La presa política María de Jesús Terrás Díaz, recluida en la cárcel de mujeres La Bellotex, en Matanzas, se declaró recientemente en huelga de hambre, para exigir a las autoridades que aprueben su cambio a un régimen menos severo, informó el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas en su cuenta de X.
La presa política, conocida como "Cuquita", exige que la trasladen a dicho régimen "para poder ver con frecuencia a su hijo y aliviar los efectos que el encierro ha tenido en su salud", subrayó el mensaje en X de la ONG.
"Cada vez que se lo presentan, se lo deniegan. Y ya a ella le toca, desde hace rato. Con ese cambio de medida, ella pudiera salir de pase, ver a su hijo. Y nunca le dicen por qué no se lo aceptan", señaló a Martí Noticias su prima Dianella Díaz.
Sus familiares perdieron comunicación con "Cuquita" en el momento en que ella les informó que comenzaba su protesta pacífica, y responsabilizan a las autoridades por lo que le pueda suceder. Temen que la huelga afecte mucho más sus condiciones de salud, notificaron los activistas del Centro de Documentación de Prisiones Cubanas.
"Ella me había dicho ya que iba a plantarse si no le hacían el cambio de medida que está pidiendo. Eso es no comer, no tomar agua. Me llamó este lunes por la mañana y me dijo: ' te estoy avisando que no te voy a llamar más porque ya empecé eso ' ", dijo Díaz.
"Pero yo oí a una guardia que le preguntó: 'con quién tú estás hablando', y se colgó la llamada. No sé qué pasó, si le quitaron el teléfono. No se comunicó más conmigo", agregó.
Torrás Díaz acaba de cumplir 40 años de edad en prisión, en la que está por ejercer sus derechos el 11J. Acusada de sabotaje y desórdenes públicos, fue condenada a siete años de privación de libertad, y las autoridades le ha negado reiteradamente la atención médica.
La prisionera política tiene cálculos en los riñones, ha adelgazado mucho durante su encierro y padece de fuertes migrañas, relató el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas.
Asimismo, la ONG instó al Gobierno cubano "a respetar los principios de la Declaración de Malta de la Asociación Médica Mundial sobre las personas en huelga de hambre, y otras normas del derecho internacional humanitario para el tratamiento de reclusos en situación de vulnerabilidad".
Exigieron, igualmente, que Torrás Díaz "no sufra represalias de parte de los funcionarios de La Bellotex, una práctica común en las prisiones cubanas contra quienes deciden hacer huelga de hambre y denunciar su situación".
Por su parte, Raúl Enrique Medina, responsable de Comunicaciones de la organización, concluyó que este "es un recurso extremo de protesta pacífica a la que se ven obligados muchos de ellos, para manifestarse contra las difíciles condiciones en las que son recluidos, de alimentación, de desatención médica, también contra hechos puntuales de represión de parte de los funcionarios de prisiones (que, generalmente, estos hechos quedan impunes) y también para exigir régimen de menor severidad, o que los liberen en el tiempo en que les corresponde".
