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Haití

Haití anda a la deriva: 70 muertos por guerra entre bandas en una semana

El presidente de República Dominicana solicitó de nuevo una intervención humanitaria internacional encabezada por EEUU.

Brasilia
Ariel Henry, autoproclamado mandatario de Haití.
Ariel Henry, autoproclamado mandatario de Haití. Reuters

Entre el 14 y 19 de abril, Haití presenció un recrudecimiento de la violencia armada, protagonizada por bandas criminales en este país caribeño que luce literalmente a la deriva. En esos cinco días fueron asesinadas 70 personas y otras 40 resultaron con heridas de armas de fuego, según la representación de la Organización de Naciones Unidas en Puerto Príncipe.

En los meses transcurridos de este 2023 más de 700 personas han sido asesinadas. Las bandas criminales actúan a sus anchas en diversos puntos del país caribeño, como es el caso de Cité Soleil, el más poblado y más empobrecido barrio de la capital haitiana. Pero se extiende más allá y afecta no solo a los más pobres. En esos días cruentos de la semana pasada, por ejemplo, fue asesinado a tiros Dumesky Kersaint, de 30 años, y periodista de Radio Télé Inurep.

La deriva institucional, que se agudizó con el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021, ha tenido como telón de fondo la prácticamente desaparición de los cuerpos estatales de seguridad, junto al fortalecimiento de los grupos delictivos.

La ausencia de órganos de seguridad ha permitido que sucedan enfrentamientos armados abiertos entre bandas o la proliferación de casos de secuestros, con los cuales estas bandas criminales se financian.

La Sociedad Interamericana de Prensa ha denunciado que entre enero y mediados de abril tres comunicadores fueron secuestrados y luego puestos en libertad tras el pago de rescates: Lebrun Saint-Hubert, presidente y director general de la radio comunitaria 2000; Jean Thony Lorthé, presentador del programa "Rafrechi Memwa", emitido por Radio Vision 2000; y Sandra Duvivier, reconocida periodista del área cultural, camarógrafa e integrante del staff de Telemax, Canal 5 de TV.

De acuerdo con el Comité Internacional de la Cruz Roja, alrededor de tres millones de haitianos (de una población total en el país de 11 millones) están siendo afectados de forma directa en su vida cotidiana por la expansión de la violencia armada. Padecen falta de acceso a servicios básicos de salud, restricciones de movimiento y la imposibilidad de acceder a servicios esenciales, incluso educación.

A juicio de la peruana Marisela Silva, directora del Comité de la Cruz Roja para Panamá y el Caribe, la violencia que viene in crescendo en Haití agudiza la preexistente crisis humanitaria, motivada por la endémica pobreza del país caribeño. En situaciones de enfrentamientos armados o en presencia de secuestros, se inhibe la actuación de las agencias humanitarias internacionales por el riesgo que esta situación representa para su personal.

El Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) estima que más del 60% de la población es pobre y un 45% sufre inseguridad alimentaria aguda, por lo que se necesita la cooperación internacional humanitaria, casi de forma permanente.

El mes pasado, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito publicó su más reciente informe sobre la situación de seguridad en Haití y concluye que una de las principales causas de la violencia de pandillas en el país es el tráfico ilegal de armas, provenientes en su mayoría de EEUU.

El caso del asesinato del presidente Moïse, planificado en el estado de Florida (EEUU) y el acceso a armas de fuego por parte del comando que luego ingresó a Haití, puso al desnudo la inexistencia de controles para el ingreso a territorio haitiano.

Ante este escenario, a mediados de este mes el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, insistió nuevamente en solicitar una intervención humanitaria internacional que, encabezada por EEUU, no solo atienda la emergencia social, sino que contribuya a reestablecer las instituciones y ayude a organizar unas elecciones presidenciales y legislativas.

Tras unos años de cierta estabilidad durante el Gobierno de Michel Martelly, la crisis institucional se hizo evidente a partir de 2015. El triunfo de Moïse no fue reconocido de inmediato y se dio una larga discusión entre los poderes públicos sobre cuándo debía concluir su mandato. El Parlamento sostenía que en 2020 y el presidente que en 2021.

En el ínterin se fueron postergando las elecciones legislativas, en medio de la pandemia de Covid-19. El país se quedó sin Parlamento y se disolvió asimismo el Poder Judicial, quedando Moïse como único referente de poder, hasta que fue asesinado. Las elecciones previstas se suspendieron y gobierna un primer ministro, Ariel Henry, literalmente autoproclamado dada la ausencia de otros poderes públicos que lo certifiquen. Henry además suspendió hace un año a los integrantes del poder electoral.

Reunido en Santo Domingo con la subsecretaria de Estado de EEUU, Wendy Sherman, Abinader insistió en lo que viene siendo su propuesta: la comunidad internacional —con EEUU a la cabeza— debe intervenir en Haití para "recuperar la paz y el orden".

Haití y República Dominicana comparten el mismo territorio, de la isla La Española, y con frecuencia las autoridades dominicanas se quejan por el peso excesivo que representa para sus servicios de salud o programas de alimentación, no solo apoyar a sus ciudadanos sino también brindarle atención a la población haitiana que huye de la crisis en su propio país.

La deriva que vive largamente Haití, pero que se ha agudizado en los últimos dos años ante la mirada impasible de la comunidad internacional, deja en evidencia que este país caribeño no es prioridad para los principales actores de peso en el hemisferio occidental, como son EEUU y Canadá.

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2 comentarios

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Ya Canada y Estados Unidos intentaron hace años arreglar el potaje y lo único que lograron fueron críticas y acusaciones. Asi pues, que se cocinen en su propia salsa.

...la comunidad haitiana en Florida no interesa para las elecciones y para acabar de cagarla alli no hay una dictadura comunista...que se jodan entonces...a nadie le interesa lo que pase por alli...