El Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana (OCAC) es una nueva iniciativa de la sociedad civil independiente cubana que acaba de ser constituido en la Isla para que los ciudadanos ganen conciencia en la necesidad fiscalizar los negocios del régimen de la Isla de manera independiente.
Según su nota fundacional, su función será "capacitar y ejercer auditorias ciudadanas a los procesos de desinversión deliberada en servicios y bienestar públicos, así como la privatización oligárquica de bienes de producción y servicios sin transparencia pública" en Cuba.
Las razones para que esta iniciativa nazca son el impacto sobre la sociedad cubana del "crecimiento de la inequidad y la pobreza, de la opacidad, corrupción y el surgimiento de una oligarquía opaca que, por medio de un súper holding (GAESA), controla el 70% de las riquezas y el 95% de las transacciones financieras", indica.
Asimismo, esa oligarquía "recién ha anunciado que se abocará a nuevas transformaciones económicas bajo la tutela de Rusia, sin que existan mecanismos de supervisión y control ciudadanos sobre esos procesos. El resultado puede ser la aceleración de los actuales procesos de negligencia social deliberada (bening neglect) y una privatización dirigida por la alianza oligárquico-burocrática similar a la que dio lugar al actual Estado mafioso ruso".
El OCAC subraya que "los ciudadanos cubanos necesitan tomar conciencia de que deben y pueden, si aprenden cómo hacerlo y se organizan para ello, crear sus propios mecanismos de auditoría sobre los procesos en curso".
El laboratorio de ideas con sede en Madrid Cuba Siglo 21 saludó la creación del mecanismo y le ofreció su apoyo, sumando a los argumentos anteriormente citados que en la Isla se está produciendo "la aceleración de la apropiación arbitraria por GAESA de las riquezas y recursos del país", mientras que "la opacidad en los procesos de creación de Mypimes y la pretensión de hacer pasar esas entidades como actores autónomos de un inexistente sector privado nacional, son procesos que requieren ser investigados".
"Lo mismo ocurre con la falta de transparencia en la recepción y manejo de donaciones humanitarias hechas por Estados Unidos y otros países al pueblo de Cuba, que impide corroborar su entrega gratuita y sin discriminación a los destinatarios. Frente a esas realidades, la ciudadanía necesita empoderarse construyendo sus propias capacidades de indagación y fiscalización independiente", subraya.
Cuba Siglo 21 adelantó que la venidera semana publicará su primer informe sobre las Mypimes en Cuba, elaborado con el apoyo del Havana Consulting Group y el Observatorio de Cubano Auditoría Ciudadana.
"La información recopilada demuestra la gravedad de los procesos en curso y la urgencia de disponer de esa red ciudadana de auditoría para monitorearlos. Al tiempo que GAESA sigue devorando los recursos nacionales, con las Mypimes se intenta burlar el embargo y crear artificialmente una clase media dependiente de GAESA, cuyos 'propietarios' sean elegidos principalmente entre familiares menos afortunados de los oligarcas, represores en retiro y miembros de las brigadas paramilitares de respuesta rápida", advierte.
"Si bien construir capacidades de auditoría ciudadana independiente es una urgencia para enfrentar la consolidación del actual régimen oligárquico, también serán imprescindibles en la futura sociedad democrática para enfrentar cualquier posible proceso de corrupción gubernamental o privada", finaliza.
Felicitaciones; “ Frente a esas realidades, la ciudadanía necesita empoderarse construyendo sus propias capacidades de indagación y fiscalización independiente"