Hace siete semanas, cuando se celebraron las elecciones regionales y municipales en Venezuela, el candidato opositor en el estado (provincia) de Barinas se impuso por centenares de votos. El chavismo activó resortes institucionales para que se repitieran las votaciones, y en el ínterin, movió cielo y tierra. En los nuevos comicios, celebrados este 9 de enero, la población mostró un rechazo sonoro al régimen.
Analistas, periodistas y diplomáticos, en general, mostraron una visión optimista, de moderado optimismo, acerca de las implicaciones políticas que tendrá en Venezuela este hecho. Por primera vez desde que Hugo Chávez asumiera la presidencia en 1999, su provincia natal no estará gobernada por nadie de su familia. Este hecho, además, ha permitido ver fisuras públicas entre las figuras del chavismo, las cuales —hasta ahora— no se exponían en público.
Entre el 21 de noviembre pasado y este 9 de enero, el chavismo llevó miles de electrodomésticos a Barinas, una zona llanera dedicada a la ganadería principalmente. El chavismo desvió combustible de otras regiones para que no hubiese escasez de gasolina en la campaña electoral, y el mismo día de la votación movilizó centenares de autobuses de entidades públicas, incluso de otras dependencias, para que trasladaran a los votantes.
En paralelo, los poderes públicos cooptados por el chavismo, que ordenaron repetir los comicios, inhabilitaron al candidato opositor que había ganado el 21 de noviembre, Freddy Superlano. Luego dejaron sin derecho de inscribirse como candidata a la mujer de Superlano, y también recibió inhabilitación el jefe de campaña en Barinas.
Así las cosas, terminó siendo abanderado de la oposición Sergio Garrido, un diputado regional de segunda línea, más vinculado a Acción Democrática que a Voluntad Popular, partido de Superlano. Con el tema de las inhabilitaciones, el chavismo jugó duro e incluso se evidenciaron diferencias entre el Tribunal Supremo de Justicia y los rectores oficialistas del Consejo Nacional Electoral, órgano en el cual dos de cinco directivos son independientes.
Argenis Chávez, hermano de Hugo Chávez y quien fue derrotado el 21 de noviembre, reconoció este domingo que evitó hacer campaña para la repetición de las elecciones por una directriz del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
A contravía de lo que ha sido la práctica del chavismo, el candidato derrotado, Jorge Arreaza, ex canciller y ex yerno de Chávez, reconoció la derrota antes de que hubiese un boletín oficial, y este lunes llamó a que haya una profunda revisión en el PSUV desde los puestos de base hasta en la jerarquía del partido. En ambos casos, se trata de pronunciamientos públicos inéditos en la Venezuela bajo la égida chavista.
A juicio del periodista y politólogo José de Bastos, las elecciones del 21 de noviembre y en particular la simbólica victoria opositora del 9 de enero "mueven el 'péndulo' de la lucha opositora nuevamente al campo electoral. Eso no quiere decir que el éxito en Barinas sea exactamente replicable a nivel nacional, pero sí que el eje de la lucha vuelve a ser la participación, como lo fue en el periodo 2007-2016".
Consultado por DIARIO DE CUBA, De Bastos observa que parece haber quedado atrás la apuesta opositora centrada en la presión, sea interna (movilizaciones de calle) o externa (por actores de la comunidad internacional).
Un escenario factible será pensar en 2024, cuando deberían ocurrir unas elecciones presidenciales. Durante los últimos años la oposición venezolana deshojaba la margarita entre denunciar la ilegitimidad del Gobierno de Nicolás Maduro, y por tanto negarse a participar en unas elecciones que fuesen diferentes a las presidenciales, y plantearse una estrategia de recuperación progresiva de espacios de poder, a nivel municipal y regional, para avanzar hacia el objetivo de un cambio en la Presidencia.
No puede obviarse que la participación electoral en las elecciones recientes, en Venezuela, estuvieron condicionadas a la presencia de veeduría de la Unión Europea (UE). La UE, por otro lado, junto a EEUU y Canadá ha planteado su disposición a flexibilizar o levantar sanciones que pesan sobre el régimen de Maduro a cambio de mejores condiciones electorales. Para los analistas hubo en 2021 un avance importante, pero aún incompleto para tener en Venezuela unas elecciones libres y justas.
"Definitivamente, con Barinas pierden los opositores que nunca creyeron en las elecciones regionales y pierden los que dentro del chavismo arrebataron la elección del 21 de noviembre en Barinas, pues ahora el chavismo pierde con más margen de votos. Ha ganado la ciudadanía y los liderazgos que realmente desean una salida negociada y electoral", apunta por su parte Michael Penfold, investigador del Woodrow Wilson Center, con sede en Washington.
Este 9 de enero, el candidato opositor sacó una diferencia de 16% sobre Arreaza. Al ser Garrido una figura casi desconocida quedó en evidencia que los electores en realidad apostaron a castigar electoralmente al chavismo en esta provincia, bautizada como la cuna de la Revolución Bolivariana.
Barinas se suma a Zulia, Cojedes y Nueva Esparta entre las cuatro gobernaciones ganadas por la oposición de los 23 estados (provincias) del país, donde se evidencia un cambio sustantivo en la correlación de fuerzas a nivel municipal.
Tras las elecciones del 21 de noviembre, de un total de 335 alcaldías (Gobiernos municipales) que estuvieron en disputa, las fuerzas políticas no chavistas (coexistiendo allí un paisaje variopinto, incluyendo voces disidentes del chavismo), se hicieron con 125 triunfos, mientras que el chavismo se hizo de 210. Es un hecho inédito en dos décadas.
Sigan soñando en que las dictaduras se caen con votos. Los Castro quieren implantar el castrismo en venezuela. De ahi que dejaran perder el ultimo bastion del chavismo.
Ese que gano esta en el compadreo con Maduro. Comen en la misma mesa.
Por tiempo ya eh dicho que Venezuela está viviendo una Democracia. En Venezuela existe oposición. No estoy de acuerdo con Maduro pero lo respeto. Es totalmente diferente a Cuba adónde lo único que existe es el Castrismo. Los nuevos amigos de Maduro, Ortega y Diaz-Canel, se van a burlar de el por no tener poder absoluto en Venezuela como ellos tienen en sus países. Maduro es muy persona para juntarse con esos dos asquerosos. Eso dice mucho..
Apaguen el tabaco, la oposición ya fue comprada y se transformaron en “enchufados” del chavismo, quedó tan sólo una tapadera, hay castrismo-chavista en Cubazuela para rato, los venezolanos se rindieron y se convirtieron en otro pueblo esclavo del colonialismo cubano. Este es el punto de vista de muchos “panas” con los qué he conversado.