El ex presidente de Bolivia Evo Morales salió en defensa de una Copa Sub-17 de fútbol que lleva su nombre y se jugará en el Trópico de Cochabamba, tras críticas provenientes de la oposición política.
A través de su cuenta de Twitter, Morales denunció "discriminación".
"La derecha boliviana, eterna perdedora de elecciones, cuestiona las actividades deportivas internacionales promovidas desde el Trópico como la Copa Evo Sub-17, bautizada así por la región, por organizadores de ella. Gracias a Carlos Mesa y diputados por la publicidad gratuita", escribió el ex mandatario en Twitter.
En palabras de Morales, "es tal la discriminación y odio de la derecha señorial que no soporta que una Copa de Fútbol lleve el nombre del primer indígena presidente de Bolivia y prefiere perjudicar al país y olvidar que el deporte no tiene color político; integra a derecha, izquierda y centro."
Según publicó el sitio Infobae, "la oposición ha decidido llamar 'narco-copa' a esta competencia que se realizaría del 31 de julio al 7 de agosto en el territorio cocalero de Chapare".
El politólogo y consultor Luis Eduardo Siles respondió a Evo Morales en la propia red social: "El sistema y la gente que Evo Morales insulta a diario le permitieron ser elegido en 2005 y él se abocó a destruirlos a ambos. Hoy dice que les molesta que una copa lleve su nombre, no señor, les molesta su vinculación con el narco, la coca para cocaína, la pedofilia, el estupro y el crimen".
Según el ex presidente, en el evento deportivo está asegurada la participación de equipos masculinos y femeninos de Boca Juniors y River Plate de Buenos Aires y Universidad Católica de Chile, pero no han respondido otros clubes que habían sido invitados.
El debate se produce cuando la fama de Bolivia de ser un centro regional del narcotráfico ha crecido mucho, según lo refleja incluso la JIFE (Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes). Además, un informe divulgado la semana pasada dijo que organizaciones internacionales, como la Operación Turf y A Ultranza PY, dejaron en evidencia grandes redes transatlánticas de tráfico de cocaína, con redes de suministro a través de Bolivia.
Esos informes apuntan que las rutas de la droga que usan territorio boliviano llegan hasta África y Europa a través de puntos clave en Argentina y Brasil. Y todos señalan que el centro de mayor producción de la droga en Bolivia es Chapare, justamente el lugar donde debería realizarse el torneo que quiere Evo.
Según Infobae, la Federación Boliviana de Fútbol ha recibido el pedido formal de la oposición política para que no autorice la Copa Evo, por lo menos mientras no se aclaren las acusaciones que pesan sobre el ex presidente de conexiones con el narcotráfico.
Muy cerca de los lugares donde se realizaría el torneo, el Gobierno de Luis Arce desmanteló la semana pasada una fábrica de cocaína y hasta ahora ha capturado 155 avionetas dedicadas al tráfico de drogas desde y hacia países vecinos.
Las encuestas oficiales muestran que el cocalero Morales está en cuarto lugar en las preferencias de los militantes del MAS, lo que descartaría toda posibilidad de que sea designado candidato para las elecciones de 2025.
Ni que fuera Maradona, el muy atorrante. Pero, parece que hay bastantes bolivianos de su índole.