El listado de presuntos terroristas hecho público la semana pasada por el régimen de Cuba sirve para levantar el perfil a agentes de La Habana que, haciéndose pasar por opositores, operan desde el extranjero, advirtió la ONG Prisoners Defenders al presentar su informe sobre los prisioneros políticos en cárceles de la Isla correspondiente al mes de noviembre.
De acuerdo con la organización con sede en Madrid, la publicación en Gaceta Oficial de la resolución del Ministerio del Interior (MININT) que reúne los nombres de 61 individuos y 19 organizaciones imputados por La Habana por presuntos delitos de terrorismo es un "arriesgado movimiento, contrario a los intereses de cualquier servicio propio de inteligencia".
Pero su propósito, asegura la organización, es "blanquear una lista de agentes, funcionarios o colaboradores de la Seguridad del Estado de Cuba que operan en el extranjero infiltrados como 'opositores extremistas' en el exterior y cuya reputación pueda estar puesta en duda".
Prisoners Defender (PD) aseguró haber investigado los casos de algunos de los individuos mencionados por La Habana, pero hizo énfasis en el de Leo Juvier Hendrick, a quien la resolución del MININT ubica como imputado en el expediente investigativo 01/2021, "por incitar a la realización de acciones que afectan el orden social en Cuba, mediante actos violentos contra funcionarios públicos y bienes de significativa consideración social".
Según PD, Leo Juvier "ha sido la mano derecha en Bruselas del régimen y de Norma Goicoechea Estenoz, embajadora de Cuba en la Unión Europea entonces, y actualmente presidenta de la organización del régimen cubano llamada Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU), una GONGO (organización no gubernamental creada por un Gobierno) cubana, como se denominan en Naciones Unidas a las ONG falsas".
"Este cubano, agente/funcionario/colaborador del régimen de Cuba, y desde 2020 supuesto activista de ultraderecha y extremista, y también desde entonces personaje público, y que se ha caracterizado por llamar a la 'invasión violenta de Cuba', se llama Leonel Juvier Padrón. Sin embargo, él se autodenomina, desde que comenzara su carrera como extremista en la oposición, Leo Juvier Hendrick (también, Léo Juvier-Hendrickx)", precisó PD.
Según el informe, Leo Juvier nació en Villa Clara en octubre de 1984 y "ha llegado a pasar todos los filtros ideológicos necesarios para desempeñar durante años la labor para el régimen de Cuba en Bruselas, pasando de colaborar con el Gobierno de Cuba a infiltrarse inmediatamente después, ya como opositor extremista, en el Parlamento Europeo y otras muchas instituciones, marcando su accionar por un extremismo extravagante para lo que debería ser, y es, el accionar pacífico que caracteriza a los verdaderos activistas de derechos humanos y opositores cubanos, llegando a abogar por la invasión de Cuba".
Subraya PD que el objetivo de esa clase de posturas es provocar declaraciones extremistas en grupos políticos de países democráticos y generar "en las clases políticas moderadas de Europa y Estados Unidos la idea de que 'todos los opositores cubanos son unos extremistas'. Pero la realidad es la contraria: gran parte de los más extremistas opositores cubanos, que no lucharon contra el régimen en la propia Isla de forma documentada, son agentes encubiertos del régimen, precisamente para poder: A) Infiltrarse apelando a los sentimientos de las víctimas que sí lucharon contra el régimen; B) Dividir a la clase política democrática y cubana; y, además, C) Crear una imagen extremista de la oposición cubana".
Para sustentar su denuncia, PD señala que, en vez de desprestigiar a Leo Juvier mostrando las numerosas pruebas existentes de su trabajo como diplomático de La Habana, el régimen en cambio ha ido desde 2021 "desapareciendo paulatinamente de los servidores muchos de los enlaces y fotos de Leo Juvier Padrón con las autoridades cubanas, coincidiendo con el momento en que éste dio un viraje para presentarse como 'opositor extremista'".
Asimismo, en el listado oficial del MININT se evita mencionar el nombre oficial de Leo Juvier (Leonel Juvier Padrón), para en cambio usar su alias actual (Leo Juvier Heindrick). "Sin embargo, se indica en dicha publicación que su nominal pertenece al expediente investigativo 01/2021, que es la fase procesal preliminar de un expediente de fase preparatoria, y por tanto, un documento que solo puede contener datos oficiales de Cuba para una acusación fiscal formal ante los tribunales", advierte PD.
"De no aparecer los datos identificativos verificables en Cuba, el caso sería sobreseído y sería una acusación fantasma. Justo lo que es", subraya.
Aparte de mencionar otras evidencias, PD refiere que luego de que esa ONG iniciara la creación de un Comité de Expertos en el Parlamento Europeo, "Leonel Juvier Padrón llamó al presidente de Prisoners Defenders. Sin saber cómo se filtró la información, en dicha llamada Leonel preguntó por las reuniones de dicho Comité, indicando que era un 'funcionario del Parlamento Europeo', identificándose por el nombre de Leo y usando un idioma extranjero".
"Meses más tarde, Prisoners Defenders fue alertada por un servicio de inteligencia europeo de la verdadera identidad de Leonel Juvier Padrón, y se nos entregó información detallada de todas sus actividades e historial. Los extremos de dicha información se corroboraron internamente mediante una detallada investigación propia, y se pusieron los resultados en conocimiento de los miembros del Comité y otras personas concretas", agrega el informe.
"Breve tiempo después de concluir las investigaciones, el presidente de Prisoners Defenders recibió cinco llamadas de cinco móviles distintos con insultos y graves amenazas personales por parte de este sujeto. Cuatro de las llamadas fueron colgadas sin prestar atención, pero una de ellas fue grabada ante la responsabilidad penal de las amenazas", señala.
"Tiempo más tarde, otras acciones para intentar localizar físicamente al presidente de Prisoners Defenders fueron efectuadas. Las amenazas de muerte del sujeto fueron tan graves que, unido a un intento detectado de localizar al presidente de Prisoners Defenders en sus oficinas por parte de personas sospechosas y bajo vigilancia, provocaron que se interpusiera denuncia oficial ante las autoridades y varias instancias, lo que conllevó la puesta en marcha oficial de un sistema de seguridad, vigilancia y alerta temprana ante la posibilidad de un atentado contra la vida del presidente de Prisoners Defenders", concluye.
Termina PD advirtiendo que la lista de presuntos terroristas publicada por el régimen cubano "no tiene credibilidad alguna y contiene nombres de agentes/funcionarios/colaboradores de la Seguridad del Estado y el G2 cubano, mezclados con algunos conocidos y reputados activistas de derechos humanos".
Recuerda que esta estrategia de potenciar una oposición extremista es típica del aparato de inteligencia del régimen de la Isla, como se evidencia en el caso del exdiplomático de alto nivel de EEUU, Víctor Rocha, detenido e imputado en Miami por espiar para La Habana, y quien se presentaba en público como de ultraderecha y seguidor de Donald Trump.
"Los opositores cubanos reales son personas, en casi todos los casos, que abrazan la lucha no violenta, el pacifismo y los valores democráticos. Y, últimamente, son en gran parte de izquierdas o centro-izquierda, lo que es una realidad, guste más o menos", apunta PD.
La ONG además denunció que la lista de presos políticos en cárceles de Cuba asciende a 1.062, "una media de 15 por mes en seis meses".
No me cuadra el Juvier ese,pero tampoco ese pacifismo afeminado .Los régimen como el de Cuba sólo caen por la fuerza.Ya vieron lo que trajo las protestas pacíficas en su mayoría del 11-J....
Mira cómo lo cogieron!
El compañerito Leo regresa a Cuba a dirigir un Plan Caña, sin cañas.
Con más frecuencia se ve el uso del término "blanquear" en varias publicaciones. Pero me pregunto si es correcto su uso. En este caso, "blanquear" equivale a respaldar, legitimar, o algo similar, pero ese no es el significado en el diccionario de la RAE. Luego, ¿es correcto su uso?