Las instituciones no son fiables, la democracia no es necesariamente el mejor modelo de gobierno y para no pocos le da lo mismo lo que ocurra en la vida pública del país. Esta es la fotografía de los jóvenes venezolanos en este 2021 según una amplia encuesta focalizada en la juventud, que desnuda, según analistas consultados por DIARIO DE CUBA, el triunfo de la hegemonía del chavismo en Venezuela.
La Encuesta Nacional sobre Juventud (Enjuve) fue realizada por la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) con datos de este año 2021. Un estudio similar se realizó en 2013. Entre entonces y ahora decayó, en líneas generales, la confianza en las instituciones y perdió fuelle el deseo de vivir en democracia. Los resultados, según diversos expertos, constituye un llamado de alerta para la alternativa democrática, tras más de 22 años de hegemonía chavista en el país.
Entre los datos de 2013 y los de 2021, sostiene el sociólogo Francisco Coello, "se aprecia desesperanza, falta de oportunidades y deterioro de las condiciones de vida". Este profesor de la UCAB, al ser consultado por DIARIO DE CUBA, plantea que la crisis generalizada que vive Venezuela termina siendo el telón de fondo para una juventud desesperanzada, lo cual se observa también en otras edades.
"Estamos viendo la pérdida de esperanza de los jóvenes, sin oportunidades de empleo, sin motivación para estudiar. Estudiar es irrelevante en un contexto como el que está viviendo Venezuela. Estudiar no te garantiza empleo, ni oportunidades", precisa Coello. De acuerdo con la Enjuve, alrededor del 37% de los encuestados ni estudiaba ni trabajaba al momento de ser entrevistados.
En líneas generales se registró, entre el sondeo anterior y este una disminución general en la confianza en las instituciones del país. Pone como ejemplo Coello el tema de las Fuerzas Armadas. De 65% que tenía hace ocho años descendió a 43%. "Aun así, desde mi perspectiva, viendo el rol de las Fuerzas Armadas en la represión y el sostenimiento del chavismo, habría que preguntarse porqué sigue un nivel tan alto de confianza", se cuestiona el sociólogo.
Un dato que causó escozor en la discusión pública, dentro de Venezuela tiene que ver con la identificación de los jóvenes con la democracia, como sistema de gobierno deseable. En 2021, solo la mitad de los encuestados se manifestó a favor y en 2013 la cifra estaba casi en 69%.
Quienes manifestaron su indiferencia ante un sistema democrático o autoritario, en su mayoría no se identifican con ninguna corriente política, según los investigadores responsables de esta encuesta nacional.
Esta percepción negativa se vincula a la consulta sobre el comportamiento de las instituciones específicas que deben garantizar la democracia. El 86% manifestó un descontento muy grande con el funcionamiento de la economía; el 71% está insatisfecho con el funcionamiento de los partidos políticos; el 67% desconfía de los procesos electorales y el 67% manifestó su decepción de las instituciones del Estado y los derechos civiles.
Junto a esta pérdida de fe en la democracia, Coello observa otro dato con igual dosis de alarma. Se trata de la actitud nihilista, a su juicio, que tienen hoy muchos jóvenes venezolanos. Alrededor del 28% dijo que le daba igual cualquier sistema de gobierno.
Para el profesor y analista social, el chavismo desde el poder ha promovido "un estado de anomia social, de desorden en la sociedad" y a su juicio las cifras de esta encuesta sobre la juventud venezolana están estrechamente conectados con lo que ha sido la política desde el Estado.
"Sin duda alguna, la desesperanza aprendida que se ha promovido desde el Estado ha tenido su impacto", precisa.
Los cambios que se registran en materia de percepciones y opiniones, por otro lado, están relacionados también con dos crudos momentos de represión de la protesta social que se vivieron en Venezuela en los años 2014 y 2017. En ambos momentos los jóvenes fueron los protagonistas y las principales víctimas.
Conectado con esto, otro dato que indica el alejamiento de los jóvenes en la política es que el 40% declaró haber dejado de participar en protestas políticas. Un 64% manifestó temor por el control social que se implanta desde el Gobierno y sus mecanismos de represión, como algunas de las razones de haberse distanciado de la participación en actividades públicas.