El chavismo dinamita el puente electoral

La designación de la directiva del Consejo Nacional Electoral por parte del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) cierra la posibilidad de que haya una salida en Venezuela a la crisis a través de unas elecciones creíbles, según analistas consultados por DIARIO DE CUBA.

Pese a que en el seno de la Asamblea Nacional venía desarrollándose el proceso para escoger a los rectores del CNE, tal como lo establece la Constitución vigente, el chavismo se alió con otro sector opositor no reconocido por la comunidad internacional y conformó una directiva electoral que tuvo un rechazo inmediato de Juan Guaidó, presidente del Parlamento, y de países como EEUU y España.

"Coincido con lo que han señalado otros analistas, el chavismo ha venido dinamitando las salidas electorales. Lo viene haciendo desde que impuso la Asamblea Nacional Constituyente, en 2017. Desde ese momento fue cerrando el puente para una salida electoral a la crisis", comenta a DIARIO DE CUBA el profesor Jairo Lugo, experto en comunicación y democracia.

En 2017 el chavismo llevó adelante la elección de la ANC y en mayo de 2018 realizó una cuestionada reelección de Nicolás Maduro. En ambos casos el chavismo optó por realizar votaciones sin las debidas garantías y sin la participación de factores democráticos de la oposición, que aún son mayoría en la Asamblea Nacional (Parlamento), el único poder legítimo en Venezuela, según casi 60 países de Occidente.

Lo que viene ahora en el país sudamericano, tras la designación por parte del TSJ (dominado ampliamente por Maduro), es la realización de unas elecciones parlamentarias que en definitiva buscan poner fin al rol que ejerce Guaidó, que en su condición de presidente del Legislativo venezolano es reconocido como "presidente interino" por decenas de países.

Diversos voceros del chavismo, como el número dos del régimen, Diosdado Cabello, insisten en que en 2020 habrá elecciones parlamentarias para recuperar el Poder Legislativo y han descartado de plano realizar unas nuevas elecciones presidenciales como exige la comunidad internacional, especialmente los países europeos y la mayoría de americanos.

Por su parte, el politólogo Piero Trepiccione, al ser consultado por DIARIO DE CUBA, aseveró que el nuevo CNE venezolano carece de legitimidad de origen, dado que no fue designado por el Parlamento como corresponde, pero aseveró que debe observarse el comportamiento de los nuevos rectores.

Las elecciones parlamentarias no tienen fecha. Sin embargo, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, advirtió este lunes que su país y la comunidad internacional no reconocerán unas elecciones organizadas por el nuevo CNE que ha designado el TSJ venezolano. España, por su parte, pidió al régimen de Maduro que reconsidere la medida.

Guaidó adelantó que las fuerzas políticas que él representa, y que tienen presencia en la actual Asamblea Nacional, no acudirán a unas elecciones organizadas por la nueva directiva electoral. "No nos prestaremos a una farsa electoral", indicó.

El analista Félix Seijas, director de la firma de opinión pública Delphos, dijo que ante el escenario de unas elecciones próximas, el Gobierno de Maduro tiene serios desafíos de orden político, logístico y sanitario, esto último relacionado con la pandemia de Covid-19.

De acuerdo con Seijas, las elecciones parlamentarias tienen una complejidad logística y hay relativamente poco tiempo. No hay una fecha precisa, pero deben realizarse antes de que concluya este 2020.

El CNE, sin hacer una licitación pública, ha venido reponiendo las máquinas de votación ya que en un incendio ocurrido meses atrás se quemó el 80% de estos equipos.

Seijas señala a DIARIO DE CUBA que el Gobierno deberá manejar de forma prudente el tema sanitario, pero reconoce que puede manejarlo de forma interesada, dejando ver que existe riesgo en ciertos centros de votación, por ejemplo, de votantes tradicionalmente opositores.

A juicio del analista, el Gobierno tiene un enorme desafío porque deberá mostrar las elecciones como competitivas, pero al mismo tiempo deberá desestimular el voto opositor.