Miles de intelectuales rusos exigen a Putin cesar la retórica belicista y evitar la guerra con Ucrania

Más de 80 personalidades y ciudadanos de Rusia, incluyendo varios artistas, profesores universitarios, activistas de derechos humanos, escritores, científicos y políticos, hicieron pública una carta abierta el liderazgo de su país para exigirle que pare la retórica guerrerista contra Ucrania y evite un conflicto con Occidente.

Bajo la denominación de Congreso de Intelectuales Rusos, el colectivo se dirigió al Ministerio de Relaciones Exteriores para denunciar que "hay un flujo cada vez mayor de noticias alarmantes sobre una posible invasión rusa de Ucrania. Están surgiendo informes sobre el aumento del reclutamiento de mercenarios dentro de Rusia y la transferencia de combustible y equipo militar a las regiones de Donetsk y Lugansk en Ucrania. En respuesta, Ucrania se está armando y la OTAN está enviando fuerzas adicionales a Europa del Este. La tensión no está disminuyendo, sino aumentando".

"Los ciudadanos rusos se están convirtiendo en rehenes de facto de un aventurerismo imprudente que ha llegado a tipificar la política exterior de Rusia. Los rusos no solo deben vivir con la incertidumbre de si comenzará una guerra a gran escala, sino que también están experimentando un fuerte aumento de los precios y una devaluación de su moneda. ¿Es este el tipo de política que necesitan los rusos? ¿Quieren la guerra y están listos para soportar la peor parte? ¿Han autorizado a las autoridades a jugar así con sus vidas?", prosigue la misiva.

"Pero nadie pregunta a los ciudadanos rusos su opinión. No hay debate público. La televisión estatal presenta un único punto de vista: el de los belicistas. Las amenazas militares directas, la agresión y el odio están dirigidos a Ucrania, Estados Unidos y Occidente. Pero lo más peligroso es que la guerra se presenta no solo como permisible, sino como inevitable. Este es un intento de engañar a la población, de imponerle la idea de hacer una cruzada contra Occidente, en lugar de invertir en el desarrollo del país y mejorar el nivel de vida. El costo del conflicto nunca se discute, pero el precio, el enorme y sangriento precio, lo pagará el pueblo ruso común".

"Nosotros, ciudadanos responsables y patriotas de Rusia, apelamos a los líderes políticos de Rusia. Llamamos abierta y públicamente al Partido de la Guerra que se ha formado dentro del Gobierno. Representamos el punto de vista de aquellos en la sociedad rusa que rechazan la guerra, que consideran ilegal el uso de amenazas militares y el despliegue de un estilo de chantaje en la política exterior", subrayan.

"Rechazamos la guerra, mientras que ustedes, el Partido de la Guerra, la consideran aceptable. Defendemos la paz y la prosperidad para todos los ciudadanos rusos, mientras que ustedes arriesgan nuestras vidas por el bien de los juegos políticos. Engañan y manipulan a la gente, mientras que nosotros les decimos la verdad. Ustedes no hablan en nombre de la población rusa, nosotros lo hacemos. Durante décadas, el pueblo ruso, que perdió millones de vidas en guerras pasadas, ha vivido según el dicho: 'si tan solo no hubiera guerra'. ¿Han olvidado esto?"

"Nuestra posición es bastante simple. Rusia no necesita una guerra con Ucrania y Occidente. Nadie nos amenaza, nadie nos ataca. Las políticas basadas en la idea de tal guerra son inmorales e irresponsables y no deben llevarse a cabo en nombre del pueblo ruso. Tal guerra carece de legitimidad y no tiene base moral. La diplomacia rusa no debería adoptar otra posición que la de un rechazo categórico a tal guerra", señalan.

"Tal guerra no solo no refleja los intereses de Rusia, sino que también amenaza la existencia misma del país. Las acciones sin sentido de los líderes políticos del país, que nos empujan en esta dirección, conducirán inevitablemente a un movimiento masivo contra la guerra en Rusia. Cada uno de nosotros, naturalmente, jugará un papel en ella. Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para evitar esta guerra y, si comienza, para detenerla", finalizan.

La carta abierta ha recibido miles de adhesiones, según reportó el diario ruso en inglés The Moscow Times.

El jueves, Moscú hizo una demostración de fuerza en la frontera con Ucrania con el inicio de maniobras militares conjuntas con Bielorrusia, paso que la OTAN considera contrario a la desescalada entre rusos y ucranianos demandada por Occidente, reportó EFE.

En la primera jornada de los ejercicios "Determinación aliada-2022" los aviones de asalto rusos Su-25SM participaron en la "eliminación de objetivos del enemigo" en un polígono militar de la región bielorrusa de Brest, limítrofe con Ucrania y Polonia.

Se le sumarán en los próximos días los cazas Su-35 y los sistemas de defensa antiaérea S-400, que tienen un alcance de hasta 400 kilómetros, juegos de guerra a los que no acudirá el presidente ruso, Vladimir Putin, según informó el Kremlin.

El jefe del Estado Mayor de Rusia, Valeri Guerásimov, sí viajó a Minsk para presidir las maniobras, que algunas capitales occidentales consideran un posible preludio de una invasión de Ucrania.