El Gobierno de Donald Trump anunció el martes 4 de marzo que pone fin a una licencia que Estados Unidos había otorgado a la petrolera Chevron para operar en Venezuela y exportar su petróleo, luego de que Washington acusara al dictador Nicolás Maduro de no avanzar en las reformas electorales y los retornos de migrantes.
La Administración de Joe Biden había autorizado a algunas empresas a mantener operaciones en Venezuela y exportar petróleo a ciertos mercados, incluidos los Estados Unidos, Europa e India, como excepciones a su régimen de sanciones al sector energético chavista, impuesto por primera vez en 2019
Tras asumir el cargo en enero, Trump dijo que Estados Unidos no necesita el petróleo de Venezuela, que el año pasado representó alrededor del 3,5% de todas las importaciones de crudo de ese país, equivalente a unos 220.000 barriles por día (bpd). Sin embargo, ese flujo ha sido un medio clave para que Chevron recupere miles de millones de dólares en deuda pendiente de Caracas.
Chevron tendrá hasta el 3 de abril para reducir las exportaciones y otras operaciones en Venezuela, según una actualización de la licencia publicada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos el martes, y citada por la agencia de noticias Reuters.
La actualización sustituye a la licencia anterior otorgada a Chevron en noviembre de 2022, que le permitió expandir sus operaciones y reanudar las exportaciones venezolanas a EEUU.
Un portavoz de Chevron dijo que la compañía estaba al tanto de la directiva de Trump y que acataría cualquier instrucción dada por el Tesoro para implementarla, citó Reuters.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, también dijo el mes pasado que se emitiría una nueva política sobre la presencia y operaciones de otras compañías petroleras extranjeras en Venezuela. Esos detalles no han sido revelados.
Las empresas conjuntas de Chevron con PDVSA representan alrededor de una cuarta parte de toda la producción de petróleo del país.
En enero, Chevron exportó casi 300.000 bpd de petróleo venezolano a Estados Unidos, proporcionando una fuente muy necesaria de crudo pesado a sus propias refinerías y otras operadas por empresas como Valero Energy, PBF Energía, Phillips 66 y Exxon Mobil.
La licencia de Chevron, que está respaldada por un amplio acuerdo con PDVSA e incluye la operación de yacimientos petrolíferos conjuntos y el comercio de crudo, ha proporcionado una fuente constante de ingresos a la dictadura de Maduro desde principios de 2023 a través de regalías y pagos de impuestos. El dinero ha impulsado la maltrecha economía venezolana, especialmente sus sectores petrolero y bancario, que se expandieron el año pasado.
Se espera que la cancelación de la licencia reduzca la cantidad de dólares que se ofrecen en el mercado cambiario de Venezuela, avivando la depreciación de la moneda local y los precios del bolívar, según analistas.
Bajo los términos de la licencia vigente, Chevron tenía permitido operar en Venezuela hasta finales de julio, por lo que la decisión anunciada ahora adelantará el cese de la actividad en casi cuatro meses.
El chavismo culpa al "lobby del extremismo" del fin de la licencia de Chevron en el país
La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, culpó al "lobby del extremismo venezolano", en referencia a la oposición, del fin de la licencia a la petrolera estadounidense Chevron.
"El nuevo Gobierno de los EEUU ha sucumbido a la presión de sectores opositores fracasados y derrotados de Venezuela, al sancionar definitivamente a la empresa estadounidense Chevron", afirmó Rodríguez a través de un comunicado.
Asimismo, resaltó que Chevron "tiene más de cien años operando campos petroleros en Venezuela", pero "hoy gracias al lobby del extremismo venezolano ha sido apartada de sus operaciones en el país", citó la agencia de noticias EFE.
"Ni en el pasado ni ahora los mismos opositores fracasados y derrotados podrán hacerle daño a nuestro país. Una gran conciencia y unión nacional seguirá marcando el camino de la recuperación económica con justicia social", aseguró Rodríguez.
En este sentido, la funcionaria manifestó que Nicolás Maduro "ha ordenado la activación del Plan Independencia Productiva Absoluta", con el propósito de que la industria de hidrocarburos y la economía del país "siga su recuperación estable y diversificada".
La también titular de Hidrocarburos reiteró que, con esta decisión, el Gobierno de Donald Trump se "está autoinflingiendo un perjuicio, al causar incremento en el precio de los combustibles y afectando la seguridad jurídica de las inversiones de sus empresas en el extranjero", lo que, a su juicio, pone en "entredicho la supuesta y engañosa libertad económica".