El Tribunal Municipal de Diez de Octubre dejó concluso para sentencia el juicio contra el opositor cubano Frederict Otero Angueira, acusado de "propaganda contra el orden constitucional" por realizar una manifestación pacífica en el segundo aniversario de las protestas antigubernamentales de julio de 2021.
La Fiscalía pidió una sentencia de seis años de privación de libertad contra el opositor, según dijo su madre, Daisy Angueiras, al medio estadounidense Martí Noticias.
La pena máxima para ese delito, contenido en el nuevo Código Penal y que el régimen emplea también contra ciudadanos que expresan críticas en redes sociales, es diez años de privación de libertad.
El juicio contra Otero Angueira —encarcelado en el centro penitenciario 1580 de La Habana desde julio de 2023— se realizó el pasado jueves. Los activistas Tomas Ramos, exprisionero político conocido como "El Tigre"; Anyell Valdés, y Gerardo Lescano intentaron asistir, pero fueron interceptados por la Seguridad del Estado.
El activista Marcel Valdés denunció en Facebook que un agente del órgano represivo, que se hace llamar Luisito, ofendió a los tres amigos de Otero Angueira y ordenó a agentes de la Policía que se los llevara lejos, en un patrullero.
Los activistas le contaron a Valdés que la Policía los soltó en el consejo popular Managua, del municipio Arroyo Naranjo.
El 11 de julio de 2023, Otero Angueira se manifestó en la esquina de Agua Dulce, en el habanero municipio Diez de Octubre, para conmemorar el aniversario de las protestas que estallaron en más de 50 ciudades y comunidades cubanas dos años antes, en la misma fecha.
"Salimos para la calle y nos pusimos en Agua Dulce y ahí hicimos la protesta gritando '¡Abajo el comunismo!'. Pero lo que no sabíamos es que la Seguridad del Estado estaba en el garaje (la gasolinera) mirándonos de lejos", relató El Tigre a Martí Noticias.
Según su relato, Otero Angueira fue detenido en su casa poco después. Él no fue encarcelado debido a que tiene 82 años.
"Cuando yo me fui de la casa de Frederict, fueron a buscarlo. Lo cogieron preso, lo metieron para Villa Marista. Yo fui y testimonié que lo había embullado, pero me dijeron que me fuera, que yo estaba viejo y no tenía nada que hacer allí", contó El Tigre, que estado preso por razones políticas tres veces.