La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Gobierno chino han sido nuevamente cuestionados por su demorado actuar durante el inicio de la pandemia del nuevo coronavirus. Esta vez los señalamientos vinieron de parte de expertos independientes, según reportó el medio El Periódico, de Cataluña.
Estos expertos independientes, encargados de evaluar la respuesta mundial al Covid-19, estimaron que el nivel actual de propagación del virus se debe en buena medida al ocultamiento al que fue sometido en un principio por Pekín.
En su segundo informe, se aclara que "al referirse a la cronología inicial de la primera fase de la epidemia, se constata que habría sido posible actuar más rápido sobre la base de las primeras señales".
A esta noticia se suman las polémicas imágenes que recientemente salieron a la luz sobre los primeros días de la pandemia en la ciudad china de Wuhan. El documental, filmado por dos periodistas chinos y titulado Tres días que detuvieron al mundo, confirma las sospechas que ya se tenían sobre el encubrimiento de la gravedad del virus en sus primeros momentos por parte de los órganos represivos del régimen chino.
El documental fue grabado entre el 19 y el 22 de enero de 2020 y fue revelado por el medio Al Jazeera, el cual presentó a los dos periodistas bajo seudónimos (Yang Jun y Chen Wei) por temor a represalias por parte de la policía política de Xi Jinping. Junto al video, también fue publicado un diario en el que ambos reporteros escribieron sus impresiones sobre esos días.
Para el 19 de enero, según el material audiovisual, el régimen chino no compartía información sobre la gravedad del virus con el mundo, aunque a lo interno habían ordenado el cierre del mercado de Huanan, donde sospechaba que se inició la pandemia. Mientras tanto, se le impidió a la prensa nacional e internacional investigar sobre el tema.
"No puedo informar con libertad. Mientras las instituciones gubernamentales estén involucradas, me siguen y me espían constantemente", dice Jun en el diario, aludiendo a los constantes obstáculos que puso la policía china sobre la búsqueda de información.
Según Jun, él llego a notar la gravedad de la pandemia al sufrir varias detenciones por parte de la policía y personal hospitalario, quienes también le negaron acceso a muchas áreas y le prohibieron filmar. Aún así, logró grabar varias imágenes a escondidas.
Aún así, Jun y Wei corrieron con suerte, pues nueve periodistas chinos fueron entonces detenidos por investigar sobre el brote de Covid-19. Incluso, varios médicos que intentaron alertar sobre la realidad del virus fueron reprimidos y silenciados.
"Los medios chinos y las redes sociales hablan sobre la crisis y la desesperación en todo el mundo, excepto en China. Nadie en China se atreve a hablar sobre el origen del virus a partir de Wuhan o los primeros errores causados por el gobierno local de Wuhan", escribió Wei en el diario.
Según ambos periodistas, en China solo se tenía permitido hablar en los medios sobre una supuesta buena actuación del Gobierno ante la epidemia y del agradecimiento del pueblo chino a las autoridades.
El encubrimiento de la epidemia fue un factor determinante en su expansión, pues la población china no pudo acceder a información sobre la gravedad del virus al que se enfrentaban. Según Jun y Wei, mucha gente en China ni siquiera habían oído hablar del nuevo brote de coronavirus, de manera que ni usaban máscaras.
Solo cuando la epidemia llegó a otros países y fue imposible de ocultar, el Gobierno chino decidió hablar al respecto, lo cual llevó a una situación de pánico a la población de ese país. Para entonces muchos la padecían y por cuestiones de falta de personal y equipos médicos, en Wuhan se le negó tratamiento a muchos infectados.
No obstante, los dos periodistas reconocen lo efectivo del control del régimen sobre la prensa en su país, ya que en Wuhan se percibe entre los pobladores que la pandemia ya pasó, que el Gobierno chino supo controlarla y que todos debieran agradecerlo por ello.
No tan de prisa ...
https://media.diariolasamer…
En los países comunistas ocultar la verdad es ley.
¡Claro que sí! Y es muy probable que el bestial virus sea o creación de un laboratorio y escapado por error humano...
Vaya, los gallegos descubriendo el agua tibia. ¿dónde está el coletas que no ha saltado a defender a los comunistas?