El doctor Alexander Raúl Pupo Casas, quien ha recibido amonestaciones en su centro laboral y ataques en redes sociales durante los últimos días por sus críticas al Gobierno de la Isla, renunció a su empleo en el hospital Ernesto Guevara de Las Tunas, donde realizaba una residencia en Neurocirugía, según informó en su perfil de Facebook.
De acuerdo con las declaraciones de Pupo Casas, la Comisión de Ética del hospital dictó un fallo en su contra, y lo más sorprendente fue "el descaro de la persona que leyó el documento", quien afirmó que ellos no lo "sancionan", sino que "emiten su juicio y es competencia de otros el dictamen final".
Además, Pupo Casas reveló que la mencionada persona estuvo en su entrevista, donde "no tuvo argumentos de ningún tipo para formular dicha acusación".
"Yo, por mi parte, espero haber sido bastante claro en mi exposición, cuando les hablé sobre lo que para mí significa ser un buen médico. Y es que la medicina debe sentirse más allá de toda política sucia, más que amar a una ideología. Un médico decente ama su profesión por encima de todo, lucha por mejorar la calidad de sus servicios sin pausa y da lo mejor de sí a cada paciente. Ellos, desgraciadamente en ese hospital no lo entienden", explicó el doctor.
Por ese motivo, afirmó que decidió entregar su carta de renuncia a ese centro, donde deja buenos amigos entre sus compañeros de trabajo, sus pacientes e incluso algunos directivos que le brindaron su apoyo.
"Dejo los servicios médicos en Las Tunas, pero no la medicina. Yo seguiré sin pausa trabajando por mejorar como médico y como persona. Seguiré cosechando amigos, pues si de algo me ha servido toda esta dura experiencia, es para saber que quien tiene amigos ya ganó, ya lo tiene todo", escribió Pupo Casas.
A inicios del mes de septiembre el joven doctor denunció las primeras amenazas en el centro hospitalario donde laboraba, específicamente por criticar en sus redes sociales asuntos como los bajos salarios de los profesionales en la Isla, la falta de libertad de expresión y los injustos contratos de las misiones médicas.
Entonces dijo haber sido llamado a una reunión privada por directivos de su centro de trabajo con el objetivo de persuadirlo para que deje de publicar sus ideas en Facebook, lo que le dijeron que "no resolverá nada" y solo le "traerá problemas" en su "vida personal y laboral".
En la noche del pasado jueves las represalias contra Pupo Casas adquirieron un grado mayor, pues fue expulsado de la beca donde vivía en Las Tunas.
"Hoy viví en carne propia la mayor de las injusticias al ser privado de mi derecho a pensar libremente. Hoy en muchos amigos vi la decepción mezclada con impotencia cuando vieron que me desalojaban de la beca sin previo aviso y como si fuera un delincuente. Tantos médicos como yo que, aun sabiendo lo injusto del proceder, decidieron bajar sus cabezas solo porque saben que hoy soy yo, pero mañana pueden ser ellos", lamentó entonces.
Desde entonces ha recibido numerosos ataques en las redes sociales, algunos de ellos provenientes de la doctora Lisette Ponce de León, jefa de servicio de Neurocirugía del hospital Ernesto Guevara de Las Tunas, a quien el doctor señaló como artífice de una campaña difamatoria en su contra.
También la Universidad de Ciencias Médicas de Holguín, donde Pupo Casas realizó la carrera de medicina, lo cuestionó este lunes en redes sociales, diciéndole que se ha convertido "en una pésima mercancía que los vendepatria han comenzado a comerciar para congraciarse con los amos, como buenos lacayos".
Los autores de ese texto lo denunciaron, además, por "instigar al desorden y crear campañas y estados de opinión desestabilizadores del orden institucional y civil".
El Observatorio de Libertad Académica, una organización fundada en julio del presente año con el propósito de "documentar y visibilizar la discriminación por motivos políticos" y las violaciones a la libertad de cátedra en las universidades cubanas denunció este lunes el caso de Pupo Casas durante la 117 sesión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Las expulsiones de estudiantes y profesores por cuestiones políticas en la Isla no son más frecuentes porque muchos se limitan a expresar sus ideas, e incluso las ocultan con el fin de evitar las mencionadas sanciones.
La propia viceministra de Educación Superior, Martha Mesa Valenciano, afirmó que "el que no se sienta activista de la política revolucionaria de nuestro Partido, un defensor de nuestra ideología, de nuestra moral, de nuestras convicciones políticas, debe renunciar a ser profesor universitario".
El actual presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, expresó en 2009, cuando se desempeñaba como ministro de Educación Superior, que "el criterio de que la universidad es para los revolucionarios será patentizado", y agregó que "la selección de los alumnos que integrarán el claustro luego de graduados tiene que ganar en calidad, no solo debe prevalecer el criterio académico, sino también sus actitudes revolucionarias y compromiso social".
El doctor quiere hacer otra profesion
Puedes estar seguro que más digna que la tuya arenoso.
SIGA ASI CUBANO QUE MAS ALLA HAY OTROS PUEBLOS QUE SI MERECEN LA PENA VISITAR,ANIMO ,EL PUEBLO ESTA CONTIGO AUNEQUE NO LO MANIFIESTE POR MIEDO A LA CRUEL REPRESION DEL SISTEMA DE GOBIERNO CRIMINAL.