Primero una calabaza, ahora una piña por CDR, ¿qué vendrá después?

"En momentos como los que vivimos nosotros, en que el Estado tiene que dedicar recursos importantes a importar alimentos, es un aporte significativo" que cada CDR produzca una piña, aseguró el exespía cubano Gerardo Hernández durante una reunión con vecinos de una comunidad.

El video de la intervención, que se ha hecho viral en redes, muestra al actual vicepresidente de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) exhibiendo una de las frutas que llamó a cultivar ante su audiencia.

"Ustedes representan a varios CDR. El país tiene cerca de 138.000 CDR. Si a un solo cederista por CDR se le ocurre sembrar una piña; uno solo por CDR, ¿de cuántas piñas estamos hablado? 138.000 piñas", manifestó.

A fines de junio, el también Héroe de la República llamó a producir una cifra idéntica de calabaza apelando a la iniciativa de esas organizaciones de vigilancia y delación.

"Decimos una por poner un número, pero lo cierto es que si cada uno de nosotros pone a producir el pedacito de tierra que pueda es menos alimentos que tiene que importar el país. Esa es una misión de los cederistas cubanos", dijo, según reportó en su muro de Facebook el periodista Jorge Enrique Jerez Belisario, del periódico oficial Invasor.

Hernández está de gira por el país para impulsar la campaña que bajo la etiqueta #CultivaTuPedacito los CDR lanzaron en la Isla, como una alternativa para producir alimentos que ayuden a paliar la crisis de suministros que sufren los cubanos.

No obstante, Hernández expresó su frustración porque, como antes sucediera con el llamado de Miguel Díaz-Canel a producir limones en Cuba para que las personas puedan beber limonada, ello provoca burlas e hilaridad en las redes sociales.

"Aunque el enemigo se burle de iniciativas como estas, se burlan los mismos que apoyan el bloqueo y quieren rendirnos", comentó, si bien el choteo sobre tales llamados mesiánicos, que recuerdan las soluciones milagrosas de las que gustaba echar mano Fidel Castro en épocas de crisis, ha tenido su germen entre la población de la Isla. 

"Iniciativas de este tipo, como lo es la agricultura familiar, nos ayudaron a resistir los embates del 'Periodo especial' y ahora tenemos que retomarlas", argumentó, poniendo en evidencia que la situación del país obliga al Gobierno a desempolvar prácticas de tiempos muy difíciles que los cubanos recuerdan con amargura.

Los CDR han hecho constantes llamados a sembrar alimentos en patios, parcelas, huertos y canteros de las viviendas. Su coordinador nacional, Carlos Rafael Miranda, aseguró a la Televisión Cubana que "no podemos dejar ningún espacio" y que deben usarse incluso las macetas para plantas ornamentales en los balcones de los edificios.

La iniciativa vuelve a usar uno de los recursos favoritos de la propaganda del Gobierno cubano: delegar en los ciudadanos la responsabilidad de producir aquello que su ineficaz modelo económico no logra. 

El Estado posee la mayor superficie agrícola y las mejores tierras, y con el mayor equipamiento tecnológico y de suministro de insumos produce apenas entre el 10% y el 12% de los alimentos del país, mientras que entre el 90% y el 88% restante lo generan los campesinos y los 242.000 usufructuarios particulares de tierras estatales que estaban ociosas y cubiertas de marabú y han sido arrendadas a ellos por el Gobierno para que las reactiven.

La deficiente producción de alimentos controlada por el Estado deriva en desabastecimiento, un problema acrecentado por la actual situación del nuevo coronavirus.