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Venezuela

La oposición tiene que decidirse con un acotado calendario electoral

El chavismo fijó las elecciones presidenciales haciéndolas coincidir con el nacimiento de Hugo Chávez, en un acotado calendario que coloca a la oposición ante un dilema.

Caracas
María Corina Machado.
María Corina Machado. Comando de Campaña

El chavismo ha dado una nueva demostración del control institucional. No solo fijó las elecciones presidenciales para el 28 de julio próximo, haciéndolas coincidir con los 70 años del nacimiento de Hugo Chávez, sino que ha fijado un acotado calendario que coloca a la oposición ante un dilema que deberá resolver de forma urgente, en torno a la candidatura de María Corina Machado.

La gran favorita para las elecciones presidenciales es, según todas las encuestas, la conservadora Machado, cuyo liderazgo se ratificó en octubre pasado en unas elecciones primarias autogestionadas por los factores de oposición. Desde entonces viene creciendo su popularidad, pese a estar inhabilitada, y esta medida de carácter administrativa le impedirá inscribir su candidatura, según voceros del chavismo.

Estudios de opinión a los cuales ha tenido acceso DIARIO DE CUBA en Caracas muestran una diferencia abismal entre Machado y Nicolás Maduro, quien busca permanecer en el poder hasta 2030. Si logra ser reelecto este año, el gobernante habrá emulado a su padrino político Hugo Chávez, quien estuvo 13 años en el poder tras asumir la presidencia el 2 de febrero de 1999 y hasta diciembre de 2012, cuando notablemente enfermo, traspasó el poder a Maduro.

En abril de 2013, siendo presidente interino, Maduro se midió en unas elecciones presidenciales ante Henrique Capriles. Este denunció irregularidades, pero sus denuncias no prosperaron y paulatinamente Maduro se consolidó en el poder. En 2018 se hicieron otras elecciones, pero a estas no concurrió la oposición prodemocracia, sino figuras de lo que analistas llaman "la oposición leal" al chavismo. Reelecto ampliamente, esas votaciones no fueron reconocidas por la comunidad internacional y Maduro atravesó varios años de ostracismo internacional, que recién se ha flexibilizado.

Así las cosas, para diversos observadores el propio chavismo tiene ante sí un dilema. Si organiza unas elecciones que no sean competitivas ni creíbles, se garantizaría el poder, pero volvería una ola de no reconocimiento internacional. Si abre la puerta para que Machado sea candidata, Maduro perdería las elecciones con una diferencia de 8-2 según varias encuestas y por tanto unas elecciones limpias y abiertas pondrían fin al régimen. Todo apunta a que se decantarán por la primera opción: mantenerse en el poder aún bajo el cuestionamiento de Occidente.

La oposición prodemocracia, que entretanto se ha reunificado en torno al liderazgo de María Corina Machado, está contrarreloj. El Consejo Nacional Electoral (CNE) ha fijado el lapso de inscripción de candidaturas entre el 21 y 25 de marzo, es decir en un plazo de dos semanas. El Tribunal Supremo de Justicia ha ratificado la inhabilitación de Machado con lo cual ha cerrado cualquier opción de que la medida sea revisada por el sistema de justicia.

"Ahí reside el dilema que debe enfrentar la oposición venezolana: o se embarca en una lucha inútil por la habilitación de María Corina Machado del mismo modo que durante la época de Juan Guaidó, que se embarcó en una lucha inútil por 'el fin de la usurpación', o busca una alternativa electoral dentro del marco de lo posible, lo que nunca, bajo un Gobierno como el de Maduro, será lo óptimo", resumió el quid del asunto el sociólogo chileno Fernando Mires, al ser consultado por DIARIO DE CUBA.

Mires, quien es profesor emérito de la Universidad de Oldenburg, Alemania, ha sido un permanente observador de la dinámica política venezolana por largos años, incluso con un par de libros sobre la lucha política prodemocracia.

Para Mires, el liderazgo actual de Machado va más allá de si es o no ella la candidata presidencial, y a su juicio la dirigente conservadora debe profundizar una lucha desde el campo democrático haciendo frente a un régimen que no juega bajo los principios de democracia y Estado de derecho.

"Maduro puede inhabilitar una candidatura, pero no puede hacerlo hasta el infinito. La inteligencia política, así ha sido demostrado en diversos países, no consiste en jugar según las reglas del adversario, aunque tampoco ignorarlas. Pero sí, volverlas en su contra", apunta el sociólogo, quien sugiere el camino de que Machado designe una candidatura alternativa y trabaje de lleno en derrotar a Maduro así ella no compita en las elecciones presidenciales de este año.

Por su parte, el venezolano Ángel Álvarez, quien fue director del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad Central de Venezuela, cree que las elecciones de este 2024 podrían ser decisivas para una transición democrática en Venezuela si se entienden no como el punto de llegada.

El escenario de un fraude masivo, como el que tendría que hacer el chavismo para que Maduro gane, según muestran las encuestas hoy, podría abrir otras dimensiones de la lucha por la democracia en Venezuela, y en todas ellas Machado podría estar encabezando las acciones, dada la alta legitimidad con la que cuenta.

Machado ha sido hermética. Ni ella ni la dirigencia nucleada en la Plataforma Unitaria de oposición han asomado cuál es la estrategia que van a seguir. Si se irá a una lógica de protestas en las calles para insistir en la inscripción de Machado como candidata o si ella designa a una persona de su entorno, en consenso con los otros actores políticos, para que se inscriba como su representante en estas elecciones.

En dos semanas se dilucidará este asunto. Entretanto, periodistas políticos sostienen que, al contrario de otras ocasiones, en las cuales decisiones como el anuncio de las elecciones, parecían tomar por sorpresa a la dirigencia opositora, en esta oportunidad nadie pareció sorprendido y la propia Machado ha continuado con su agenda de visitas a diversos lugares del país, haciendo campaña electoral.

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3 comentarios

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Ante la prepotencia de la dictadura chavista , a la oposición no le queda más que dos opciones, botarse a las calles como en 2019, donde estuvieron cerca de sacarlos del poder o aunque menos efectiva, si las elecciones tendrán algo de observación internacional es votar por Machado y que la mayoría de boletas anuladas hable por sí solo. La primera indudablemente es más efectiva aunque más peligrosa y costaría muchas vidas, la segunda al menos serviría para demostrar al mundo y los oprobiosos gobiernos que lo apoyan el verdadero sentimiento del pueblo venezolano y lo despótico y tirano que son quienes gobiernan.

Ante la prepotencia de la dictadura chavista , a la oposición no le queda más que dos opciones, botarse a las calles como en 2019, donde estuvieron cerca de sacarlos del poder o aunque menos efectiva, si las elecciones tendrán algo de observación internacional es votar por Machado y que la mayoría de boletas anuladas hable por sí solo. La primera indudablemente es más efectiva aunque más peligrosa y costaría muchas vidas, la segunda al menos serviría para demostrar al mundo y los oprobiosos gobiernos que lo apoyan el verdadero sentimiento del pueblo venezolano y lo despótico y tirano que son quienes gobiernan.

Profile picture for user Don Carlitos

Ojalá me equivoque y reciba millones de críticas por lo que voy a afirmar pero la realidad, a mi criterio, es que el castrochavismo hoy en día se siente más fuerte que nunca gracias a la pésima, improvisada y totalmente errónea política exterior de USA y el casi consolidado respaldo de Rusia, China e Irán, además del incondicional apoyo de AMLO, Lula, Petro, Boric, Ortega, Mrs. Zelaya, Pedro Sánchez, Podemos, el pseudo Papa, Borrell, Correa Samper y Evo entre otros.
Si Maduro hace elecciones, no van a ser ni libres ni abiertas ni democráticas, y las va a manipular tal y como se hacen en Cuba de tal manera que las va a ganar ampliamente, así de seguro estoy. Repito, ojalá me equivoque, pero al final, no le va a suceder nada y va a seguir aferrado al poder.