El vocero de la Presidencia de Argentina, Manuel Adorni, dijo el martes 18 de junio que Buenos Aires "busca seguir el ejemplo de (el presidente Nayib) Bukele" en materia de seguridad, al referirse a la visita que la ministra de Seguridad del país, Patricia Bullrich, realiza a El Salvador.
"La ministra visitó el centro de confinamiento del terrorismo, la cárcel más grande del continente, donde están presos 40.000 terroristas bajo un fuerte régimen de excepción", describió Adorni, citado por CNN.
"La Argentina sigue, por supuesto, el ejemplo de Bukele, para erradicar el narcoterrorismo", afirmó.
Tanto el Gobierno argentino como el salvadoreño difundieron imágenes del recorrido de la ministra, al que no tuvo acceso la prensa.
La política de seguridad de Bukele ha sido criticada por organismos como Amnistía Internacional, que advirtió en un informe difundido en marzo que la aplicación del régimen de excepción en el país ha "institucionalizado" la violación de los derechos humanos.
El presidente Bukele ha defendido en reiteradas ocasiones su política de seguridad, pues afirma que redujo los niveles de violencia.
Por su lado, Bullrich felicitó mediante un video al mandatario salvadoreño por "devolverle la paz y la tranquilidad" a su país.
"Felicitaciones, Bukele, por este cambio, por haberle devuelto la paz y la tranquilidad a las familias salvadoreñas", señaló Bullrich en una breve grabación difundida por Bukele en su perfil de X.
En dos días de visita, Bullrich se trasladó a la megacárcel del Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) y se reunió con los jefes de la Policía y la Fiscalía general, a la espera de un encuentro con el mandatario salvadoreño.
En el video, la funcionaria dijo que "desde que Bukele está como presidente, esto ha cambiado de una manera impresionante, de ser uno de los países más inseguros del mundo a ser uno de los países más seguros del mundo".
"Eso se logra con cambios legislativos, con la voluntad de llevar a las fuerzas de seguridad a donde tienen que estar, y a la fuerza armada, y también con voluntad política", sostuvo Bullrich.
Milei visitó El Salvador el pasado 1 de junio, en el contexto de la toma de posesión de Bukele para un segundo mandato consecutivo, a pesar de estar prohibido en la Constitución.
La política de seguridad del Gobierno de Bukele, que cuenta con amplio respaldo popular, se ha centrado desde 2022 en la suspensión de garantías constitucionales y arrestos masivos de supuestos pandilleros mediante un régimen de excepción, recordó EFE.
Esta medida fue aprobada por el Congreso, a petición del Ejecutivo, en marzo de 2022, tras una escalada de asesinatos atribuidos a las maras que cobró la vida de más de 80 personas en tres días, pero que investigaciones periodísticas del medio salvadoreño El Faro aseguran que se dio tras la ruptura de un pacto entre las bandas y el Gobierno.
De hecho, Washington ha sancionado a funcionarios del Ejecutivo de Bukele, bajo acusaciones de coordinar reuniones con pandilleros.
El régimen de excepción en El Salvador ha dejado más de 80.000 detenciones y una cifra superior a las 6.000 denuncias de atropellos a los derechos humanos, entre ellas, por detenciones arbitrarias y torturas.
Las organizaciones humanitarias también han dado cuenta de más de 300 muertes de personas detenidas, la mayoría con signos de violencia.
Hay que "bukeleizar" toda América para acabar con las pandillas en todo el continente.