El escándalo de corrupción en torno al hijo mayor del presidente de Colombia, Gustavo Petro, escaló el sábado cuando la Fiscalía procedió a su detención. Nicolás Petro es investigado por los presuntos delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, después de que su exesposa Daysuris Vásquez, también bajo arresto, destapara el caso. Vásquez acusó a Petro hijo a comienzos de recibir de un narcotraficante una alta suma de dinero para la campaña de su padre, y de quedarse con ese dinero.
El escándalo ha salpicado a al menos 17 personas, entre políticos, financistas oscuros y funcionarios del Gobierno colombiano, según publicó La Silla Vacía.
Entre los implicados cercanos a Petro está Alfonso Prada, quien fue ministro del Interior del Gobierno de Gustavo Petro. Es santista y fue el jefe de debate de Petro en la campaña presidencial. Quedó como el rostro visible de los ministros que le entregaron puestos al hijo del presidente.
Otro salpicado es Jorge Londoño, director nacional del Sena (la entidad de formación para el trabajo del Estado colombiano), quien fue senador de la Alianza Verde y es cuota de ese partido en el Gobierno de Gustavo Petro.
Según La Silla Vacía, Londoño "es otro de los rostros visibles de los altos funcionarios que le entregaron puestos al hijo del presidente", un asunto que golpea su imagen personal y la de su partido Alianza Verde, que tiene la lucha contra el clientelismo entre sus banderas.
Por otra parte, está Roosvelt Rodríguez, Superintendente de Notariado y Registro, quien fue senador del Partido de La U. Ahora aparece salpicado como "responsable de la entidad en la que Nicolás Petro buscaba puestos".
Daysuris Vásquez también dijo que Nicolás Petro se reunió con casi todos los ministros y con otros varios altos funcionarios. Sin embargo, de la mayoría de estos encuentros no da detalles de lo que sucedió ni si llegaron a acuerdos políticos.
Estas reuniones se dieron con la exministra de Minas, Irene Vélez; la exministra de Salud, Carolina Corcho; el exsecretario general, Mauricio Lizcano; la directora del Departamento de Prosperidad Social (DPS), Cielo Rusinque; y el exministro de Educación Alejandro Gaviria.
Varios de ellos ya han aclarado que sí se reunieron con Nicolás Petro, pero que no hubo acuerdos burocráticos ni políticos. Tampoco hay indicios de que eso haya sucedido, señaló el medio.
Por último, está salpicado en la trama Miguel Ángel del Río, un abogado petrista que ha sido defensor de causas mediáticas. En Barranquilla se había movido políticamente con Nicolás Petro y su entorno, que lo invitó a ser candidato a la Alcaldía de Barranquilla del petrismo, algo de lo que él desistió.
En junio, una persona cercana al fallecido teniente coronel de la Policía de Colombia Óscar Dávila, que trabajaba en la Seguridad de la Presidencia y que habría querido declarar en el caso de la presunta financiación ilegal de la campaña del presidente Gustavo Petro, dijo que el mandatario escondía "cinco maletas y 3.000 millones de pesos [720.000 dólares]" en la casa de su exjefa de gabinete, Laura Sarabia.
Dávila estaba siendo investigado en un escándalo de escuchas ilegales que derivó en la salida del Gobierno de Sarabia, mano derecha del mandatario, y del entonces embajador en Venezuela, Armando Benedetti, un escándalo que condujo al Gobierno a su peor crisis política hasta la fecha.
Que no se quejen, que aplaudan con las orejas y que disfruten lo votado.
Bueno va en camino de convertirse en otra Venezuela a no se que los Uribistas se llenen de c.... y los saquen a patadas por el trasero.