El Centro para una Cuba Libre (CFC) anunció este lunes en Miami el inicio de una campaña en favor de la "expulsión" del régimen cubano del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con el envío de una carta a autoridades de países y organismos internacionales firmada por más de 600 personalidades que respaldan esa medida, informó EFE.
El director ejecutivo del Centro, John Suárez, dijo a la agencia de prensa española que las firmas se han entregado ya en las oficinas del presidente de EEUU, Joe Biden, y los primeros ministros Magdalena Andersson, de Suecia, y Justin Trudeau, de Canadá, además de a la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
La idea es que la carta firmada por activistas de los derechos humanos, ex diplomáticos, académicos y personalidades internacionales llegue a los gobernantes de todos los países de la Asamblea General de Naciones Unidas.
Suárez explicó que la petición de expulsión de Cuba se sustenta en el punto octavo de la carta fundacional del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, según el cual cuando uno de los miembros viola sistemáticamente los derechos humanos puede ser expulsado.
El anuncio de la campaña se hizo en una rueda de prensa en Miami en la que intervino Katiuska Mustelier, hermana de Enrique Mustelier, condenado a cuatro años y ocho meses de cárcel por haber participado en las protestas pacíficas antigubernamentales del 11 de julio de 2021.
Mustelier acaba de regresar de Cuba, donde pudo visitar a su hermano, de 39 años y militante de la opositora Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) desde los 14, en la prisión provincial de Guantánamo.
Según dijo a EFE, lo encontró "firme" en sus reclamos de democracia y libertad para Cuba y "descompensado" en lo que se refiere a su salud, pues padece hipertensión y diabetes y no puede controlar esas enfermedades en prisión.
"En Cuba se vive una situación crítica que requiere la atención internacional, no hay libertad, el que se opone al Gobierno acaba preso", dijo Mustelier, quien recalcó que la protesta del 11 de julio en Guantánamo fue absolutamente pacífica y puede demostrarlo con vídeos.
La hermana del preso político reiteró que el mundo debería exigir respeto a los derechos humanos al Gobierno de Cuba y apoyó la campaña para que el régimen comunista sea expulsado del Consejo de DDHH de la ONU.
La expulsión de Moscú pudo marcar un precedente
La expulsión del Gobierno de Rusia del Consejo de DDHH de la ONU tras las acusaciones de crímenes de guerra durante la invasión a Ucrania puede marcar un precedente para la salida de La Habana del organismo internacional, algo que el propio canciller de la Isla, Bruno Rodríguez Parrilla, advirtió.
"Hoy es Rusia, mañana podría ser cualquiera de nuestras naciones del Sur que no se pliegan a intereses de dominación y defienden su independencia", escribió entonces en su cuenta de Twitter el ministro de Relaciones Exteriores cubano.
También el representante permanente La Habana ante Naciones Unidas, Pedro Luis Pedroso, se mostró contrario a la decisión de la comunidad internacional y calificó la expulsión de Moscú como un caso de "politización, doble rasero y selectividad aplicada".
Sin embargo, organizaciones internacionales como UN Watch aprovecharon la expulsión de Moscú para solicitar que se tome la misma medida con los gobiernos de Cuba, China, Eritrea, Libia, Mauritania y Venezuela.
También la opositora cubana Rosa María Payá, coordinadora de la Plataforma CubaDecide, afirmó en una entrevista con la agencia EFE que tras la expulsión de Rusia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU Cuba debe de ser la siguiente.
"Es vergonzoso que Cuba está en el Consejo, a la salida de Rusia tiene que seguir la de Cuba y no solo la suya, sino la de todas las dictaduras que actualmente se sientan ahí", afirmó la opositora de visita en Madrid.
Cuba fue elegida para el Consejo en 2020, el mismo año que entraron Rusia, China y Pakistán.
