Los activistas cubanos esperan que el Decreto-Ley de bienestar animal que prepara el Gobierno tenga a los perros, gatos, gallos, caballos y otros seres vivos en el centro. Solo hay que ver la diferencia de los perros recién rescatados de los centros de Zoonosis y su transformación, meses después de cuidados y amor en refugios o casas de acogidas, señalan.
Sin embargo, varios animalistas entrevistados por DIARIO DE CUBA consideran que no habrá cambios sustanciales en los primeros meses porque la normativa se preocupará más por las personas.
"Es un Decreto-Ley antropocéntrico y utilitarista. Los animales no son el centro de esta norma, sino el ser humano en sí, y los animales que puedan ser de alguna forma beneficiados son los animales de la industria, porque esto es lo que podemos esperar del Ministerio de la Agricultura (MINAG) que ha llevado las riendas del asunto", dijo el activista Javier Larrea.
La animalista Leidy Laura Hernández cree que "pasará mucho tiempo antes de ver en Cuba cambios palpables en el cuidado de los animales. Esperamos que el Decreto-Ley sea el primer paso para que esto suceda".
El activista Dennis Valdés coincidió y agregó que el MINAG no incluirá en la normativa las peticiones hechas por los animalistas. "El Estado no va a incluir a la sociedad independiente en su proyecto, no estamos reconocidos legalmente por ningún gobierno provincial ni el nacional. Es un castigo por todo lo que hemos hecho, por toda la presión que hemos ejercido", señaló.
A este animalista de Sancti Spíritus, que se identifica como "Guajiro", lo mueve la causa animalista tanto por los perros y gatos, como por los caballos que maltratan en los campos de Cuba y cualquier otro ser vivo. Hace unos meses intentó abrir un refugio de animales en Trinidad, pero el sueño se truncó por la falta de recursos. Ahora colabora con otros activistas que donan su tiempo y espacio a cuidar de los animales.
Una petición de más de 30 años
Los animalistas enviaron 72 propuestas al MINAG desde julio para incluir en el Decreto-Ley de Bienestar Animal. Entre ellas destacan las peticiones de sanciones severas contra el maltrato animal, la venta, la zoofilia y el abandono. El colectivo también exige el trabajo conjunto con los organismos estatales, el reconocimiento de los activistas, que tienen una amplia red en toda la Isla, e impulsar campañas de educación desde las primeras edades.
Los animalistas esperaban que en noviembre ya fuera público el contenido del Decreto-Ley que llevan más de 30 años pidiendo en Cuba. Sin embargo, el MINAG solo divulgó un llamado a seguir opinando y enunció los principales capítulos.
"¿Qué se hizo con las más de 70 propuestas que enviamos como movimiento animalista en el mes de julio? ¿Qué sentido tiene modificar en el propio mes de aprobación de esta norma lo que hace meses ya ellos tienen concebido que van aprobar? Me parece un acto de ‘simulación’ para decir que hubo participación popular", opinó Larrea.
Javier Larrea Formoso es director de la revista cubana de animales El Refugio y presidente del grupo Bienestar Animal Cuba (BAC). Su amor por los animales viene desde pequeño y hace unos años ayuda en su defensa a través del activismo.
El movimiento animalista en la Isla es uno de los que más activos en las redes sociales, tanto que los medios estatales llegaron a acusar a sus integrantes de recibir fondos de Estados Unidos y son perseguidos por la policía política.
Al respecto, Hernández apuntó a DDC que "hasta ahora el Estado no ha mostrado interés real en tomar en cuenta nuestras opiniones y mucho menos en valorar nuestro trabajo, sino todo lo contrario: nos hemos visto hostigados por ellos ya que han intentando aplastar cada una de nuestras iniciativas en pos de promover la protección animal".
Hernández lidera el Grupo de Rescate Animal en Santa Clara. En octubre su familia estuvo sitiada en su casa unas horas cuando Miguel Díaz-Canel visitó Villa Clara. Ella y su esposo, que fue detenido de manera arbitraria, denunciaron entonces una recogida de perros callejeros realizada por Zoonosis. Gracias a su exigencia pudieron recuperar a los animales unos día después.
"Zoonosis hasta la fecha no ha hecho trabajo alguno, solo asesinar animales. Para ganar credibilidad e intentar cambiar su mala reputación, debe incluir en su plan de trabajo campañas de vacunación, esterilizar y propiciar la adopción de los animales que recojan", señaló.
Abajo Zoonosis
La desaparición de Zoonosis es uno de los reclamos hechos por los animalistas al Gobierno de Cuba, o al menos dejar las prácticas de matar con estricnina a los perros, mejorar las condiciones de los locales y permitir la participación de la sociedad civil.
Larrea sí cree que esa entidad estatal del Ministerio de Salud Pública (MINSAP) cambiará "porque es una de las cosas que más aborrece la sociedad y nuestro movimiento: los crímenes que cometen contra los animales. Es verdaderamente horroroso y ha sido bandera de nuestra lucha pedir la completa eliminación de estos horrendos sacrificios, que se hacen de la manera más insensible posible".
El activista cuenta que, pese a las promesas hechas en reuniones con los animalistas, Zoonosis no respeta el término acordado de 72 horas para sacrificar a los animales, como sucedió en Isla de la Juventud. "A pocos días para la aprobación del Decreto-Ley (…) sacrificaron animales. ¿Entonces? ¿Tendremos que tomar nuevamente las calles? Nuestros animales se respetan", afirmó.
Los activistas no solo piden protección para los animales de compañía, sino también para las colonias de gatos en las ciudades, con campañas de esterilización, sanciones contras las personas que crían perros y gallos para usar en peleas, así como un uso más racional de los animales en la agricultura, la carga y la transportación.
Basta ya de peleas de animales
"No creo que las peleas y el maltrato animal vayan a terminar en primera instancia, siempre habrá maltrato, incluso en aquellos países que tienen leyes severas de protección animal hay maltrato. En Cuba muchas personas lucran con la vida de los animales, ya sea con perros de razas, animales para cargas pesadas; va a ser difícil y lento este proceso de concientizar al cubano", dijo Valdés.
Larrea apuntó que los animales de pelea no existen. "Los pitbull no son perros de pelea, eso es algo que el propio ser humano ha fomentado. Que tengan algunas características fisiológicas que le den mayor posibilidad para que los usen para estas peleas no significa que nacieron para eso. Eso va en la crianza que se le dé", explicó.
El activista lamenta que en Cuba se empleen animales en esas prácticas crueles, pese a que en el Código Penal están recogidos como delitos los juegos prohibidos. "Nada sucede, ya que esa figura del Código Penal cubano tampoco persigue el bienestar animal, no están en el Código por los animales sino por otras razones... pero bueno, está prohibido y pueden ser denunciadas estas peleas".
El MINAG dio hasta el 10 de noviembre como fecha límite para enviar nuevas propuestas para su Decreto-Ley de Bienestar Animal. Antes de que finalice este mes debe estar presentado el texto, según el cronograma legislativo.
"Todo parece indicar que la aprobación del Decreto-Ley será una decepción más. A eso súmale que aún queda mucho camino por recorrer en cuanto a la concientización de nuestra sociedad en el respeto y el amor hacia los animales", dijo Larrea. Valdés coincidió en que el proceso será lento.
"Para mí, como animalista y ciudadana cubana, una ley que no prohíba todo tipo de enfrentamiento entre especies con ánimos de lucro o diversión no me representa. El Decreto-Ley debe ser justa y fuerte, de otra forma será una mentira", advirtió Hernández.
Más de once millones de animales siguen sin derechos...
Cuba es la isla de los milagros. Los perros terminarán con más derechos y protección que las personas.