El científico cubano Amílcar Pérez Riverol afirmó en una entrevista con el medio alemán Deutsche Welle que "es muy difícil hablar de mercado para una vacuna que está en fase dos", en referencia a Soberana 02, el proyecto vacunal cubano más avanzado por el momento.
La afirmación de Pérez Riverol, sin embargo, contradice a lo dicho unos días atrás por el director del Instituto Finlay, Vicente Vérez, quien aseguró que tienen mucha demanda de vacunas, por lo que necesitan prepararse para la futura venta.
Las autoridades cubanas también comenzaron una polémica campaña propagandística enfocada en la producción de 100 millones de dosis del fármaco.
En cambio, Pérez Riverol, quien se desempeña actualmente como investigador de la brasileña Universidad Estatal Paulista (UNESP), fue cauto en sus afirmaciones, pues consideró que aún no se puede dar por efectiva a la vacuna porque existe "la posibilidad de fallo en fases más avanzadas y complejas de los ensayos clínicos".
Sobre la posibilidad de que la población cubana esté inmunizada en el primer semestre de 2021, como afirmó Vérez anteriormente, Pérez Riverol dijo que "es posible si todo sale bien, pero es un reto grande".
El científico explicó que para ello sería necesario unificar las fases de ensayos clínicos, lo que implicaría que Soberana 02 inicie la tercera etapa de pruebas sin culminar la segunda, además de la aprobación de su uso de emergencia para grupos priorizados.
"Todo indica que la demanda de una vacuna será alta durante 2021 e incluso 2022, pero cuánto Cuba pueda explotar eso, dependerá de cosas que aún no sabemos", afirmó el virólogo Pérez Riverol, quien mencionó variables como "el momento en que la vacuna llegue a un mercado donde también países latinoamericanos están asegurándose millones de dosis, su precio frente a otras vacunas competitivas como la de Oxford-AstraZeneca, y la capacidad de producción de la Isla".
Pero esos no son los únicos obstáculos, pues el propio Eduardo Martínez Díaz, presidente del Grupo Empresarial BioCubaFarma, afirmó durante la reunión de la ANPP que se están dificultando los escalados productivos previstos para los candidatos vacunales cubanos, y culpó de ello al embargo de EEUU.
El directivo afirmó que existen numerosas dificultades para que BioCubaFarma cobre lo que le deben algunos clientes, lo que afecta la producción y abastecimiento de los medicamentos en general.
Cuando logren producir un quintal de ñame, podremos hablar de producciones masivas de vacunas. Este es otro cantinflero