Llegó al fin. Damos la bienvenida a la Publicación Mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI). Al igual que en otros países del mundo, esta información permitirá conocer la variación promedio experimentada por los precios de una canasta de bienes y servicios representativa del consumo de la población en un período determinado.
La metodología de elaboración de este índice sigue pautas internacionales, a pesar de las diferencias que presenta la economía cubana. Todos los meses se recolectan aproximadamente 31.300 precios en alrededor de 7.900 establecimientos, situados en 18 municipios de toda Cuba, que incluyen la zona urbana de los municipios cabecera de 14 provincias y cuatro municipios de la ciudad de La Habana —Playa, Plaza de la Revolución, Centro Habana y Habana Vieja—, lo que permite obtener cobertura nacional.
De modo que el índice de precios que se obtiene solo es representativo del conjunto de la economía, no siendo así a nivel de regiones ni de municipios. Una limitación que se debería corregir para conocer las diferencias de precios en el territorio, pues tienen una influencia muy destacada en el crecimiento económico y el bienestar de la población.
La canasta de bienes y servicios está formada por 298 artículos, que suponen más del 90% del gasto de los hogares. No cabe duda de que conocer el IPC y sus tendencias mes tras mes en Cuba era una de las asignaturas pendientes de la estadística oficial. A partir de ahora, disponer de una relación de precios mínimos y máximos de productos seleccionados por provincia, observados para la construcción de este indicador, va a permitir diagnosticar mejor el escenario económico a corto plazo e introducir elementos que ayuden a comprender las tendencias y los efectos de las políticas económicas. Estos precios se incluyen en la documentación anexa.
Formuladas estas previsiones, de acuerdo con la descripción metodológica anterior, en agosto de 2021 el Índice de Precios al Consumidor en Cuba se situó en 173,51 con respecto a la base (2010), siendo la variación mensual de dicho mes respecto a julio de 0,81%, la variación acumulada en lo que va de año de un 58,46% y la variación interanual de 62,87%.
No obstante, el Transporte, con un índice de 297,82, los Servicios a la vivienda con 261,80 y Alimentación y bebidas no alcohólicas, con índice 220,81, registraron niveles superiores a la media, así como tasas interanuales también más elevadas que el promedio, de 171,38%, 152,68% y 93,33% respectivamente. Con estos datos, es evidente que la economía cubana se encuentra instalada en un proceso inflacionista muy intenso, que incide de forma negativa en el nivel de bienestar de la población y, sobre todo, en la capacidad de crecimiento económico. Dado el peso que tienen en el presupuesto familiar estos conceptos, se puede concluir que la inflación está causando graves estragos a las familias.
Por el contrario, conviene tener presente que los acápites con menor impacto en términos de inflación son, por este orden, Prendas de vestir y calzado, cuyo índice de 92,8 es el único que se encuentra por debajo del nivel de 2010. Tampoco han sido inflacionistas, según la ONEI, los Bienes y servicios diversos, con 117,32; los Muebles y artículos para el hogar, 113,78 de índice, y la Recreación y cultura, 119,7. Además, estos cuatro conceptos registran tasas de variación interanual inferiores a la media: 6,18%, 10,33%, 11,32% y 19,64% respectivamente.
Los 'logros' de la revolución
En cuanto a los llamados logros de la revolución, los resultados son sorprendentes. En el caso de Salud, el índice se situó en agosto pasado en 132,74, con una tasa de variación interanual del 22,37%, mientras la Educación, con el índice en 125,31, registró un aumento de precios anual del 21,68%. Nada es gratis, y ni siquiera los logros de la revolución han escapado de este incremento general de precios que está sacudiendo a la economía cubana en su línea de flotación.
La publicación de la ONEI reconoce que la variación mensual mostrada de diciembre 2020 a enero de 2021 es debida al incremento de los precios en correspondencia con el proceso de unificación monetaria y cambiaria. En concreto, en el mes de diciembre el Índice de precios de la economía era 109,50, mostrando una estabilidad con respecto a 2010. Un mes después, a resultas de la Tarea Ordenamiento, como reconoce la ONEI, el índice se había disparado a 157,76, con un aumento intermensual del 44% inédito en la historia reciente de la economía cubana (Por citar un ejemplo, el aumento de salarios en 2020 fue de un 35,8%, lejos de lo que indica el aumento de los precios, esto supone empobrecimiento real.)
A partir de entonces, la inflación ha seguido aumentando a tasas menores hasta llevar el índice de agosto, como ya se ha señalado, a 173,51, un 60% más elevado que en diciembre de 2020. No es una inflación de tres dígitos, pero se le parece bastante y, sobre todo, se observa que muestra una perniciosa dificultad para disminuir. Esto viene motivado por el hecho de que las expectativas de inflación pueden haber arraigado en los agentes económicos, lo que aventura alzas de precios en los próximos meses.
Según la ONEI, las divisiones que más efecto tuvieron en el incremento del índice a comienzos de este año fueron:
* División 1: Alimentación y bebidas no alcohólicas. Básicamente, por la eliminación de los subsidios estatales, lo que ha exigido a la población recurrir a vías alternativas para alimentarse.
* División 4: Servicios de la vivienda con un incremento de las tarifas de cobro en los servicios de gas, electricidad y agua que escapa de cualquier gestión racional y ordenada por parte de los monopolios estatales.
* División 7: Transporte, por el incremento de la tarifa del peaje en ómnibus y del pasaje en avión.
La dificultad con la inflación reside en determinar si ocurre por motivos coyunturales o, al contrario, responde a razones de mayor peso, derivadas de factores estructurales. La inflación que se ha asentado en la economía cubana tiene su origen en la Tarea Ordenamiento, pero procede también de una falta de oferta generalizada en los sectores de una economía con exceso de trabas y controles por parte del Gobierno. Mientras estos aspectos no se resuelvan, la inflación continuará.
Con esta publicación y sus anexos, el régimen sale a la palestra mostrando datos oficiales que, hasta la fecha, no se ofrecían a los analistas y a la sociedad, planteando una zona de oscuridad y de falta de transparencia nada adecuada para el análisis de la economía nacional que ahora se despeja y que podrá ser cuestionada con el debate de los datos. Por supuesto que habrá quien ponga en dudas las estimaciones ofrecidas. Con este dato de agosto, por ejemplo, el régimen muestra que la inflación en Cuba de la Tarea Ordenamiento, en contra de lo apuntado por analistas, no se ha encaramado a tres dígitos, pero anda cerca y lo peor es que no parece que esté bajo control, a pesar de las variaciones intermensuales.
Anexo de datos
Meses, índices
Dic-20: 109,5
Ene-21: 157,75
Feb: 159,48
Mar: 164,2
Abr: 167,3
May; 169,84
Jun: 171
Jul: 172,11
Ago: 173,51
Meses, variación %
Ene-21: 44,1
Feb: 1,1
Mar: 3,0
Abr: 1,9
May: 1,5
Jun: 0,7
Jul: 0,6
Ago: 0,8
Acumulado: 53,7
Inflación, pero si eso es una enfermedad del capitalismo por la oferta y demanda,
en Cuba hay poca oferta pero los carneros no demandan tanto
Una huelga general contra la inflacion. PATRIA Y VIDA.