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Relaciones Cuba-EEUU

Las cinco preguntas de detective sobre los ataques acústicos de La Habana

De las cinco preguntas clásicas que se formula un detective de homicidios, en este caso hay varias despejadas ya.

Miami
Kamala Harris, vicepresidenta de EEUU, vio demorado su viaje de Singapur a Vietnam por el 'síndrome de La Habana'.
Kamala Harris, vicepresidenta de EEUU, vio demorado su viaje de Singapur a Vietnam por el 'síndrome de La Habana'. Ap

El presidente Joe Biden ha apremiado a la comisión que debe emitir un veredicto sobre los ataques acústicos ocurridos en Cuba. Una cascada de artículos periodísticos tienden a subrayar incógnitas y misterios pendientes dejando en los lectores el sabor de que es imposible determinar qué sucedió y sí Cuba es o no responsable de esos hechos. Lo cierto es que de las cinco preguntas clásicas que se formula un detective de homicidios —qué, dónde, cuándo, quién y por qué— hay varias despejadas.
 
¿Qué?

Se sabe qué fue lo que sucedió: la salud de poco más de dos docenas de diplomáticos de EEUU fue dañada de manera grave y permanente. Esto está más allá de toda discusión. Lo demostraron múltiples exámenes clínicos efectuados por varios médicos y especialistas de diferentes instituciones apoyados en pruebas de laboratorio, MRI, y otros instrumentos de gran precisión.
 
¿Dónde?

Conocemos con exactitud dónde ocurrieron estos hechos: en las casas alquiladas por EEUU al Estado cubano como viviendas para los diplomáticos estadounidenses y sus familiares en La Habana. Igualmente conocemos el contexto operativo en que se produjeron esos actos. Sabemos que esas residencias diplomáticas y sus inquilinos estadounidenses son los más vigilados de todo el país, 24x7, por el sistema de seguridad del Estado totalitario cubano que incluye sistemas remotos de escuchas y seguimiento de sus movimientos.
 
¿Cuándo?

Se sabe que los ataques acústicos se iniciaron en 2016, en pleno furor del llamado deshielo, aunque se hicieron públicos en agosto de 2017. Para entonces ya se habían restablecido a nivel de embajadas las sedes diplomáticas en ambos países. Las negociaciones habían comenzado temprano en  2013 y culminado con la decisión de restablecer relaciones diplomáticas plenas, lo que se hizo público por los presidentes de EEUU y Cuba el 17 de diciembre de 2015.
 
¿Quién?                   

Se esgrimen dos hipótesis: la que culpa exclusivamente al Gobierno cubano y la que lo exculpa suponiendo que un tercer actor los realizó de manera independiente. Las otras explicaciones son risibles, al estilo de que una manada de grillos emitían ruidos que solo escuchaban los estadounidenses, o que se trataba de una histeria colectiva desarrollada por los 26 diplomáticos.

La hipótesis del tercer actor autónomo es la más frecuente entre quienes quieren exonerar a la elite de poder cubana y su Ministerio del Interior (MININT) por lo ocurrido. Sin embargo, para que un tercer actor pueda operar de manera autónoma e independiente de la red de la Contrainteligencia cubana debe disponer de facilidades logísticas excepcionales que solo tiene el MININT: locales próximos a esas viviendas donde puedan instalarse puntos fijos de vigilancia para operar varios equipos transmisores contra más de una docena de residencias diplomáticas, las 24 horas durante meses, sin ser descubiertos por las múltiples escuchas y agentes operativos de la Contrainteligencia cubana.
 
Puede valorarse la hipótesis de que el MININT realizó estas acciones con la cooperación de otro servicio de inteligencia extranjero que quizás proporcionó el dispositivo y los operadores capacitados en su empleo. Sin embargo, nunca en las pasadas seis décadas las operaciones encubiertas cubanas dentro de la Isla  fueron dirigidas por agencias extranjeras. Una operación de esta naturaleza, de haber necesitado de la cooperación de terceros, siempre se habría ejecutado bajo la autorización y pleno conocimiento de la máxima autoridad del país, así como bajo la supervisión y control logístico de la autoridad ejecutiva de la Contrainteligencia cubana.
 
¿Por qué?

El proceso de negociaciones con EEUU conocido como deshielo nunca fue el objetivo primario para la elite de poder cubana. Ese era su Plan B en caso de que perdiesen Venezuela. El Plan A era no perder el control sobre Venezuela después de que muriese Chávez. Los Castro sabían que eso podía ocurrir de un momento a otro por el agresivo y letal cáncer que le aquejaba. Las conversaciones con EEUU corrían en tiempo paralelo a una fase crítica de la dominación de Venezuela por Cuba. Progresaba el peligroso cáncer de Chávez, al tiempo que se aproximaban elecciones presidenciales (abril de 2013) y parlamentarias (diciembre de 2015) en aquel país, y crecía la oposición popular al régimen bolivariano. El deshielo no era otra cosa que un seguro de vida de la elite de poder cubana —su Plan B— en caso de perder Venezuela.
 
Despreciar y sabotear la oportunidad de normalizar relaciones con Washington fue una constante de Fidel Castro, todavía vivo e influyente en 2015. Lo había hecho en 1959, 1975, 1978, 1996, y ahora se disponía a reincidir en su conducta después de sacarle partido económico y de imagen internacional a la generosa rama de olivo que le ofrecía el presidente Obama.
 
Una vez asegurado su control sobre Caracas había llegado la hora de cosechar remesas, viajes turísticos, cancelación de deudas, mientras cerraba la puerta a los negocios provenientes de EEUU y restablecía el control sobre el masivo de flujo de visitantes y diplomáticos estadounidenses que se movían libremente en las instituciones oficiales y la sociedad civil.

También había llegado la hora de restablecer controles, restricciones e impuestos asfixiantes sobre el incipiente sector no estatal que pudiera desarrollarse a la sombra del deshielo. El descenso de ese sector fue una decisión deliberada de la elite de poder cubana y comenzó en esa etapa, no fue resultado de las sanciones del presidente Donald Trump.
 
¿Fueron accidentales los daños ocasionados?

Si las emisiones de energía se iniciaron para escuchar dentro de las residencias pero de forma accidental comenzaron a dañar gravemente la salud de los diplomáticos, nada impidió que se continuase cuando se supo el daño que estaban causando. Los oficiales a cargo de esa operación, en especial el coronel Alejandro Castro Espín, no las detuvieron al enterarse (incluso antes que el propio embajador estadounidense) de lo que sucedía.  A su mesa llegaban los informes diarios del personal de los equipos de escucha que se turnaban en seguir y resumir las conversaciones de esos diplomáticos las 24 horas del día. En ellos se reflejaban sus comentarios sobre las dolencias que los aquejaban. Los niños llorando por dolores de cabeza, pérdidas de equilibrio y vómitos no los conmovieron.
 
En resumen: incluso la hipótesis de que podrían haber sido daños colaterales accidentales, no deliberados ni previstos, pierde todo valor desde el momento en que en el MININT supo lo que estaba sucediendo y continuaron durante meses estas acciones.
 
El uso de equipos de emisión de energía que perjudicaron la salud de los diplomáticos de EEUU y Canadá fue aprobado por miembros de la alta jerarquía cubana y estaban bajo control operativo de su servicio de Contrainteligencia, aun de haber sido, si ese fue el caso,  manejado por algún técnico de otra nacionalidad.
 
El coronel Alejandro Castro Espín era el máximo responsable de supervisar esa operación y no la detuvo al conocer que dos docenas de diplomáticos estadounidenses se quejaban de los mismos inexplicables padecimientos.
 
Si espiar enemigos tiene una larga tradición en la política internacional, la Convención de Ginebra establece con claridad la responsabilidad que tiene el país anfitrión por la seguridad de los diplomáticos extranjeros acreditados en su territorio.
 
El suavemente llamado "síndrome de La Habana" fue, desde el momento en que los sistemas clandestinos de escuchas detectaron las quejas en los hogares de los estadounidenses, un ataque consciente y despiadado contra la salud de esos diplomáticos y sus familiares incluyendo menores.
 
La lección principal
 
Washington debe seguir investigando qué tecnología produce esos efectos y quiénes las han empleado en otros puntos del mundo donde se afirma que han ocurrido después de lo sucedido en La Habana. Pero lo que sí ha sido documentado plenamente desde el punto de vista médico en más de dos docenas de diplomáticos en Cuba son las afectaciones a su salud por esos sucesos. 
 
Al margen del modo en que la Administración Biden proceda en la política bilateral en lo adelante, hay una lección importante que derivar de lo ocurrido.
 
Cuba es un país secuestrado por una oligarquía que se ha apoderado de las principales instituciones y las ha puesto a su servicio. Por esa razón, la forma de definir "sus mejores intereses" no es la misma que emplea un Gobierno democrático, en una sociedad abierta, con economía de mercado y Estado de derecho.
 
El máximo objetivo de esa nueva oligarquía cubana no es fomentar la paz regional y el bienestar colectivo, sino su eternización en el poder y el enriquecimiento personal. En ese paradigma la búsqueda de la estabilidad para ellos es algo diferente de lo que ese concepto representa para los decisores en Washington. No buscan la gobernabilidad democrática como herramienta de estabilidad sino el ejercicio del poder totalitario.
 
Cualquier valoración de cómo conducir la política hacia Cuba que intente olvidar o minimizar el significado de los ataques acústicos o desconozca la lección principal que emana de ellos, está condenada al fracaso.
 
Lo que es peor: enviaría un mensaje de debilidad a los enemigos de EEUU en todo el mundo.

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19 comentarios

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Que vale mas para EU? Taiwan o Cuba? Ucrania o Cuba? O Taiwan mas Ucrania mas los tres paises balticos o Cuba? Las respuestas a esas tres preguntas explican la longevidad de esa letrina Cuba. Ahora con este debil fraude impuesto con covid Chino y chantajeado por los rusos y chinos atravez de los sobornos canalisados con su drogadicto hijo pues China o Rusia pueden quedarse con todos esos lugares y todavia mantener a la Fam. CASTRO en Cuba, ataques sonicos o no China y Rusia son duen~os de Biden

Otra paja "periodística"!? Perdí mi tiempo leyendo esto :(

Profile picture for user Plutarco Cuero

¡ Abajo la Pandemia Comunista de Cuba ( PCC ) !

¡ Patria y Vida !

Continuando con el lenguaje detectivesco del articulo la finada Agata seguramente preguntaría por el motivo y el arma del crimen. Ninguno de los dos esta claro.
Interesante articulo, sin embargo el sr. Blanco pretende pasar puras especulaciones como verdades rotundas. Se le "olvida" ademas se~nalar que el mismo síndrome ha sido detectado en otras partes del planeta, e.g. Beijing y Washington, lo que hace poco creíble la hipótesis de un trabajo de la seguridad cubana en solitario.

Una vez que los servicios de inteligencia norteamericanos obtengan contestas a las inteligentes interrogantes del autor, lo más probable es que sean archivadas, dada la respuesta que exigiría semejante agresión. Otras actuaciones parecen confirmar que estos oscuros episodios de inteligencia se guardan en espera de un mejor momento para desempolvarlos, lo cual a veces nunca ocurre. Cierto que también han provocado intervenciones.

Probablemente el gobierno cubano haya prometido proteger con eficacia a los funcionarios extranjeros y familiares que próximamente arribarán a la isla. Enviarlos sin estas garantías sería muy irresponsable. Quienes tengan expectativas de que estos atentados a la salud de civiles darán réditos políticos, perded toda esperanza, porque el Síndrome de La Habana promete quedarse convertido en flagelo dentro de la comunidad diplomática, ya que vemos en otros escenarios semejantes ataques.

Gracias al señor Juan Antonio Blanco por su excelente artículo.

Profile picture for user Plutarco Cuero

Pues los diplomáticos deberían empezar a exigir remuneraciones extras ante estos peligrosos "nuevos escenarios" .... que los afecta a ellos y sus familiares ... La kkson no es pequeña y le aseguro que quizá no nos enteremos, pero si encuentran a los culpables; los van a eliminar, quizás como usted sugiere; silenciosamente ....

Que manera de hablar porqueria

Profile picture for user Plutarco Cuero

Yo los invadiera .. para "buscar" las evidencias ....

Profile picture for user Plutarco Cuero

UUmmm ... El problema es que ¿Donde? es ahora polifacético ... no exclusivo al territorio de Cuba ... muy convenientemente ....

Profile picture for user Ana J. Faya

Es bochornoso que el gobierno de El Niño Trudeau en Canadá haya sido tan condescendiente con el régimen de La Habana ante este fenómeno. Han sido los diplomáticos perjudicados quienes han protestado más, quienes han hecho público este fenómeno con más firmeza, incluso plantando querellas al gobierno canadiense. Recién hace unos días otro caso de un diplomático enviado a Cuba por 2da vez fue afectado por ese mismo invento extravagante y peligroso. Al menos la Administración Biden ha expresado que siguen las investigaciones, ahora con Kamala Harris suspendiendo una visita por efectos de esta misma locura.... en Vietnam.... among all places!

El infante Trudeau es parte. El se hace el que no, pero si. Y todavia en Canada le creen. Pero nosotros estamos locos.

Profile picture for user Rolando Laserie

Desde los romanos, las preguntas del detective de homicidos [cuando aquello creo que eran los pretores] no son cinco (esas son la del periodismo) sino siete y aquí el autor deja fuera cómo y con qué, que son las definitorias del caso. Y si no hay forma de exculpar al gobierno cubano, pues si no es autor es cómplice, hay que admitir también que las autoridades norteamericanas son flojísimas de pata, porque semejante ataque es una acción terrotista que lleva por plantilla represalia militar desde Estados Unidos declaró la guerra global al terrorismo. Y la hipótesis del por qué: frustrar las intenciones acomodaticias del hermano Obama, tiene dos puntas para responder a quién le intersaba tal frustración, ¿no?

Profile picture for user Weston

Al fin un artículo analítico, inteligente, mesurado!!
Lo que más me intriga de este affair es que no se trata de una condición médica clara. Es decir, sabemos que las personas han sido afectadas, pero la expresión clínica no parece consistente y la causa no se ha logrado determinar en casi cinco años.
Coincido con el Sr. Blanco en que no hay forma de exculpar al gobierno cubano, particularmente porque "el Hermano Obama", con su política de acercamiento, era definitivamente un gran peligro para el poder en Cuba. En realidad, la prosperidad del país y el mantenimiento del poder son antagónicos.

Yo lo que sigo sin entender es que si "lqqd" que "el Hermano Obama" "con su política de acercamiento era definitivamente un peligro para el poder en Cuba" ¿por qué entonces seguimos insistiendo en la politica de la guerra fria que no dió ningún tipo de resultado? El gobierno de Cuba no quiere caldo pero nosotros en vez de seguir la lógica del refrán, no le vamos a dar las tres tazas por malagradecido.
Vamos a arreciar el bloqueo, cerremos filas. Imaginense una Cuba con una cortina de hierro, sin celulares, sin internet, sin paquetes, sin computadoras personales (para eso esta el decreto 35 y vendran otros), con los libelos y el menticiero como unicas fuentes de informacion para el pueblo. Hoteles solo para turistas extranjeros. etc, etc, etc. "Ahora si vamos a construir el socialismo" y "Mañana se cae".

Profile picture for user Weston

Shingurato, gracias por su comentario. Voy a explicarle mi posición porque los orates del foro hablan tanto de Weston, y lo atacan sin obtener respuesta, que a veces dejan la impresión de que yo pienso como ellos dicen que yo pienso.Soy conservador. Voté por McCain y por Romney. Ambos perdieron. Después vino Obama, que para mi fue el presidente más nefasto que ha tenido el país, pero también el más adorado por los liberales dentro y fuera de los Estados Unidos. Una de las pocas coincidencias mías con Obama fue la apertura con Cuba. Me pareció que cualquier golpe podría romper el hielo de tantos años, cualquier cosa era mejor que la anquilosis entre los dos países. Y resultó así.Fidel vio el peligro de inmediato.Aquella visita de Obama a Cuba le hizo más daño que mil bombas.Pero aquello no prosperó precisamente por la resistencia al cambio del gobierno cubano.Después vino Trump y casi los puso de rodillas con una política distinta; pero ya Trump no es presidente.Abrir de nuevo es bueno.

Muy buenos sus comentarios estimado Weston, si no he entendido mal, usted apoyaría medidas muy fuertes y efectivas, como las impulsadas por la pasada administración y no las "politiqueras" al uso hace décadas, o de lo contrario se inclinaría por una generosa apertura que, si bien no haría caer al gobierno, es porque precisamente hace mejorar el bienestar de las gentes.

El dolor de los cubanos se ha elevado con la pandemia (sea por indigencia de recursos o mala administración del Estado --o por ambas-- en el tema sanitario) así que debería la comunidad cubana en el exterior decidir una de estas dos rutas y presionar en el Congreso e influir en los políticos de nivel nacional para que una de ellas se haga realidad.

Una pena que, como en el 1868, no pueda el pueblo cubano sacudirse de esta nueva tiranía sin pasar por las manos y voluntad norteamericanas.

Saludos.

Profile picture for user Weston

Amigo John, le confieso que no apoyé incialmente las medidas de la administración Trump. Simplemente me sorprendieron sus resultados. Con respecto a Cuba yo no soy radical. En primer lugar, porque los mandones de hoy no son los mandones de ayer, culpables de todas las desgracias del pueblo cubano. En segundo lugar, porque quiero ver a la gente de Cuba respirando, prosperando, y sentí que eso ocurrió cuando la apertura de Obama. Desde luego, nadie tiene que darme lecciones acerca de que el gobierno es una vulgar dictadura, de que sólo con libertad y democracia la gente es feliz, etc, etc. Eso lo sé, pero las medidas "duras", han afectado sólo al pueblo en estas seis décadas. La "nueva clase" ha vivido bien, y ya preparan su futuro enviando a sus hijos al extranjero. Siempre he tenido el criterio de que mientras más capitalismo entre en Cuba, menos espacio quedaría para el socialismo.
Saludos

Eso es fácil se tiene pico de pato patas de pato alas de pato pues es pato la culpa la tiene la tiranía nazi comunista y su elite si esto no es un acto de guerra entonces sigan con sus pendejadas de ayudar al enemigo, tu enemigo siempre será tu enemigo , sino fíjense en Irak,Afganistán, China Rusia etc etc no se que pasa con ?? que estos tontos en Washington no hacen nada , esta la enmienda platt que en su primer capitulo lo dice en caso de disturbios los de uu pueden intervenir pasa en el siglo pasado y hubo intervenciones, sino que devuelvan la base y que se retiren de cuba y rompan relaciones para siempre.