El chavismo, no dado a fijar plazos para sus obras o proyectos, anunció a mediados de marzo que al concluir abril de 2022 estaría solventada la crisis eléctrica en el occidente de Venezuela. Luego, al avanzar el mes de mayo, quedó en evidencia el incumplimiento, ya que una ola de apagones prosigue en una decena de estados (provincias) venezolanos.
Al cerrar abril no hubo ningún aviso oficial sobre cuándo concluirá finalmente esta nueva etapa en una crisis eléctrica estructural; tampoco hay información de inversión oficial para recuperar la producción de energía en una Venezuela que en 1998, antes de que el chavismo llegará al poder, era vista como modelo en generación y distribución de electricidad por el resto de países de América Latina.
Para no pocos expertos en la materia, sigue resultando llamativo que el ministro de Energía Eléctrica y presidente de la empresa estatal Corpoelec sea Néstor Reverol, tristemente recordado por haber sido ministro del Interior y comandante de la Guardia Nacional durante los dos picos más crudos de represión desde que Nicolás Maduro gobierna Venezuela, en 2014 y 2017.
Reverol ha sido señalado directamente en los informes de la Misión de Verificación de los Hechos de la ONU, por su papel en los crímenes de lesa humanidad, para los cuales la Corte Penal Internacional (CPI) establecerá responsabilidades en un lapso aún por definir. Sin experticia en el ramo eléctrico o energético, analistas políticos consideran que Reverol fue apartado del manejo de la seguridad como sanción interna, pero recibió un premio de consolación al permanecer dentro del gabinete de ministros.
"Desde marzo de 2022, en los estados del occidente del país se han registrado continuos cortes eléctricos de hasta nueve horas diarias. Zulia, Táchira, Mérida, Trujillo, Barinas, Portuguesa, Apure y Lara han sido los estados (provincias) más afectados durante esta nueva ola de apagones", explica a DIARIO DE CUBA el periodista Alfredo Álvarez desde la ciudad de Barquisimeto, capital del estado Lara.
Una campaña en redes sociales lanzada por la ONG Caleidoscopio Humano, este 9 de mayo, permitió verificar denuncias de usuarios. Por ejemplo, en zonas rurales del estado Táchira, fronterizo con Colombia, padecen apagones de hasta 16 horas continuas, varios días a la semana.
"A mediados del 2021, cuando era candidato a gobernador del Táchira, el ahora gobernante regional Freddy Bernal anunció que se acabarían los apagones en la entidad, pero en este 2022 en realidad los cortes eléctricos se han agudizado", denuncia la periodista Yelimar Malaver Añez.
Fernando García, desde Maracaibo, capital de Zulia, confirma que varias zonas de esta otrora metrópoli petrolera padecen apagones de ocho horas al día divididos en dos cortes de cuatro horas cada uno. En general, los apagones ocurren sin anuncio previo. En las varias ocasiones, en este 2022, que Corpoelec ha dado por adelantado el cronograma de cortes, por lo general es incumplido.
Venezuela arrastra problemas con el servicio eléctrico desde 2007, con Hugo Chávez en el poder. La problemática se agravó tras la llegada de Nicolás Maduro, y tuvo su clímax en marzo de 2019, cuando se produjeron dos mega apagones a nivel nacional, que dejaron a oscuras hasta por 10 días a varios estados del país, incluidos sectores de la capital, Caracas.
En aquel entonces, la causa de los apagones fue una falla en la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar, ubicada en el estado Bolívar, al sur de Venezuela, que suministra el 60% de la energía eléctrica del país, lo suficiente para afectar el servicio en los 23 estados. El gobierno de Maduro esgrimió la tesis del sabotaje.
De fondo está el tema de la corrupción. Entre 2009 y 2010 se destinaron unos 2.500 millones de dólares para importar plantas eléctricas que sirvieran de respaldo en las grandes ciudades. Estos contratos se adjudicaron a dedo en momentos en que gobernaba Chávez. Trabajos de investigación de portales como El Pitazo o Armando.Info han determinado que buena parte de estos recursos terminaron en cuentas bancarias de paraísos fiscales.
De acuerdo con expertos, en su mayoría ex trabajadores de Corpoelec, las instalaciones eléctricas de Venezuela presentan deterioro, particularmente las centrales termoeléctricas que otrora conformaban el sistema de respaldo en temporadas de sequía o en caso de una avería en la hidroeléctrica principal.
El ingeniero Winston Cabas, presidente de la Asociación Venezolana de Ingenieros Eléctricos, ha asegurado que en este 2022 el sistema eléctrico venezolano presenta las mismas fallas que conllevaron al mega apagón nacional de tres años atrás.
La periodista Lorena Arráiz, desde San Cristóbal, capital de Táchira, explica a DIARIO DE CUBA que la ola de apagones ha terminado por impactar también las dinámicas informativas de la sociedad. A su juicio, los apagones conllevan una censura en la radio y la televisión local, y también en los portales digitales, dado que todos estos medios requieren de electricidad para estar al aire y el público también necesita el servicio eléctrico para poder conectarse.
Los cortes de electricidad prácticamente duplicaron en abril el registro observado en marzo, según el Comité de Afectados por Apagones, un ente independiente que registra los cortes de luz y sus efectos en la población ante la falta de cifras oficiales. En abril hubo 11.138 interrupciones, mientras que en marzo se contabilizaron 6.855 fallas.
Eso es lo que genera el socialismo, hambre,escases,apagones.Preparense colombianos ,ustedes son los próximos en integrar la lista....