El huracán Michael se dirigía este martes hacia Florida tras matar a 13 personas en América Central y causar importantes daños en el occidente de Cuba que ahora empiezan a cuantificarse.
Michael, que aún azotaba la Isla esta madrugada, mientras se alejaba por el Golfo de México, ha provocado fuertes lluvias en Pinar del Río, Isla de la Juventud, Artemisa, La Habana y Mayabeque, según la prensa oficial cubana.
La provincia más afectada hasta el momento es Pinar del Río, donde al menos el 54% del territorio está sin electricidad.
El diario oficial Granma, reportó que son 125.800 los clientes afectados en la provincia. Yosvani Torres, director de la Empresa Eléctrica pinareña, indicó que la situación más tensa está en los municipios de Sandino, Guane, Mantua y Minas de Matahambre, apagados completamente.
Julio César Rodríguez Pimentel, primer secretario del Partido Comunista en Pinar del Río, dijo que esto se debe principalmente a la caída de postes de electricidad y de árboles sobre el tendido eléctrico.
El periódico local Guerrillero reportó que el huracán deja afectaciones importantes en la agricultura. Algunos de ellos en cubiertas de almacenes, casas de cura de tabaco —uno de los principales productos de exportación—, túneles donde estaban los semilleros para la próxima campaña y cultivos de hortalizas.
Más de 400 personas fueron evacuadas en Pinar del Río. Según Guerrillero, hasta el momento no se reportan muertes.
El huracán también ha provocado penetraciones del mar en varias zonas costeras de la provincia. Imágenes difundidas en las redes sociales mostraron asimismo inundaciones en Artemisa y construcciones sin techo en Isla de la Juventud.
Por el momento los reportes no han precisado los daños en viviendas, pero es previsible que serán significativos.
La Empresa Ómnibus Nacionales suspendió los viajes hacia y desde Pinar del Río a partir de este lunes.
Michael ha continuado ganando organización e intensidad. Podría convertirse pronto en un huracán de categoría dos en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de cinco, y llegar al Florida el miércoles con categoría tres.
El gobernador de Florida, Rick Scott, movilizó el lunes a la Guardia Nacional y ordenó a los residentes de la costa del Golfo de México que se dirijan al interior o se preparen para evacuar.
Si llega a Florida con categoría tres, el huracán será una de las tormentas más poderosas que haya azotado la región noroccidental del estado en décadas, informó Reuters.
Scott, declaró estado de emergencia en más de 20 condados de esa zona, conocida como el "Panhandle" o "mango de Florida", y en Big Bend.
Scott también dijo que comenzó la evacuación de miles de hogares, con 1.250 efectivos de la Guardia Nacional ayudando en el proceso y más de 4.000 soldados en alerta.
"El Panhandle de Florida debe estar preparado para un impacto directo con vientos sostenidos con fuerza de huracán", dijo Scott. "Según pronósticos, el huracán Michael alcanzaría la categoría 3 cuando toque tierra y el impacto podría ser devastador. Prepárense ahora", agregó.