El régimen intenta convencer a los cubanos de las 'ventajas' de la bancarización, pero se delata

El régimen cubano dedicó la emisión de este 7 de agosto del programa televisivo Mesa Redonda a presentar las supuestas ventajas de la progresiva eliminación del dinero en efectivo en las operaciones comerciales. Sin embargo, también evidenció que su objetivo no es otro que apoderarse del dinero que los cubanos no depositan en los bancos, como han advertido especialistas en DIARIO DE CUBA.

"Es un proceso en el que se ha venido avanzando durante algunos años, en el que participan todos los organismos de la Administración Central del Estado y gobiernos locales, así como todos los actores económicos de la sociedad. Se potencia el uso de títulos de créditos e instrumentos bancarios, con prioridad en el uso de los medios electrónicos de pago", dijo Joaquín Alonso, presidente del Banco Central de Cuba (BCC), sobre la llamada "bancarización", según citó el portal estatal Cubadebate.

Las palabras del presidente del BCC demuestran que, como había alertado en mayo de 2021 la analista Rafaela Cruz, en un artículo publicado en DIARIO DE CUBA, el régimen avanza hacia la informatización de la sociedad, en aras de eliminar el dinero efectivo e institucionalizar toda relación de intercambio.

No obstante, el "avance" en el proceso contrasta con las deficiencias que presentan las infraestructuras de telecomunicaciones, que el Gobierno pretende que los cubanos utilicen para realizar sus operaciones comerciales y que han sido motivo de quejas.

Según Alonso, la bancarización, que será "gradual" y que el régimen ha "estimado en seis meses", es "un proceso demandado por la población".

El funcionario aseguró que "la bancarización permitirá continuar empoderando la economía y potencia las posibilidades que el sistema bancario puede brindar al desarrollo del país".

De acuerdo al presidente del BCC, con la bancarización se propicia mayor transparencia en la circulación monetaria y solamente se realizan transferencias entre personas naturales.

Sin embargo, una diapositiva sobre el avance de la bancarización de la población hasta 2023, publicada por Cubadebate y explicada por el presidente del BCC, revela lo que preocupa al régimen y qué persigue con la medida. En 2023, según el gráfico que se puede ver en el portal estatal, lo que crece es el efectivo, no las operaciones bancarizadas. La población acumula su efectivo fuera del banco, señala el medio oficial cubano.

Esto evidencia la falta de confianza de los cubanos en los bancos, todos en manos del régimen. Tal desconfianza está más que justificada. En diciembre de 2020, con el anuncio de la desaparición del CUC, el BCC informó que las cuentas de ahorro en esa moneda podrían ser cambiadas a dólares o euros, pero con restricciones.

En esos casos, el banco emitía un certificado de depósito en cualquiera de las dos monedas, pero el titular no podía incrementar su saldo, extraer efectivo en estas monedas, ni transferirlos hacia otros productos bancarios en moneda extranjera.

A la vez, los titulares de las cuentas tenían un plazo de 180 días a partir de enero de 2021 para cambiarlas a una de esas dos monedas. De no hacerlo, el banco transformaba automáticamente sus CUC en pesos cubanos a la tasa de cambio oficial de 1 CUC x 24 CUP, lo que implicaba una considerable pérdida de poder adquisitivo.

Con tales antecedentes, es comprensible que los cubanos opten por mantener su dinero fuera de los bancos. Aunque el régimen intente convencerlos de los supuestos beneficios que traerá la eliminación de la circulación de efectivo, lo que pretende es apoderarse del dinero que la población no deposita en sus bancos.

Entre esos supuestos beneficios, el presidente del BCC mencionó que las plataformas ofrecen servicios los siete días de la semana y las 24 horas del día, que la divisa que se emplea en la fabricación de moneda física se puede destinar a otras prioridades del país y que con el efectivo se pueden cometer más errores en los ejercicios de cobros y pagos.

También se refirió a los mecanismos de control, que —dijo— posibilitan una mayor disponibilidad de efectivo y beneficiar a clientes que soliciten préstamos o financiamiento para determinados fines, según lo citó Cubadebate.

El funcionario también aseguró que "siempre van a existir operaciones con efectivo, pues comprendemos que no toda la población tiene acceso a los medios digitales, o sabe utilizarlos, para realizar las operaciones comerciales" y agregó que el servicio de caja extra es un beneficio que se continuará ampliando en las bodegas, mercados y otros establecimientos.

El vicepresidente del BCC, Alberto Quiñones, dijo que cuando las personas conocieron la medida, aumentó el nivel de extracción de efectivo de los cajeros.

"Queremos que las personas puedan acceder a los cajeros y satisfagan sus necesidades", afirmó. No obstante, tuvo que reconocer que hoy "faltan cajeros en 100 municipios".

También aclaró que el límite de extracción de efectivo de 5.000 pesos no es para las personas naturales, sino solo "para los actores económicos".

Para las personas naturales el límite de extracción de efectivo en pesos cubanos es de 80.000CUP en una operación y de 120.000CUP en un mes. Para transferencias electrónicas en estas monedas el límite es el mismo. En cuanto a las transferencias en dólares estadounidenses, el límite por operación es de 1.000 dólares y de 5.000 dólares para el mes.

El límite impuesto a los actores económicos de 5.000 pesos para extracciones de efectivo destinadas a pagos menores se revisa anualmente y podrá ser modificado según la evolución de la economía, aseguró el funcionario.