El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló esta noche con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, y le prometió que trabajará por conseguir la condena internacional contra el ataque de Rusia, además de "severas sanciones" contra Moscú por esta intervención militar, informó EFE.
En un comunicado, Biden hizo pública esta llamada, en la que según dijo Zelensky, le pidió que llame a los demás líderes mundiales para que se pronuncien "claramente" contra el presidente ruso, Vladimir Putin, y su "flagrante agresión" a Ucrania y permanezcan al lado del pueblo ucraniano.
Por otra parte, el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, informó esta noche de su conversación con el secretario de Estado de la OTAN, Jens Stoltenberg, para discutir la "respuesta coordinada" de la alianza contra Rusia.
"Estamos unidos en la respuesta a Rusia y el refuerzo en el flanco este de la OTAN", apuntó Blinken.
En su conversación con Zelensky, Biden informó al presidente ucraniano de los "pasos" a dar para conseguir esa condena internacional, empezando por Naciones Unidas, así como para aprobar nuevas y mayores sanciones contra Rusia.
También la Unión Europea (UE) condenó el "injustificado" ataque ruso contra Ucrania, expresó su temor por los civiles y aseguró que hará que el Kremlin "rinda cuentas" por ello.
"Condenamos enérgicamente el ataque injustificado de Rusia a Ucrania", indicaron en sendos mensajes en sus cuentas oficiales de Twitter los presidentes de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y del Consejo Europeo, Charles Michel.
En el mensaje, que también publicó en su perfil el alto representante comunitario para la Política Exterior, Josep Borrell, en la misma red social, dijeron que "en estas horas oscuras, nuestros pensamientos están con Ucrania y las mujeres, hombres y niños inocentes que enfrentan este ataque no provocado y temen por sus vidas".
Von der Leyen se reunirá hoy con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y juntos ofrecerán a continuación una declaración a la prensa a las 9.30 GMT.
Stoltenberg también condenó hoy en un comunicado el ataque "no provocado" de Rusia contra Ucrania que "pone en peligro innumerables vidas civiles".
Los primeros paquetes de sanciones aprobados por la UE, Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido contra Rusia por haber reconocido la independencia de las repúblicas separatistas ucranianas de Donetsk y Lugansk comenzaron a aplicarse el miércoles, aunque el Gobierno de Kiev ha pedido a Occidente aumentar la presión en todos los ámbitos, incluidos el militar y el diplomático.
Las sanciones aprobadas por la UE incluyen la prohibición de que altos cargos rusos viajen a territorio europeo, limitan el acceso por parte de Moscú a los mercados financieros europeos y contienen un embargo comercial a las regiones separatistas.
El primer ministro británico, Boris Johnson, aseguró que "Occidente no se quedará a la espera" mientras Rusia ataca Ucrania, en una conversación con el presidente de este país, Volovímir Zelenski, tras el inicio de la ofensiva rusa.
Su homólogo italiano, Mario Draghi, también condenó en nombre de su Gobierno el ataque de Rusia a Ucrania lanzado esta madrugada y lo tachó de "injustificado e injustificable".
El canciller alemán, Olaf Scholz, le expresó al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski la "plena solidaridad" de Alemania en una conversación telefónica, informó el portavoz del Gobierno germano, Steffen Hebestreit.
"El canciller Olaf Scholz acaba de hablar por teléfono con el presidente Volodímir Zelenski y la ha expresado la plena solidaridad de Alemania en esta hora difícil", dijo Hebestreit a través de su cuenta de Twitter.
Scholz, también a través de Twitter, calificó el ataque de Rusia a Ucrania de flagrante violación del derecho internacional.
"El ataque de Rusia a Ucrania es una violación flagrante del derecho internacional. No tiene justificación alguna. Alemania condena este acto es los términos más severos. Nuestra solidaridad con Ucrania y su pueblo", dijo Scholz.
Asimismo, el canciller afirmó que Rusia debe parar el ataque de manera inmediata y que la UE y la OTAN coordinarán las reacciones a lo ocurrido. "Es un día terrible para Ucrania y un día oscuro para Europa", subrayó.
El ministro holandés de Exteriores, Wopke Hoekstra, advirtió este jueves, en una “fuerte condena” a la ofensiva rusa a Ucrania, que Moscú “pagará un alto precio” por lo que calificó de un “acto de guerra” contra Kiev.
El Gobierno de Holanda reunió de inmediato a sus ministros para una “consulta de emergencia” en La Haya sobre la ofensiva rusa y se espera que después el primer ministro, Mark Rutte, haga una declaración sobre las medidas que tomará Países Bajos en reacción a lo ocurrido esta madrugada en Ucrania.
“Países Bajos condena enérgicamente el ataque ruso a Ucrania. Estamos en estrecho contacto con la Unión Europea (UE), la OTAN y otros aliados. Nuestros pensamientos están ahora con el pueblo ucraniano”, escribió Rutte en un breve tuit esta mañana, antes de la reunión.
Suecia, Finlandia, Dinamarca y Noruega condenaron el ataque ruso de esta madrugada a Ucrania, que calificaron de violación del derecho internacional, y reclamaron una reacción firme.
"Suecia condena en los términos más firmes la invasión rusa de Ucrania. Los actos de Rusia son también un ataque al orden de seguridad europeo. Se le hará frente con una respuesta unida y contundente en solidaridad con Ucrania", señaló en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores de Suecia.
En un mensaje en su cuenta oficial en la red social Twitter, la primera ministra finlandesa, Sanna Marin, condenó también con firmeza el ataque, que considera una "grave ruptura" de las leyes internacionales y amenaza la vida de muchos civiles.
"Finlandia expresa su respaldo sólido a Ucrania y los ucranianos, estamos buscando formas de aumentar nuestro apoyo", afirmó Marin.
Su homólogo noruego, Jonas Gahr Støre, calificó también la operación militar iniciada en el este y sur de Ucrania de una "grave violación" y atribuyó toda la responsabilidad a Rusia "por lanzar a Europa en esta oscura situación".
"Rusia debe parar inmediatamente sus operaciones militares y respetar la soberanía y la integridad territorial de Ucrania", escribió en un comunicado.
La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, se expresó en términos similares, condenando un acto "terrible y sin provocación", que considera que viola los pactos y el derecho internacional.
"Debe tener consecuencias importantes para Rusia. La Unión Europea y la OTAN se reunirán dentro de poco tiempo para tratarlo", escribió Frederiksen.
El primer ministro de Japón, Fumio Kishida, condenó hoy la "invasión" rusa de Ucrania, acusó a Moscú de "usar la fuerza" para cambiar el orden establecido y anunció que su Gobierno responderá a esta acción con "medidas coordinadas" con la comunidad internacional.
"Esta invasión por parte de Rusia sacude las bases del orden internacional, que no permite alterar el 'statu quo' de forma unilateral y por la fuerza", dijo Kishida tras presidir una reunión del Consejo Nacional de Seguridad convocada después de conocerse el inicio de la intervención militar de Moscú en su país vecino.
Tokio "tomará medidas en colaboración con Estados Unidos y con la comunidad internacional", añadió en declaraciones a la prensa Kishida, quien ya había anunciado este miércoles una nueva ronda de sanciones contra Rusia.
ES UNA VERGUENZA que el Presidente de la primera potencia militar y economica del mundo le diga al jefe de Estado ucraniano que va a trabajar para "conseguir" una condena internacional contra Rusia.
Es como si cuando Hitler invadio Polonia se hubiera hecho lo mismo.
Si, mandrila96, se hizo lo mismo. Ha oído hablar de la « drôle de guerre » ?
Tu eres militar? Tu estás en Ucrania?. Ya los tiempos no son los mismos. EEUU nada tiene que hacer ahí. Los militares americanos no tienen que morir en una guerra que no nos afecta. Han administrado en EEUU varias administraciones democ-RATAS y de republic-ANOS y los rusos y chinos han ido creciendo y nada ha pasado.
El Instituto Kiel, un grupo de expertos alemán, dice que detener las exportaciones de gas reduciría en un 3 % el PIB ruso, mientras que poner fin a las exportaciones de petróleo daría como resultado un impacto del 1,2 %. Si bien los países occidentales podrían obtener su energía en otros lugares, una reducción en el suministro conduciría inevitablemente a un aumento de los precios del petróleo y el gas.