La plataforma DFrente, que se describe a sí misma como "un frente democrático de concertación que procura la refundación de la República de Cuba", declaró este viernes que las medidas decretadas recientemente por la administración Biden respecto a Cuba "llegan en uno de los momentos más difíciles" de la Isla, dijo la organización en un comunicado difundido en su perfil de X.
DFrente consideró "que las medidas quieren ofrecer un horizonte de empoderamiento a las incipientes MIPYMES de la Isla. Estas podrían alcanzar un mejor acceso a servicios informáticos que resultan la columna central del funcionamiento de las economías contemporáneas; acceder de manera fluida al mercado norteamericano; y permitir un mayor flujo de divisas hacia Cuba, que se traducirían en un aumento de las remesas y por tanto de la liquidez en el país".
La organización subrayó que "la nueva regulación podría contribuir a mitigar los problemas de inflación, facilitar la capacidad de importar productos básicos que tan urgentes son hoy para nuestra población, y quizá desatar algunos 'nudos' que limitan la producción".
"Dichas medidas podrían incidir de algún modo en el mejoramiento de las paupérrimas condiciones de vida de la inmensa mayoría de los cubanos", indicó DFrente, al tiempo que reclamó que "el Gobierno cubano culmine e implemente la Ley de Empresas anunciada desde 2022, y que ella suprima todos los obstáculos que el propio Gobierno impone al naciente empresariado privado, a la inversión extranjera y al establecimiento de un modelo económico eficaz; en suma, a la prosperidad de toda la nación".
"No habrá solución definitiva sin que el Estado devuelva la soberanía al pueblo, de modo que la libertad individual y social puedan convertirse en el alma de la República que merecemos", concluyó la organización que, según sus estatutos, "aboga por la necesidad de consensos en las sociedades civil y política cubanas".
Sobre las medidas recientemente aprobadas por el Departamento del Tesoro de EEUU, el empresario cubano exiliado Carlos Saladrigas, uno de los fundadores de Cuba Study Group ―organización que promueve un cambio pacífico y progresivo en la Isla―, dijo que "una cosa es que la ley lo permita y otra que los bancos quieran".
Los bancos norteamericanos están sujetos "a una serie de requisitos" que deben cumplir, y "el tema Cuba sigue siendo muy escabroso porque la Isla continúa en la lista de países que patrocinan el terrorismo", destacó Saladrigas.
El empresario calificó las nuevas medidas como "muy positivas" porque, a la larga, "terminarán bajando los precios de los productos".
"Ya no hay que traer cosas de China a un costo de flete altísimo, si las puedes comprar más baratas en EEUU. Todo esto va a redundar en un descenso de precios, aunque la inflación siga porque no hay productividad", dijo.
"Otra ventaja muy grande es que, al hacer esas transacciones dentro del sistema bancario de EEUU, todo quedará plasmado de manera transparente. Las empresas financieras, los bancos, requieren saber de dónde proviene el dinero. Ahora todo queda a la luz pública y no como hasta ahora que se hacen por canales oscuros… Dinero que viaja a través de mulas cuando eso es innecesario y se puede resolver permitiéndole a los cubanos que abran sus propias cuentas", concluyó.
Las “nuevas medidas de EEUU“” incorporan un puente a la (democratización de la finanzas) para un sector de la población cubana.
Sin dudas una ayuda enorme… A los mismos de siempre.
Ya estas cosas pasan de la ingenuidad; sólo falta que les escupan en la cara a cada cubano.
Entiendo que Saladrigas tiene derecho a expresar su punto de vista, pero sin ocultar que se trata de establecer negocios lucrativos, no de ayudar a los cubanos del insilio.