negro, la escasez se debe a la falta de capacidades productivas.

La funcionaria, además, afirmó que, al no estar comprendidos dentro de la canasta familiar, los cigarros "no tiene que distribuirse obligatoriamente todos los meses a los más de 3,8 millones de núcleos que existen en el país".

"Este mes, por ejemplo, hubo un incumplimiento significativo de la producción, lo cual agravó esa medida inicial de expender las cajetillas en la red de bodegas", agregó Díaz Velázquez, quien explicó que de los 37 millones de cajetillas que serían distribuidas en julio solo se entregaron 13 millones, lo que representa el 34% de lo requerido.

El director general de Ventas de Mercancías del MINCIN, Francisco Silva Herrera, agregó que "a partir de las limitaciones que han existido con la disponibilidad de cigarros en Cuba, como consecuencia de las intermitencias en el arribo al país de las materias primas, los territorios fueron adoptando diferentes medidas para regular su venta, ya que la demanda no se puede cubrir al 100 %".

Por esos motivos, explicó que "algunas provincias decidieron vender de forma controlada dos cajetillas por persona, mientras que en otros lugares se ha hecho por núcleos o se ha limitado la venta a mayores de 18 años de edad".

"Ha sido una disposición de carácter territorial, aunque la recomendación desde el organismo es que su comercialización se realice de forma regulada-controlada para así evitar, en la medida de lo posible, el acaparamiento del producto", agregó.

De acuerdo con lo dispuesto inicialmente por las autoridades del MINCIN, se deben vender ocho cajetillas de Criollos y una de Aromas y Titanes por persona, solo para los mayores de 18 años de edad de cada núcleo familiar. A esos productos se sumó la venta de dos tabacos y una caja de fósforos por persona. 

Curiosamente, en la década del 2000 Raúl Castro eliminó la distribución de cigarros por la libreta para liberar su venta. Entre los argumentos que se esgrimieron en esa ocasión estaba que los no fumadores vendían su cuota, alimentando con ello el mercado negro.