Activistas cubanos en Canadá abogan ante legisladores por la liberación de los presos políticos

Miembros de la sociedad civil cubanocanadiense realizan gestiones en ese país ante legisladores por la liberación de los más de 1.000 presos políticos en la Isla, como parte de una iniciativa a nivel internacional que busca llevar la realidad cubana a casi una veintena de parlamentos y congresos de gobiernos democráticos.

Un grupo de activistas cubanos, entre ellos Raimet Martínez Ávila y Kirenia Carbonell Diéguez, se reunieron esta semana con el senador canadiense Leo Housakos y con el miembro del Parlamento Pierre Paul-Hus, con quienes discutieron sobre la situación crítica por la que atraviesa Cuba.

De acuerdo con un comunicado enviado a DIARIO DE CUBA, en el encuentro se puso "énfasis en la petición conjunta que está siendo presentada en 18 países democráticos por la sociedad civil cubana, la cual aboga por la liberación de los más de 1.000 prisioneros políticos, entre otros puntos".

Uno de los asuntos tratados fue el hecho de que se reconozca a los miembros de la sociedad civil cubana como interlocutores válidos cuando se trata el tema de Cuba en Canadá. La idea es poder llevar a los parlamentos y congresos de los gobiernos democráticos la realidad de Cuba que esconde la propaganda diplomática del régimen. 

En una entrevista en Hoy con Tomás Regalado, de MegaTV, Carbonell Diéguez dijo que la iniciativa ya se ha presentado, además de Canadá, en Italia, España y Estados Unidos.

"Esta iniciativa es de todos los cubanos que luchamos por una Cuba democrática. El grupo es bastante extenso en Canadá, Estados Unidos y Europa. Decidimos unirnos en esta petición en un documento, inclusivo, sin ideologías, que no tiene carácter partidista. No hay organizaciones protagonistas. Sí se han recogido firmas (más de 600) tanto de dentro de Cuba (más de 400) como fuera", explicó

"Se trata de desmentir la narrativa del régimen militar, totalitario y genocida de La Habana utilizando los vehículos democráticos a nuestra disposición en los países donde vivimos. Llevar la verdad de lo que está ocurriendo en Cuba y poder cambiar las tablas", añadió.

En el caso de Canadá, donde nació la idea, el documento ha sido entregado a los más de 300 miembros del Parlamento canadiense y a los 105 integrantes del Senado. "Sabemos la complicidad del Gobierno de Canadá con el de La Habana y es ahí adonde tenemos que llegar", dijo Carbonell.