"La Administración Obama no hizo nada por la democracia en Cuba", afirmó el senador cubanoamericano Marco Rubio este martes.
En una audiencia del Subcomité de Seguridad Nacional titulada "El acercamiento de Obama con el régimen de Castro: anatomía de una política fallida", Rubio y otros políticos estadounidenses abordaron el "deshielo" entre Washington y La Habana.
En el encuentro, que tuvo lugar este martes en el Miami Dade-College, legisladores y expertos concluyeron que este "deshielo" impulsado por el expresidente de EEUU, Barack Obama, "puso en riesgo la seguridad nacional de Estados Unidos sin lograr un proceso de democratización en la Isla", señala Martí Noticias.
Asimismo, en esta audiencia Rubio sostuvo que este acercamiento puso al Gobierno de Raúl Castro en "una posición privilegiada, favoreciendo el comercio con los militares en la Isla".
"No es de nuestro interés nacional tener un régimen dictatorial antiisraelí, antiestadounidense, pro iraní y pro Putin a 90 millas (unos 150 kilómetros) de nuestras costas", añadió.
Rubio se mostró a favor del "nuevo enfoque" hacia Cuba del presidente Donald Trump y de formar parte junto con otros congresistas cubanoamericanos, como Mario Díaz-Balart, de ese proceso.
Recordó que según las nuevas directrices de Trump, los estadounidenses que ahora viajan a Cuba podrán hacer negocios con ellos, "pero no con el Ejército cubano".
Aseguró que ello impide que el Ejército cubano, a través de sus empresas, cree un dominio absoluto sobre la economía cubana, que no solo los beneficia personalmente, sino que le sirve para fortalecer su control del poder.
De igual forma, resaltó que la nueva política coloca a los cubanos independientes en una posición privilegiada frente al Gobierno estadounidense.
"Piensen en cómo sería nuestro hemisferio hoy si no hubiera un régimen de Castro. No habría Maduro en Venezuela y no habría 24 estadounidenses gravemente heridos como resultado de algún tipo de ataque (sónico) mientras estaban designados en La Habana", indicó Rubio.
"Creo que la apertura con Cuba requirió que el Gobierno de Obama guardara silencio o se hiciera de la vista gorda ante una serie de cuestiones de derechos humanos para no poner en peligro su gran negocio tal como lo veían", aseguró Rubio.
Por su parte, el congresista cubanoamericano Mario Díaz-Balart señaló que Obama fue "inconsistente en política" al ofrecer un acercamiento basado en "concesiones unilaterales" de parte de Washington, detalla Martí Noticias.
"Lo que ha hecho el presidente Obama con su política errada es dar más energía y fuerza a Nicolás Maduro y otros regímenes dictatoriales en el mundo", apuntó la congresista cubanoamericana Ileana Ros-Lehtinen.
Ros-Lehtinen enfatizó en el "peligro de legitimar regímenes como los de Cuba y Venezuela, que no respetan la ley ni la libertad".
Además de los senadores y congresistas que intervinieron este martes, en la audiencia se escuchó el testimonio de otras personas como el del exembajador de EEUU en Venezuela, Otto Reich.
De acuerdo con Reich, apunta Martí Noticias, "la política de Obama fracasó porque ofreció concesiones unilaterales a Raúl Castro que dañaron la seguridad nacional de EEUU y trajo más opresión para el pueblo cubano".
"El principal beneficiado del deshielo fue el complejo militar cubano, dirigido por el hijo político de Raúl Castro", apostilló.
Además, apuntó que "miles de cubanos fueron detenidos" tras el deshielo entre ambos gobiernos.
"Cuba debe devolver a los fugitivos de la Justicia norteamericana y restituir las propiedades confiscadas a ciudadanos estadounidenses", concluyó.
La analista política de la Heritage Foundation, Ana Quintana, dijo que para La Habana "las concesiones de Obama fueron una victoria completa".
Destacó también como otro aspecto negativo "no exigir a Cuba cesar su ocupación de Venezuela. Ellos son los líderes ideológicos de la revolución en Venezuela, han invertido mucho y no van a soltar ahora".
Quintana enumeró las violaciones a los derechos humanos en la Isla (las detenciones a activistas y la represión contra las Damas de Blanco) y habló sobre los llamados "ataques acústicos" que tuvieron lugar en la Isla y que afectaron a una veintena de diplomáticos.
"Fue un retroceso para la política de EEUU en América Latina y puso a nuestros diplomáticos en riesgo", lamentó.
Jaime Suchlicki, director del Centro de Estudios Cubanos, señaló que "el Gobierno de Raúl Castro ha incrementado la represión porque teme un aumento de las protestas públicas. Castro seguirá en control del poder en Cuba a través del politburó y los militares. Es una fachada de transferencia, es una falsedad".
"La demora en la transferencia a Miguel Díaz-Canel significa que Alejandro Castro Espín emergerá con un puesto más alto, tal vez como general. Nada está cambiando en Cuba. Raúl Castro no quiere abrir Cuba ni ser amigable con Estados Unidos", agregó el académico.
Los participantes en la audiencia, además, "llamaron a no reconocer la sucesión en Cuba, porque será una transferencia de poder ilegal, que no significa ningún cambio", precisa Martí Noticias.
Sobre la pregunta de si la política de Obama había tenido resultados tangibles para el pueblo cubano, Suchlicki respondió que el acercamiento a La Habana "inspiró a Castro para reprimir más a su pueblo, porque "nadie estaba mirando".
Acerca de un posible cambio de política del régimen cubano tras el acercamiento de Obama, el académico sostuvo que "eso no ocurrió".
"Los miembros del panel recomendaron a la Casa Blanca volver a incluir a Cuba en la lista de países terroristas, y señalaron que el Departamento de Estado no realizó una revisión seria antes de determinar la actual exclusión. También recomendaron aplicar la ley a la hora de establecer comercio con países como Cuba, y evitar el tráfico con propiedades robadas, y con un régimen que viola las libertades laborales", concluye Martí Noticias.