Erasmus Klutse, un estudiante ghanés que cursaba el segundo año de la carrera de Medicina en Cuba, falleció la semana pasada por presuntas negligencias denunciadas por sus compañeros, según publicaron medios de Ghana.
Según Emmanuel Dwomfour-Poku, secretario organizador de la Unión Nacional de Estudiantes de Ghana (NUGS, sus siglas en inglés), Klutse fue trasladado de urgencia a la clínica de la escuela donde le fue negado tratamiento, publicó el portal de noticias Yen.
Dwomfour-Poku dijo que el estudiante posteriormente "tuvo que ser enviado fuera del campus, pero la ambulancia para el traslado no tenía gasolina y no había fondos para ayudar con la situación".
"Esto fue posible porque tanto la embajada de Ghana como nuestros patrocinadores nos abandonaron", dijo el representante del sindicato estudiantil.
Denunció que el número del difunto alumno fue bloqueado por la embajada de Ghana por preguntar constantemente sobre su estipendio, que no había recibido durante cinco meses.
"Fijamos nuestras expectativas altas solo para quedarnos cortos, ya que fuimos saboteados por nuestro propio Gobierno", declaró la organización estudiantil.
"Ninguno de nosotros tuvo en cuenta la escasez en Cuba de agua, la comida podrida que se sirve, no solo a nosotros, sino también a nuestros amigos, y la falta de gasolina para facilitar el transporte, que luego causaría la pérdida de nuestro hermano", añadió.
Para el representante de los estudiantes de Ghana en la Isla, los alumnos han actuado de manera "impecable, a pesar de la falta de asistencia de la embajada durante la pandemia, a pesar de la falta de estipendios que los dejan hambrientos".
Según Dwomfour-Poku, "en ocasiones a los ghaneses que suben a una ambulancia se les pide que bajen para que otros nacionales la usen, pero la embajada de Ghana nunca ha hecho nada al respecto".
Las quejas por el mal servicio de las ambulancias en Cuba, cuyo funcionamiento se ha visto comprometido por la falta de combustible, son frecuentes. Es peor la situación en zonas rurales, alejadas de la ciudad y de difícil acceso, donde en muchas ocasiones las ambulancias nunca han llegado.
En la capital del país, según datos oficiales recientemente divulgados, operan solo 58 de estos vehículos del Sistema Integrado de Urgencias Médicas (SIUM).
Varios casos han terminado con el fallecimiento de los pacientes necesitados de una ambulancia, según han denunciado los propios familiares en redes sociales.
Según publicó Modern Ghana, la familia de Erasmus Klutse exigió la repatriación inmediata del cuerpo a Ghana y anteriormente reclamó también una investigación independiente sobre las circunstancias que llevaron a la muerte del estudiante, a quien sus compañeros describieron como "brillante".
Cientos de jóvenes de África han pasado por la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM). A menudo el centro ha sido sede de incidentes con los estudiantes africanos, que se quejan de las condiciones en que viven en la Isla y por el impago de sus mensualidades. Las escaseces que padecen ahora se han agravado por la subida de precios tras la denominada Tarea Ordenamiento.
En mayo pasado, el joven sudafricano Sibusiso Qongqo, que cursaba el quinto año de la carrera de Medicina en La Habana, murió tras un padecimiento fulminante del páncreas.
En diciembre de 2017 Sihle Cebo Makhaye y Sibusiso Gracias Ngeleka, dos estudiantes de Medicina sudafricanos radicados en Cuba, murieron ahogados en una piscina. Unos meses antes, en agosto de ese mismo año, otro estudiante de ese país (de tercer año de Medicina) fue hallado muerto en La Habana, y según hipótesis habría sido un "suicidio".
