El Ministerio de Defensa de Rusia anunció el martes 6 de agosto el envío de refuerzos a la región fronteriza de Kursk, tras la incursión que lanzaron unidades mecanizadas del Ejército ucraniano, con apoyo aéreo, contra esa región, desde la que se han lanzado numerosos ataques hacia su territorio luego del inicio de la invasión.
Según reportes de Moscú citados por la agencia AFP, unos 300 soldados enemigos atacaron al amanecer las posiciones de las unidades de la guardia fronteriza rusa apoyados por 11 tanques y más de una veintena de vehículos blindados.
De acuerdo la nota, las tropas rusas emplazadas en la frontera y las unidades del Servicio Federal de Seguridad (FSB) repelieron el ataque, tras lo que la aviación de asalto golpeó a las fuerzas atacantes. Como resultado, las tropas ucranianas perdieron seis tanques, una decena de blindados y otros vehículos militares, aseguraron.
Añadió la comunicación que después del ataque las fuerzas rusas continúan hostigando los restos de los grupos de sabotaje ucranianos, que se habrían replegado a Ucrania.
El ataque fronterizo coincidió con el ultimátum que Rusia presentó a Ucrania para que acepte las condiciones que le impuso en junio Vladímir Putin, que incluyen el repliegue de sus fuerzas de las cuatro regiones ocupadas y anexionadas por Moscú y la renuncia a los planes de Kiev de ingresar en la OTAN.
Pese a los informes tranquilizadores de los militares del Kremlin, el medio independiente ruso The Moscow Times indicó que blogueros a favor de la invasión informaron el miércoles que al menos 11 aldeas en Kursk fueron capturadas y que "las tropas enemigas regulares están presentes hasta 15 kilómetros de profundidad... y de diez a 11 kilómetros de ancho".
El Ministerio de Defensa de Moscú no confirmó estos informes y se limitó a decir el miércoles 7 de agosto que "la operación" contra las fuerzas ucranianas en Kursk estaba "en curso".
Según los informes, las fuerzas ucranianas capturaron la estación de medición de gas de Sudzha, que se utiliza como tránsito de gas hacia Europa a través de Ucrania, informó el canal de Telegram probélico Rybar.
La situación en Sudzha es "muy tensa", dijo el alcalde de la ciudad a la agencia estatal de noticias RIA Novosti.
Ucrania no se ha atribuido la responsabilidad de la incursión, la más grave en meses. El asesor presidencial ucraniano, Mykhailo Podolyak, hizo alusión a los ataques sin mencionarlos específicamente, diciendo que Moscú había utilizado sus "regiones fronterizas con impunidad para ataques aéreos y de artillería masivos".
Si bien militantes armados de Ucrania han realizado múltiples incursiones en las regiones fronterizas de Rusia desde el año pasado, en represalia por la invasión a gran escala de Moscú contra Kiev, el último ataque parece de mayor escala y más preparado que los esfuerzos anteriores.
Las autoridades locales informaron de al menos cinco personas muertas y 24 heridas en el ataque. El gobernador regional dijo el miércoles que la situación estaba "bajo control", y agregó que Putin había sido informado y estaba "monitoreando personalmente" los eventos.
"Durante las últimas 24 horas, nuestra región ha resistido heroicamente los ataques de los nazis ucranianos. Todos los servicios de emergencia han sido puestos en alerta máxima", dijo el miércoles el gobernador de Kursk, Alexei Smirnov , repitiendo la afirmación sin respaldo del Kremlin de que el Gobierno de Kiev está controlado por neonazis.
Smirnov dijo el miércoles que las autoridades habían ayudado a "varios miles de personas" a evacuar. Sin embargo, un reportero de The Moscow Times vio a residentes de las zonas fronterizas de la región de Kursk acusando a los funcionarios de no hacer lo suficiente para ayudarlos.
"¿Por qué nuestro Estado permitió esto? Si no puedes proteger a tu gente, haz una evacuación. Como resultado, vuelve a haber víctimas", escribió Andrei Nezlobin, residente de Kursk, en la plataforma de redes sociales VKontakte.
La agencia estatal de noticias TASS informó el miércoles que se abrieron centros de donación de sangre en la capital de la región para "hospitales de la región fronteriza".
En una reunión con funcionarios del Gobierno, Putin calificó el ataque como una "provocación a gran escala", acusó a Kiev de disparar "indiscriminadamente" y ordenó al primer viceprimer ministro, Denis Manturov, que supervise la asistencia a los residentes en las áreas afectadas de "inmediato".
"Sabíamos que las Fuerzas Armadas ucranianas avanzarían hacia la región de Kursk (...) pero no se hizo nada en la cima [del mando ruso]", escribió la bloguera probélica Anastasia Kashevarova en Telegram.
El canal de Telegram a favor de la guerra Starshe Eddy criticó la preparación de las tropas fronterizas: "La gente en el frente sabía que el enemigo definitivamente intentaría dar un golpe como ese. Pero me parece que hay otras personas, tal vez incluso con uniformes militares... que estaban lejos del frente y no creían en tal cosa", dijo el canal a sus 600.000 suscriptores.
Según el conocido bloguero militar ruso Rybar, las tropas ucranianas se habrían fortificado en tres localidades de Kursk, en donde habrían entrado unos 400 hombres. Además, otros 2.000 soldados ucranianos estarían emplazados en la frontera.
Alexander Kots, corresponsal de guerra del tabloide ruso Komsomolskaya Pravda y que también dirige el popular canal de Telegram Kotsnews, subrayó que "la diferencia clave entre las batallas de hoy en la región de Kursk y las 'incursiones' anteriores es que se trata de una operación militar iniciada por Kiev en territorio ruso".
El anterior intento de incursión de las fuerzas ucranianas en la región de Kursk tuvo lugar en marzo pasado, cuando, según el FSB, fueron abatidos más de 100 soldados enemigos y destruidos seis tanques. En el pasado, estas incursiones fueron siempre reivindicadas por grupos armados integrados por voluntarios rusos leales a las autoridades de Kiev.
Esos ataques son "ucranianos" porque lo dicen los blogueros rusos y los centros de propaganda putinianos.
Los ataques a aldeas cercanas a Ucrania son efectuados por guerrilleros rusos de la Legión para Libertad de Rusia y del cuerpo de Voluntario Rusos ,los cuales por su carácter, volumen de fuego, preparación y zona territorial no son acciones de guerra dirigidas por militares profesionales ucranianos, porque no son zonas donde Ucrania tiene despliegues ni agrupaciones de tropas regulares y cuentan allí sólo con tropas de protección fronteriza. Por sus efectos y objetivos atacados (aldeas de zonas cercanas a la frontera) estás operaciones, tienen todas las características de ser acciones guerrilleras de los grupos que arriba mencioné y que son aprovechadas por la propaganda de Vladolf para hacer propaganda antiucraniana, cualquiera con dos dedos de frente sabe que Ucrania está ocupada en el frente de Guerra donde Rusia presiona, para desviar tropas del frente hacia aldeas.
¡Bravo, Ucrania vencerá!