La activista cubana Marisol Peña Cobas denunció la desidia de la Policía ante una agresión machista sufrida por su hija, una joven de 18 años que, en ausencia de su madre, fue golpeada y lanzada desde una escalera por su ex pareja en su vivienda en Camagüey.
"El ex de mi hija la lanzó de la escalera. Yo no estaba aquí. Según él, la policía no lo detiene porque es hija de una gusana", escribió en una publicación en su perfil de Facebook.
En una respuesta a los comentarios de indignación expresados por sus seguidores, Peña Cobas precisó que estando ella en el campo, el agresor, que no ha sido identificado, la agredió.
"La golpeó y la tiró de la escalera. Los vecinos tuvieron que intervenir. Mi hija, que solo tiene 18 años recién cumplidos, lo denunció. Ahora anda diciendo que a él no le hacen nada, porque ella es hija de una gusana", añadió.
Según la activista, su hija hizo la denuncia el mismo día de la golpiza. "Es por eso que anda hablando esto", afirmó Peña Cobas en referencia al alarde del agresor.
Peña Cobas participó en las manifestaciones del 11 de julio en su natal ciudad de Camagüey y fue detenida luego de los sucesos. Fue liberada tras más de un mes en prisión.
El observatorio de la revista feminista Alas Tensas se pronunció en su red social Twitter sobre el caso.
"Las activistas cubanas se encuentran en mayor estado de vulnerabilidad que el resto de las mujeres de la Isla. No solo porque el Gobierno de Cuba criminaliza su trabajo, sino porque sus familiares también están expuestas a la violencia institucional", denunció.
Recientemente, organizaciones feministas cubanas integradas al Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC) lanzaron una campaña a favor de las presas políticas y activistas de derechos humanos que sufren la violencia política e institucional en la Isla.
La iniciativa, denominada "Plantadas por nuestros derechos y hasta la libertad", denuncia que al igual que las mujeres víctimas de feminicidios, también las mujeres activistas cubanas sufren el desamparo legal y la discriminación ideológica.
"La violencia de género presenta distintas manifestaciones, como actos que causan sufrimiento, daño, amenazas, coerción u otra privación de libertades. En Cuba, estos actos se manifiestan en todos los ámbitos de la vida social y política, entre los que se encuentran la propia familia, el Estado, la educación, los medios de comunicación, el mundo del trabajo, la sexualidad, las organizaciones sociales, la convivencia en espacios públicos, la cultura, etc", señalaron en un comunicado enviado a DIARIO DE CUBA.
La Red Femenina de Cuba, la Alianza Cubana por la Inclusión, entre otras plataformas, lamentaron que "2022 arranca con 107 mujeres presas políticas por su activismo pacífico, en defensa de los derechos humanos", una "cifra que pulveriza todos los registros, exponente de la violencia doméstica e institucional" a las que están "sometidas en Cuba".
