Cada día se deprimen más las tiendas en CUC

La promesa del régimen de que las recaudaciones en las tiendas para venta exclusiva en Moneda Libremente Convertible (MLC) servirían para surtir y abastecer a las redes de mercados en CUC y moneda nacional, fue catalogado por la totalidad de los habaneros como "una mentira del Estado".

Desde el pasado 20 de julio, día de la apertura de más de 70 establecimientos destinados a comercializar productos y mercancías solamente en monedas extranjeras, las llamadas tiendas recaudadoras de divisas en CUC cada día sufren más desabastecimiento, coincidieron los consultados.

"La escasez fue empeorando contrario a lo prometido por el Estado. Las tiendas en CUC se abastecen apenas dos veces a la semana y solo con la mitad de los productos y alimentos que se exhibían a principios de la cuarentena", señaló Ania Lidia Cabrera, vecina de Centro Habana, quien describió que en cuanto a alimentos solo es posible encontrar, regularmente, pollo y variedades de picadillo.

"Quien te diga lo contrario está diciendo mentiras. Cualquier otro alimento en las tiendas en CUC llega de Pascuas a San Juan, por lo general en módulos que no alcanzan ni para los primeros 100 clientes y a precios que no todo el mundo tiene acceso porque la mitad de los cubanos no estamos trabajando", añadió Cabrera quien se dedica al alquiler de una habitación para extranjeros.

El referente de  "si no tienes dólares no se puede comer" está marcando el ritmo del país para el cubano de a pie, a pesar de los informes y afirmaciones de las autoridades del régimen. Las largas colas que protagonizan los habaneros es para adquirir apenas cuatro o cinco productos entre alimentos de primera necesidad.

"Café, leche [condensada], refrescos, quesos, latas de conserva y hasta el perrito caliente ya casi son un lujo encontrarlos en CUC", atajó Lourdes de los Ángeles Márquez, residente en una barriada de Playa.

"Incluso el aseo personal no es distribuido con la misma frecuencia en todos los municipios. Y como ahora está prohibido comprar en zonas fuera de tu lugar de residencia, la periferia está obligada a comprar a sobreprecio", indicó.

Según Márquez, los módulos de aseo distribuido en los municipios céntricos de la Habana, "desde hace más de dos meses no se asoman" por localidades de Playa. Y tampoco de Boyeros, Arroyo Naranjo y San Miguel del Padrón, confirmaron residentes de varios consejos populares en estos municipios.

El módulo de aseo e higiene, compuesto por tres jabones de tocador Lux, tres de lavar Puro, un tubo de pasta dental Closeup y una frazada de piso, se comercializa a 7CUC.

"Pero ese mismo módulo tuve que comprarlo en 18CUC, a sobreprecio, pues por aquí ni en Romerillo, ni Flores ni Jaimanitas se han distribuido jamás", cuestionó Márquez detallando el precio de cada producto en el mercado: tres jabones de tocador 6CUC, tres de lavar 4CUC, la pasta dental 6CUC y la frazada de piso 2CUC.

Ana María Ortega Tamayo, directora general de Tiendas Caribe, aseguró en julio pasado que la compra de todos los productos que se comercializan en las tiendas para MLC había sido posible a partir de los ingresos obtenidos desde el pasado 28 de octubre de 2019 cuando el régimen abrió la primera veintena de tiendas de tiendas de electrodomésticos y otros artículos exclusivamente en moneda extranjera.

"Y entonces con lo que se venda de esta segunda temporada en MLC dijeron que se abastecería las de CUC. La misma muela de siempre que se repite, pero que sigue siendo eso: muela", fustigó Frank Ernesto Fariñas, vecino de Lawton, refiriéndose a la afirmación de esta funcionaria cuando insistió en que "la prioridad inmediata es proteger la red en CUC y CUP, que satisface las necesidades de la inmensa mayoría de la población".

"Lo único cierto es que se deprimen cada día las tiendas en CUC. Para no hablar de los MAI y los mercados Ideales en moneda nacional donde literalmente no se abastece con nada a excepción de piltrafa de los últimos tiempos. El cuadro es desolador para todo el que no tenga la posibilidad del dólar", explicó Fariñas.

Con la imposición de 15 días de toque de queda en la capital desde el pasado primero de septiembre, y el anuncio de su prolongación por otros 15 días, la situación de los habaneros para completar la dieta alimenticia y el mínimo de aseo personal y otros productos básicos en CUC, se torna imposible.

"Se puede decir que consigues las cosas a puro milagro. Haciendo el doble de colas y por tanto redoblando el riesgo de contagiarse con coronavirus", comentó Teresa Palma, vecina también de Lawton.

"Hasta con dólares corres menos riesgo de contagiarte. Las colas en MLC son hasta más organizadas, pues entre menos personas, menos caos. No tienes el estrés de que el producto se va a acabar o sufrir la angustia de que está racionado. Encuentras todo lo que no hay en CUC y muchísimo menos en moneda nacional", prosiguió Palma.

Un recorrido por los territorios habaneros confirmó que las zonas de la periferia de la ciudad permanecen más desabastecidas. A inicios de este mes de septiembre el jefe del grupo temporal de Comercio del Consejo de Defensa Provincial en La Habana, Luis Carlos Góngora Domínguez, admitió que los suministros no son equitativos desde el punto de vista geográfico, pues "favorecen más a los municipios centrales de la ciudad y menos a la periferia".

Más adelante advertiría que "ninguna de estas medidas tiene la capacidad de evitarlas porque los suministros no nos lo permiten", una contradicción con lo prometido que no pasó de largo para habaneros como Amirán Torres López, vecino del Cerro.

"Más de dos meses llevan vendiendo en dólares y te dicen que no tienen suministros. Según ellos compraron rapidísimo lo que se vende en dólares, pero lo que se vende en CUC no. Eso sí demora", afirma.

"Sin dólares pasas hambre y no te bañas. Eso es lo que hay. Lo demás es Mesa Redonda y Granma; sino, que venga los de Gobierno a las tiendas en CUC y moneda nacional, que verán un país bien distinto a ese que se inventan en la televisión", concluyó Torres López.