Así como el 28 de julio quedó como una suerte de fecha emblemática en la lucha prodemocracia de los venezolanos, cuando en las urnas se evidenció un rechazo mayoritario hacia el régimen de Nicolás Maduro, en estos días crece la expectativa sobre lo que rodeará al próximo 10 de enero, día oficial para que comience un nuevo periodo presidencial en Venezuela.
El actual gobernante y sus más cercanos colaboradores han ratificado que el venidero 10 de enero, Maduro asumirá desde la sede de la Asamblea Nacional para un nuevo periodo de seis años. Otros poderes públicos, como el Consejo Electoral y el Tribunal Supremo, refrendaron la tesis oficial de que Maduro triunfó en las urnas el pasado 28 de julio. Sin embargo, no mostraron actas electorales ni resultados desagregados.
La oposición prodemocracia, en tanto, recopiló e hizo públicas en internet más de 83% de las actas que pudieron recabar en esa jornada. De acuerdo con estos resultados, incompletos, pero irreversibles, el ganador fue Edmundo González Urrutia con el 70% de los votos, mientras que el chavismo obtuvo un 30%.
Obligado a exiliarse en medio de una razzia represiva postelectoral, González Urrutia desde Europa adelantó que se juramentará "dentro de Venezuela" el 10 de enero, pero se ha negado a dar detalles por razones de seguridad sobre cómo sería su ingreso al país.
Entretanto, la líder opositora María Corina Machado, quien está oculta dentro de Venezuela, a través de redes sociales envía mensajes que son interpretados por la ciudadanía como señales de que no se han cerrado todas las opciones para el cambio, como insiste el discurso oficial del chavismo.
"Estamos a un paso de ese cambio tan anhelado, un paso que aún debemos dar. Y por eso hoy les repito que estemos alertas, escuchen las señales, preparemos el corazón, la mente y el cuerpo para hacer lo que hay que hacer en el momento preciso de hacerlo", sostuvo Machado el pasado domingo a través de las redes sociales.
De acuerdo con estudios de opinión pública presentados la semana pasada por el Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello, hay consenso en la opinión pública de que Edmundo González Urrutia ganó la elección y dos tercios de los encuestados reconocen haberle dado sus votos.
Según estos estudios, del cual se omitió el nombre de la firma encuestadora por temor a represalias, los niveles de liderazgo de María Corina Machado y González Urrutia se mantienen hoy prácticamente intactos, mientras que ha subido la expectativa por el el 10 de enero.
Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos, sostuvo al ser consultado por DIARIO DE CUBA que hay un escenario político incierto, pese a los mensajes que han dado tanto González Urrutia como Maduro, cada uno dando por descontado que asumirá el 10 de enero.
"Tenemos en este momento abierta una caja de Pandora en la que muchas cosas pueden pasar. Eso ocurre justamente porque hay un resultado oficial que está sumamente cuestionado y que nadie acepta como cierto", puntualizó.
Para Alarcón, la crisis poselectoral venezolana solo tiene dos opciones: una transición democrática o un reforzamiento del autoritarismo.
Carmen Beatriz Fernández, experta en Comunicación Política y Crisis y profesora de la Universidad de Navarra (España), visualiza como posibilidad de que se generen otras situaciones entre los días finales de 2024 y los primeros de 2025.
"Maduro ha dicho, repetidamente, que él no piensa entregar el poder; entonces si uno se atiene a lo que él ha dicho, pareciera probable que efectivamente sería así. Pero podrían pasar muchas cosas. Y si bien el plan de Maduro es no entregar el poder, no puede descartarse que haya factores que le hagan cambiar de opinión, esto cabe dentro de lo posible", sostiene Fernández al ser consultada por DIARIO DE CUBA.
Prevé Fernández que si Maduro decide permanecer en la Presidencia, esta permanencia en el poder "se irá haciendo cada día más costosa", y en ese sentido el 10 de enero de 2025 "es un hito político, un momento clave", en la definición futura del propio régimen de Maduro.
"Si Nicolás Maduro asume para un nuevo periodo presidencial, a partir del 10 de enero comenzará un lapso de desconocimiento de la voluntad popular y de usurpación del poder", sintetiza la experta.
A juicio de Fernández, la opción de que González Urrutia pueda juramentarse pasaría, necesariamente, por el reconocimiento que haga eéste de la validez institucional de la Asamblea Nacional, ampliamente controlada por el chavismo tras las elecciones legislativas de 2020, cuando los factores de oposición optaron por no presentarse en dichos comicios.
Y esto, que de facto implicaría una negociación entre actores del chavismo y de la oposición, debería ocurrir antes del 10 de enero. Sin embargo, no hay señales —al menos públicas— de que se hayan producido acercamientos políticos de este tenor.
Mientras se acerca la fecha, las redes sociales en Venezuela son un hervidero de opiniones, pronósticos y desinformación, especialmente. Este fin de semana, por ejemplo, circularon dos mentiras con amplia repercusión que fueron verificadas y desmentidas por el Observatorio Venezolano de Fake News.
Una sostenía que todo el espacio aéreo de Venezuela estaría cerrado a partir del 20 de enero y por un periodo de tres semanas. El otro bulo daba cuenta de un supuesto acuerdo entre EEUU y Trinidad y Tobago para el envío de tropas norteamericanas al país caribeño, "en caso de un conflicto con Venezuela".
En sus mensajes en redes, la líder opositora María Corina Machado, si bien destaca el papel de la comunidad internacional en una eventual democratización de Venezuela, insiste en que será el liderazgo y la ciudadanía, dentro del país, los que eventualmente podrán generar un cambio político.
Vaya manera de empezar el 2025, repartiendo palos entre la población y posiblemente una ejecución pública.