El chavismo encabezado por Nicolás Maduro ha barajado opciones para evitar una confrontación abierta con el nuevo Gobierno de Donald Trump, dado el historial del mandatario estadounidense quien en su primer Gobierno promovió una política de "máxima presión" sobre el régimen venezolano. En Caracas apuestan a que Venezuela no sea una prioridad para la Casa Blanca.
De forma discreta, el régimen de Maduro ha transmitido señales de acercamiento al nuevo Gobierno de EEUU, que se inició este 20 de enero para un periodo de cuatro años. Según pudo conocer DIARIO DE CUBA por fuentes diplomáticas, el chavismo ha usado canales diplomáticos de países amigos de Caracas que tienen comunicación con Washington.
Básicamente, la tesis de Caracas es que dentro de Venezuela existe un clima de paz y que el Gobierno de Maduro está dispuesto a trabajar con el sector petrolero internacional, incluido el estadounidense.
Entre altos funcionarios venezolanos se cree que la Casa Blanca de Trump no dará una gran prioridad a la política exterior, y no vislumbran que el mandatario estadounidense vaya a lanzar una suerte de cruzada por la democracia en Venezuela sin que ello represente de forma nítida alguna ganancia para EEUU.
"En las primeras de cambio el Departamento de Estado tiene muchas urgencias que atender, nuestro país no es una amenaza para EEUU", matiza un asesor parlamentario en política exterior del chavismo ante una pregunta de DIARIO DE CUBA.
Como era de esperar, en los diferentes discursos que dio en torno a su toma de posesión Trump no enfatizó una agenda democrática para América Latina, como muchos expertos reclaman, ante el avance autoritario que exhiben Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Sin embargo, al ser interrogado por un periodista sobre Venezuela, Trump señaló que sigue con atención lo que ocurre en este país y adelantó lo siguiente: "Probablemente vamos a dejar de comprar petróleo a Venezuela. No lo necesitamos".
La otra mención de Trump sobre Venezuela estuvo más relacionada con la migración, al insistir en denunciar la presencia en territorio estadounidense de delincuentes venezolanos de una red criminal transnacional conocida como Tren de Aragua.
Lo señalado por el nuevo presidente, tuvo una respuesta inmediata desde Caracas. El fiscal general Tarek William Saab, a quien se le suele relacionar con el número dos del régimen, Diosdado Cabello, de inmediato manifestó la disposición de la Fiscalía venezolana en colaborar con la Justicia de EEUU, incluso dejando abierta la puerta para realizar extradiciones.
Asimismo DIARIO DE Cuba supo que Venezuela ha dejado saber a Washington que podría recibir vuelos de repatriación de migrantes venezolanos sin documentación desde EEUU, lo cual constituye una suerte de guiño hacia la política de Trump de realizar deportaciones masivas como parte de una política migratoria mucho más restrictiva y punitiva.
Este lunes, mientras tenía lugar la toma de posesión de Trump, varios medios privados afines al chavismo pusieron a circular masivamente una fake news usando imágenes del mandatario, pero de 2020. En un vídeo breve entresacaron un mensaje suyo diciendo que a Venezuela le iría muy bien, y según este framing propagandístico, en tal opinión quedaba incluido el Gobierno de Maduro.
Sin embargo, la política que llevará adelante el Gobierno de Trump en relación con los autoritarismos latinoamericanos es aún una incógnita. Si bien el exsenador Marco Rubio, designado al frente del Departamento de Estado, ha sido un férreo defensor de la política de sanciones hacia La Habana, Managua y Caracas, no existe ningún documento o pronunciamiento formal que proporcione señales. En este intersticio se mueve el chavismo.
La jefa de Gabinete de Donald Trump, Susie Wiles, fungió como intermediaria en 2017 entre Trump y Maduro, en una labor de cabildeo que entonces contrató la cadena de televisión venezolana Globovisión, perteneciente a Raúl Gorrín, quien es un empresario acusado en Miami por lavado de dinero. Hechos de este tipo generan suspicacia sobre los caminos que puede tomar el chavismo en este 2025 en aras de evitar ser un problema para Washington.
A eso se suma los tópicos que sí puso en agenda Trump. Sin que la agenda internacional haya sido tema central en sus primeras intervenciones de este lunes 20 de enero, para el presidente estadounidense el foco en América Latina parece estar en el Canal de Panamá, la migración hacia su país y el papel que pueda tener México en relación con el tráfico de drogas y la inseguridad.
En diversos mensajes previos a este 20 de enero, Trump reiteró que su plan es recuperar el control estadounidense sobre el Canal de Panamá, bajo el argumento de que está controlado por China. En el fondo, según proyectan analistas, el presidente dará más fuerza discursiva y posiblemente acciones mediáticas para dejar en evidencia una política de guerra comercial con China que ha estado en la agenda de la Casa Blanca en los últimos ocho años, tanto en su primer Gobierno como durante el mandato del demócrata Joe Biden.
Se calcula que cada día pasan por el Canal de Panamá entre 36 y 38 barcos, y alrededor del 70% de las naves que transitan sus aguas están relacionados con EEUU (ya sea por bandera, puerto de partida o de destino), lo que lo convierte en un elemento clave también para la economía estadounidense.
Washington devolvió las instalaciones del Canal a Panamá en 1977, gracias a los Acuerdos Torrijos-Carter y el país centroamericano asumió efectivamente el control de las instalaciones en 2000. No existe ningún mecanismo establecido legalmente para que pueda revertirse aquella decisión y tampoco perciben los analistas que Trump lanzaría una operación militar para recuperar dichas instalaciones.
En Caracas, entretanto, ven con satisfacción que en relación con la región Trump haya puesto este tema en agenda, ya que desvía el foco en la discusión sobre la deriva autoritaria en Venezuela.
IMPONER LA DOCTRINA MONROE Y LIMPIAR NUESTRO PATIO DEL VIRUS COMUNISTA ES LO QUE HACE FALTA Y EL CANAL PA' LOS GRINGOS. LOS GRINGOS LO CONSTRUYERON, PUSIERON EL DINERO, PUSIERON EL SUDOR, PUSIERON LOS MUERTOS EN ACCIDENTES. NO ES JUSTO QUE LOS CHINOS SE ESTÉN ADUEÑANDO DEL CANAL.TRUMP, PA' LANTE Y PA' LANTE Y AL QUE NO LE GUSTE, QUE TOME PURGANTE
Sería conveniente para la administración Trump dormir a Másburro con el cuento que USA no afectará a Venezuela, y así poder zumbarle los miles y miles de delincuentes venezolanos que han entrado por la frontera, y hacer que el régimen pague por el traslado a Caracas tras ser deportados, y una vez se logre salir de estas bandas criminales, proceder a cortarle el agua y la luz a Miraflores.