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Represión

Comunicaciones privadas, el arma que utiliza el régimen para intentar condenar a un opositor

'Si me condenan, recurriré ese fallo, ya que les dejé bien claro que no estaba de acuerdo y me considero totalmente inocente', advierte José Manuel Barreiro Rouco.

Madrid
El opositor cubano José Manuel Barreiro Rouco.
El opositor cubano José Manuel Barreiro Rouco. ICLEP

El juicio por los supuestos delitos de desacato y tráfico ilegal de divisas contra el opositor José Manuel Barreiro Rouco quedó concluso para sentencia la semana pasada. Se celebró más de un año después de que este activista pasara cuatro meses detenido en Cienfuegos, informó él mismo a DIARIO DE CUBA.

"Todo se desarrolló de acuerdo a lo que esperábamos mi abogado y yo. En ningún momento acepté haber cometido ninguno de esos dos delitos, ya que ellos se basan en la publicación de unos memes contra el Gobierno que realicé en un grupo privado de WhatsApp de la familia, una vía totalmente privada a la que ellos accedieron sin mi permiso y de esa manera violaron mis comunicaciones privadas", señaló Barreiro Rouco.

El opositor se refería a memes sobre Miguel Díaz-Canel, Fidel y Raúl Castro. El grupo en el que circularon era de solo 11 personas.

En la petición fiscal, publicada en Facebook por el periodista cubano Raúl Gallego, se lee que al opositor se le imputaba haber acumulado en su teléfono móvil "numerosas imágenes" de Miguel Díaz-Canel, Raúl Castro y "del principal líder de la obra revolucionaria, Fidel Castro Ruz", a quienes se les atribuían "epítetos degradantes" como "asesinos y singaos".

Según la Fiscalía, Barreiro Rouco, de 52 años y barbero de oficio, pretendía, "a través de imágenes hilarantes, fomentar el deseo de acabar con la vida de Raúl Castro y la idea de que, si la población se lanzara a la calle, los dirigentes de los cuerpos armados del país perderían la vida".

"Eso era un WhatsApp familiar y ellos (los investigadores policiales) lo supieron después que decomisaron el teléfono. Los memes no son públicos, los memes fueron intercambiados entre hermanos, primos, familias, tíos", dijo el presidente del Movimiento Ciudadano Reflexión y Reconciliación, del que es parte Barreiro Rouco, citado por Martí Noticias.

"En el juicio no pudieron demostrar que los memes eran públicos. Es una injusticia", agregó.

La Fiscalía pide una condena de dos años y medio de cárcel para este activista cienfueguero.

"El tráfico ilegal de divisas también es una total falsedad, ya que es un dinero que ellos encontraron en el primer registro que hicieron en mi vivienda. En ese momento no decomisaron el dinero porque no era de 'interés operativo', pero como no tenían nada para poder procesarme, también me quieren acusar por un dinero que no es mío y el cual se cambió esa vez, pero jamás me he dedicado a esa actividad con ánimo de lucro", dijo a DIARIO DE CUBA Barreiro Rouco, residente en Aguada de Pasajeros.

El tribunal debe pronunciar su sentencia en aproximadamente 20 días hábiles después del juicio.

"Si me condenan, recurriré ese fallo, ya que les dejé bien claro que no estaba de acuerdo y me considero totalmente inocente", aseguró el activista.

Barreiro Rouco fue detenido el 15 de junio del pasado año, como parte de una redada más grande hecha por la policía política en varias ciudades del país. En un inicio, las autoridades lo relacionaron con un grupo de 26 personas que difundían en redes sociales mensajes antigubernamentales, y que tenían en común supuestos vínculos con el cubano residente en Estados Unidos, Yamil Cuéllar.

Pero Barreiro Rouco asegura que no tenía vinculación alguna con ese grupo de 26 cubanos, residentes en las provincias centrales, ni con Yamil Cuéllar, a pesar de ser abiertamente opositor al régimen.

Pocas semanas después de la detención de Barreiro Rouco, el propagandista del régimen Humberto López habló en su espacio del Noticiero Nacional de televisión sobre supuestas fuerzas que, "con la participación de cómplices dentro del país", buscaban concretar acciones violentas y vandálicas y que estarían financiadas desde EEUU para provocar disturbios en Cuba.

El 30 de diciembre último, Barreiro Rouco salió de la cárcel con una medida de reclusión domiciliaria, lo que permitió esperar el juicio en su casa. Desde esa fecha hasta la víspera de la celebración del juicio, se había abstenido de dar declaraciones a medios independientes.

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